Cap2.

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Llegó para hacer daño.

Después de lo que acaba de pasar me entra aún más curiosidad sobre toda esta ciudad y sus secretos, pues supongo que sea quién sea, eligió a la víctima equivocada.

Después de un rato en el autobús, al fin llego a la escuela para tomar mis primeras clases del día.

--Bien lo primero es...clases de Literatura, vale me gusta!!

--¿Hablando sola Carrie?

Por dios, pero ¿porqué a mí?. Esa irritante voz tan chillona y espantosa que podría asustar hasta a los cuervos que viven en el techo de mi casa, se hace cada vez más fuerte.

--Si Fátima, me encanta hablar conmigo misma, hace que pueda hablar con alguien de mi misma inteligencia --sonrio falsamente

--Ahh sí, me olvidaba de que eres una estúpida nerd, que solo lee libros de miedo -se ríe- Uuuhhhh soy un monstruo y planeo llevarte de aquí.

Ojalá alguien se la llevara a ella, ya se me acaba mi paciencia respecto a la tonta que se movía de un lado a otro queriendo parecer alguien digno de dar miedo, cuando las luces del pasillo comienzan a parpadear.

--¿Y esto ahora? Madre mía, debería hablar con mi padre para que arregle las luces de la escuela.

--Si anda, has eso, encárgate de que tu padre, el señor dueño de este pueblo, haga algo por nosotros.

--Si anja, nos vemos luego estúpida.

<<Madre mía, me pregunto si su madre tiene mejor paciencia que yo, de seguro sí, no es fácil aguantar semejante tonta>>>

Mientras Fátima se marchaba, logro divisar al fondo del pasillo la misma figura de esta mañana, está parada muy quieta, pero esta vez puedo observar la sonrisa que se refleja en su rostro lleno de malicia.

Salgo caminando directo a él, quien para mi sorpresa aunque me veía acercarme, no fue capaz de moverse.

Llego frente a él y puedo sentir una tensión horrible, mi cuerpo entero temblaba, pero no sé exactamente si era de miedo u horror.

--¿Quién eres?--pregunté, mientras intentaba poder ver más que esa sonrisa que aún mantenía en su rostro- ¿Qué acaso no sabes hablar? ¿Quién eres? ¿Y porqué desde esta mañana me estás siguiendo?

Harta de no escuchar respuesta decido darme la vuelta, no estoy para perder el tiempo, pero una vos áspera me detiene con sus palabras.

--Son muchas preguntas, ¿no crees mi dulce Carrie?

Suelta una risa llena de maldad y soy incapaz de voltear.

--¿Qué pasa? ¿Ahora eres tú quién se quedó muda?

--Yo...

--¿Qué pasa?, ¿Qué no querías que te contestara?

Volteo para enfrentarlo, y ahí está, mirándome fijamente con esa sonrisa maquiavélica en su rostro ya casi al descubierto, ya que una parte de  la capucha que antes lo cubría se ha caído un poco hacía atrás.

--¿Quién eres?

--¿Qué quién soy? Muy fácil, resulta que vengo para saldar algunas deudas del pasado, y me he dicho, porque no le haces una visita a alguna chica linda, y aquí estoy, ¿sorprendida?

--No, gracias por la visita ya puedes irte.

--Ohh--se acerca más a mí, al límite de que tengo que alzar la cabeza para poder mirarlo a los ojos-- Dulce Carrie. ¿No quieres mi compañía?,  ¿Acaso me temes? ¿Temes te haga daño?

--No te tengo miedo.

--Eso ya lo veremos --se agacha un poco, para quedar a la altura de mi oído y susurra-- Disfruta de tu libertad, pronto serás solo mía y te juro que te encantará quemarte en el infierno al que pertenezco.

Se da la vuelta y desaparece de mi vista como si nada, dejándome pensativa con miles de ideas y dudas,  acerca del extraño de ojos grises y peligrosos.



Espero os guste 💗

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