¡Está mal!, pero tócame

Cap.13

A pesar de estado de ánimo todo decadente e irritado voy a buscar a Felix, yo solo, a la escuela. He tomado el auto de MinHo sin permiso mientras él dormía. Le deje una nota de que vendría con mi hermano y su amigo yo solo, solo espero y no se altere mucho cuando vean que su auto no está.

No pasa mucho cuando veo salir a una barrera humana rodea a mi hermano y a Chris mientras estos van la mirada baja. Son niños, uno tiene 7 años y el otro 8, ¿Cómo pueden pretender creer que ellos saben algo? Esto ya es absurdo. Más no bajo del auto y dejo que mi hermano y Chris entren para luego mirarlos. Felix abre sus ojitos muy grandes antes de darme un abrazo y un beso en la mejilla. Se ve tan feliz de que sea yo quien esté aquí que por un segundo me preguntó a qué se debe.

-¡Hyung!, ¿Podemos ir a la plaza un rato?

Oh, ya veo por qué.

-No lo sé, ¿Quieres que le pregunte a mamá?

Asiente y yo llamo a mamá para pedirle permiso. Debo aceptar que se sorprendió cuando escucho mi voz en el auto y no la de MinHo y todavía más cuando se enteró que su esposo no iba con nosotros como siempre lo hace. De hecho, creo que está más sorprendida de que yo mismo le dijera que tome el auto sin permiso. Ella me conoce tan bien que todo lo que he estado haciendo últimamente le sorprende. Pero dice que hasta cierto punto está orgullosa. Después de pedirle el permiso y de obligarme a llamar a MinHo, quito la conexión del auto para que Felix no escuche mi futuro regaño.

-Mamá nos dio permiso de ir a la plaza, ¿Necesitas algo? - pregunto apena toda la llamada.

-¿Por qué te llevaste mi auto, JiSung?

-Porque es el único que reconocen en la escuela de Felix, ¿cómo mierda esperas que sea el mío?

-De todos modos, ¡no me lo pediste!, ¿sabes acaso todos los problemas que voy a tener si les pasa algo?

-Nada va a pasar, ¿Quieres algo o no? Y de una vez te digo que llegaremos tarde porque vamos a ir al cine también.

Un gruñido se escucha al otro lado de la línea y eso me da entender que está muy, muy, pero muy enojado conmigo y mi actitud. Sé que cuando llegue va a castigarme otra vez y que esta vez, muy probablemente sea él quien me cambie de escuela. O quizás hasta me prohíba estudiar. No, eso ya lo veo muy drástico además de que es él quien siempre está molestando en que estudie.

-Cuando lleguen, tú y yo vamos a hablar de esto.

Y cuelga.

Me quedo mirando mi celular para poder asimilar que me colgó sin más, lo que jamás hace. Sacudo mi cabeza negando repetidas veces para luego girarme a ver a mi hermano y a Chris, los cuales están sonriendo y tienen las mejillas sonrojadas muy fuerte.

-Vamos ya, que tenemos mucho que hacer.

Antes de darse cuenta, ya nos encontraban en la plaza mirando todas las tiendas de ropa y juguetes. Los lugares donde había juegos de todo tipos fueron los que más visitando debido a que a mi hermano le gustan. Su amiguito si habla después de todo y resultó ser igual de hablador que Felix. Ambos se la pasaron en el área de videojuegos mientras que yo los miraba desde las sillas comiendo un poco de nieve.
Cuándo los vi aburridos, decidimos ir a la sala de cine y buscar una buena película para ellos. No se pusieron de acuerdo pronto así que terminamos por entrar a la última función de Monster University debido a ello. Les compré todo lo que quisieron ya que llevaba la tarjeta de MinHo, la cual tomé sin pedir, como auto.

La película duró cerca de dos horas, en las cuales Felix y Chris no hicieron ruido alguno. Yo por mi parte y debido a que de tipo de películas de aburren, me entretuve en mi celular mirando la última sesión de fotos que MinHo tuvo para la nueva serie en la que saldría. Al parecer sería un mafioso muy importante de Busan y su pareja sería una chica que todos conocen como Sana. Ambos son amigos desde niños y mi mamá sabe que desconfiar de MinHo es como desconfiar de ella misma así que jamás dice nada.

En cambio yo, siempre estoy buscando algo para molestar.

Al terminar la película, los tres optamos por la opción de comer antes de llevar a Chris a su casa. Los llevó por pizza, porque Felix pone ojitos de perrito regañado y yo no puedo con eso, así que henos aquí. Comiendo pizza con piña y pepperoni.

-¿Se divirtieron? - preguntó mientras los veo comer muy felices.

-Sí. - dicen al mismo tiempo sonrojado.

Yo los miro y podría jugar que son hermanos por lo lindo que son. Más existe una muy notoria diferencia entre que los hace ver todavía más tiernos. Quizás es el hecho de que Chris un poquito más bajito que Felix o que mi hermano tiene cabello rubio y Chris castaño claro. Quizás es porque son tan diferentes que se complementan mutuamente.

No sé, pero me agrada como se llevan entre ellos.

-Bien, dense prisa que llevaremos a Chris a casa.

Los dos sonríen y yo siento mi pantalón vibran con una llamada. Al revisar noto el nombre de MinHo en mi pantalla y me imagino porque llama.

Su tarjeta.

Contestó después de un rato de dejar que suene, preparando para el regaño de mi vida.

-¡Hola, MinHo!, ¿necesitas algo?

-¡¿Por qué mierda te llevaste mi tarjeta?! ¡¿Es que acaso no tienes la tuya, maldito niño idiota?!

-La mía no tiene los beneficios que la tuya, además, te compramos algo.

Un puchero se forma en mis labios aun cuando mi mayor no puede verme y la risita de Felix me distrae.

-¡No me interesa, JiSung! Los quiero en la casa ahora o yo mismos iré por ustedes, ¿está claro?

-Cómo el agua...

Y ahora soy yo quien cuelga la llamada justo antes de escuchar más quejas de su parte.

-¿Papi está molesto con nosotros? - pregunta Felix mirándome.

-Conmigo si, contigo nunca.