Capítulo 23

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La respuesta del albino sorprendió a los hermanos y a Sanzu, quien había llegado hace poco al lugar, mientras que la castaña pensaba su respuesta.. si le pedía más tiempo para dar una explicación, significaba que dejaría de tener tantas dudas respecto a lo que hacían todos ellos.. tenía una vaga idea realmente..

Obviamente no era estúpida, más bien "despistada", pero desde sus primeros encuentros con ellos pudo notar bastantes cosas que le daban una pista de sus ocupaciones..

Takeomi, por ejemplo, no había demostrado demasiado, se había encargado de simplemente parecer un empresario con dinero, pero había sido lo suficientemente sutil a la hora de embriagarla la primera vez que se conocieron.. eso le daba una idea de que no era la primera vez que tenía que hacer que alguien (indiferentemente de ser hombre o mujer) bebiera demás o bebiera algo indebido para lograr sus cometidos.

Kokonoi, manejaba el dinero, al parecer de todos, pues desde aquella vez en su departamento no dudó en ponerle dinero al frente, su forma de vestir y la de los demás indicaba que manejaban altas cantidades de dinero ¿de dónde salía? No era difícil imaginarlo, en especial después de las hojas que vió al ayudarle a él.. nombres extranjeros, y cantidades de dinero exorbitantes, era evidente que se trataba de deudas, pero al ser tan altas, era seguro que no manejaban algo legal.

Los hermanos, desde el inicio se mostraron como unos matones, era evidente quienes hacían en su mayoría el trabajo sucio cuando alguien no quería pagar o requería una advertencia, y si no devolvían lo que debían, bueno.. tal vez la sangre de hoy demostraba que les sucedía si no se comprometían a cumplir..

Mochi.. con el no tenía tan claro que hacía, pero se veía tan similar a Takeomi, con la evidente diferencia de que era más corpulento, intimidaba simplemente al mirarte desde arriba, probablemente era un intermedio entre los trabajos de Takeomi, Kokonoi y los hermanos.

Sanzu.. ¿que podía decir de él? Después de su primer encuentro quedaba claro que compartía trabajo con los Haitani, con la leve diferencia de que él, quizá hiciera las cosas más "directas", pues al menos a ella, le demostró que sabía "torturar" de diferentes maneras, y aunque había sido suave con ella todo el tiempo, por lo que escuchó de los demás, era capaz de hacer cosas "indescriptibles" así que, probablemente el se encargaba más de los "trabajos finales".

Kakucho parecia más ser un asistente de Mikey, esto quizá por haber sabido cómo la rescató aquella vez de las garras del pelirosado, pero de cualquier manera, si estaba con ellos no podía confiarse solamente de eso, así que seguía manteniendo el pensamiento de que él también era peligroso, probablemente obedecía cualquier trabajo que el albino impusiera.

Y por último Mikey.. a él realmente no lo había visto hacer nada extraño, solo sabía que él manejaba todo como él quería, desde mandarlos a todos a hacer sus trabajos, hasta golpearlos como recién había hecho.. desconocia si era solamente por fuerza bruta o por alguna otra razón que ellos lo seguían sin reclamar por algún castigo o por seguir sus órdenes por más absurdas que pudieran ser, pero la ocasión que compraron los trajes de baño para ella en un local totalmente cerrado solo para ellos, fue lo que le demostró el nivel que tenían para que un local de esa categoría accediera a cerrar unas horas solo por ellos..

Sin embargo prefería tener conocimiento de todo, que el chico se lo dijera claramente para dejar de especular solamente.

-Bien.. te dejaré hablar, pero tengo una condición.. si yo pregunto algo quiero que me respondas de forma sincera ¿bien?

Hubo un silencio breve por parte del contrario, pareció pensarlo un poco, pues en realidad había un motivo para mantenerle oculto todo aquello, pero llegados a este punto, no tenía muchas opciones..

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