Curvy un amor de peso

Sexo y Besos

Capítulo 17

Sexo y Besos

Para Siempre — Magneto.

Tus jeans eran algo tan detestables

no permitían iniciar la batalla

echados en la hierba

me gustaba explorarte

hacia el sur

Al sur

Cuando me entrampa la melancolí­a

vuelven esos inolvidables dí­as

tú eres algo para siempre

tú eres algo para siempre.

Andrea platicaba hace unas semanas con su mamá sobre este tema, ella le preguntaba «¿Cómo podías escribir sobre hacer el amor a los trece o catorce años?» A lo que Andrea contestó «que no sabia como era exactamente, pero ya escuchaba de algunas compañeras que habían tenido sexo a esa edad». Los boomers que son los padres de muchos que fueron criados con el tabo del sexo, ellos pensaban a la edad de trece años los niños sólo aparecían en la cama y ya.

Les aseguro que el hablar de sexo con sus hijos a edades tempranas no los motiva a tener relaciones sexuales, al contrario, les ayuda a no andar preguntando a otros inexpertos o bobos como ellos, a prevenir embarazos no deseados, enfermedades o un abuso sexual por parte de algún amigo o familiar.

En fin ¿Por qué la canción? Ponle tantita atención a la letra, sí hablaba de cosas muy, muy bonitas y tiernas, pero también le dice que sus jeans no dejaban iniciar la batalla y le gustaba explorar a la chica de la canción. Es inevitable que de los catorce en adelante seas una bolsa de hormonas tremenda.

Bueno, pues después de la defensa sayayin de Irving pasaron unas semanas, estaban a unos días de los tan esperados quince años de Giselle, que sería algo para recordar, pero no nos adelantemos, todos se encontraban en una plática sobre educación sexual, para esto, a la directora se le había ocurrido mezclar a los dos grupos al A y B que para nada se llevaban, pero se les hizo una excelente idea, a partir de este momento no voy a mentir ni meter ficción en la exposición hecha por el ponente ni las preguntas realizadas por los chicos, para que vean el grado de estupidez de los alumnos de secundaria y por qué es bueno hablar con ellos desde un poquito más jóvenes.

El expositor puso una bonita película sobre un parto, donde el doctor metía literal toda su mano dentro de la vagina de la paciente, obviamente para sacar la placenta, luego los puntos hechos a la mujer pues ya saben que el perineo se desgarra en ocasiones o la mayoría de las veces, Andrea volteaba a ver el rostro de todas la chicas, era terror puro, después de dicho video, siempre continúan las fotos grotescas sobre las enfermedades venéreas y claro en aquel tiempo lo peor de lo peor que se escuchaba era SIDA, algunos reían, otros en verdad se veían impactados, una vez terminada la exposición comenzaron las preguntas y sí, aquí va lo peor de todo.

—Bueno chicos vamos a proceder a contestar sus preguntas sobre el tema, les entregamos unos pedazos de papel en los que pueden escribir y entregar en la cajita, no le pongan nombre para que no les dé pena —dijo el expositor.

Erick y Andrea estaban sentados uno al lado del otro, a donde quiera andaban ya juntos, después de todo dijo Andrea que le daría la oportunidad. Ambos se miraban y sonreían nerviosos, obviamente uno, no quería que el otro viera que duda tenía. Y no porque pensaran en hacer algo, sino porque a lo mejor fueras a hacer una pregunta sobre tu cuerpo. ¿No? Por ejemplo: Sol tenía catorce, faltaban tres meses para sus quince y ya tenía unos enormes senos, mientras que Andrea apenitas estaba empezando a surgir, de hecho, ni siquiera su amiga mensual había llegado, de eso estaba un poco agradecida, pues veía como sus compañeras se manchaban y tenían que cubrirse, por lo que no sufría aún, en fin, salió la primera pregunta, como dije, no mentiré, estas fueron y a la fecha hablan sobre eso.