ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 20: ᴅᴏs ᴇɴᴀᴍᴏʀᴀᴅᴏs ᴇɴ ʙᴜsᴀɴ ʏ ᴄɪᴇɢᴏs ᴀ ʟᴀ ʀᴇᴀʟɪᴅᴀᴅ ᴅᴇ sᴇᴜ́ʟ

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El despertador natural estaba cantando "kikirikí", es decir, el gallo de la granja había empezado a cantar a las cuatro de la madrugada; lo que indicaba que era hora de que se levantaran Jungkook y Taehyung para empezar a realizar las labores matutinas de todo campesino. Sin embargo el castaño estaba profundamente dormido y ni siquiera había escuchado al gallo cacarear. Kim había caído como una piedra la noche anterior y lo único que soñaba en este momento era una atroz y horrible pesadilla.

Taehyung estaba corriendo abruptamente entre los matorrales de un bosque muy espeso y espeluznante, en medio de una tarde gris con un semblante lúgubre. Lo único que se escuchaba lejanamente era el eco del sonido de unas esposas chocar entre sí constantemente, pasos muy cerca de él, y la sirena del carro de la policía sonando. Lo iban a atrapar los policías que lo estaban buscando sin cesar y tenía que correr para evitarlo... por lo menos mientras se despedía de su pequeño Jeon, del amor de su vida. El sonido de la sirena se intensificó con más volumen, haciendo que se sentara en el suelo y se recostara a un árbol de tronco grueso como un roble, sólo logró cerrar los ojos con fuerza y tapar sus orejas con ambas manos para no escuchar ese sonido que lo atormentaba e inquietaba intensamente. Todo estaba perdido y sólo pudo abrir sus ojos para empezar a destilar gotas de lágrimas frías como un hielo totalmente gélido. Sabía que era un precio que le debía pagar al karma por actuar deliberadamente en contra de la voluntad de un ser humano, de su novio; más no quería alejarse de la persona con que quería vivir por el resto de su vida. De repente cambió el escenario y se encontraba en una celda con muchos garabatos subliminales en las paredes y las camas con sábanas repulsivas que daban ganas de vomitar por lo nauseabundo que se veían a simple vista. El castaño se miró así mismo, y llevaba un uniforme anaranjado. Al mirar hacia las rejas notó que había un chico de cabello azabache de espaldas y cuando se acercó a él, se dió cuenta que era su pequeño Jeon cuando se dió la vuelta. Jungkook estaba  con un aspecto desprolijo; su cabello estaba desordenado, tenía muchas ojeras, se veía que no estaba comiendo bien y su piel era muy blanca como un papel. Jungkook se despidió de él para siempre y luego se fue con otro chico de cabello aguamarina tomados de las manos. Kim empezó a gritar "¡Jungkook no me dejes!" "¡Yo te necesito!" Tanto fue la desesperación que empezó a darle manotazos a los barrotes de la celda, no obstante Jungkook no le prestó ni un mínimo de atención y se marchó con su reemplazo. Todo empezó a temblar y el castaño sentía que quería morir, y, salir de ese funesto y desagradable lugar.

El castaño sentía que alguien lo estaban zarandeando y en cuestión de segundos abrió los ojos; luego se encandiló con la luz del foco y estaba con mucha ansiedad que no podía ni respirar correctamente. Se encontró con la preocupante mirada de su novio Jungkook que estaba en su habitación para despertarlo con antelación, para que se organizara para empezar a trabajar por orden de su padre. El castaño lo miró asustado y se incorporó para sentarse y recostarse en el espaldar de la cama; su cuerpo estaba tan sudado al igual que su rostro con rastros de lágrimas y su cabello desordenado. Se veía meditabundo con relación a la horrible pesadilla que acababa de presenciar y que lo dejaba con una sensación escalofriante con un leve temblor en su cuerpo.

Jungkook que había venido desde su habitación para despertar a Taehyung, había escuchado los gritos donde su novio rogaba para que no lo dejara y suplicaba que se quedara con él. Por esta razón el azabache se dió cuenta que había tenido una pesadilla y decidió sentarse en la cama para atraer al castaño hacia él para abrazarlo; dónde el rostro de Taehyung reposaba en el hombro contrario y estaba empezando a tener hipo acompañado del llanto. Jungkook lo abrazó con sus brazos firmemente y le dió un beso en su cuello para tranquilizarlo, mientras sus manos subían y bajaban por la espalda de Kim con suavidad.

Taehyung no entendía porque demonios había tenido ese sueño tan deplorable y esperaba que solamente se quedara como un sueño agrio y qué no fuera a pasar de verdad más adelante. Kim ya veía como proyecto de vida estar con Jungkook y si el azabache lo dejaba definitivamente, prefería morir o decaer en las sustancias ilícitas para no estar conciente y sobrio... porqué sería una realidad cruda sin alguien que prácticamente es tu mayor obsesión y tu motivación para vivir. Jungkook sería alguien que simplemente nunca le dejaría de gustar, que nunca nadie podría igualar y que amaría por toda su vida; incluso si es posible lo buscará nuevamente en sus otras vidas restantes.

¿Escapar O Quedarme A Tu Lado? | TAEKOOK Donde viven las historias. Descúbrelo ahora