Curvy un amor de peso

XV años.

Capítulo 21

XV años.

Quinceañera — Timbiriche

Y ahora, despierta la mujer que en mi dormía

Y poco a poco, se muere la niña

Empieza la aventura de la vida

Y ahora me enciende como un sol, la primavera

Mis sueños se convierten en promesas

Me cambia el corazón de quinceañera

Los XV años es ese evento super importante para los padres, ese evento donde ven que su nenita preciosa empezó a dar grandes pasos de mujer, bueno, algo así verdad, porque siguen prohibiéndote tener novio, votar, tomar y miles de cosas más, ¿Entonces? ¿Cuál es el fin de decir que te has vuelto mujer? Sol no había podido opinar en casi nada de la fiesta, eso sí, sus papás se la pasaban de pleito, pero ambos asistirían a la gran fiesta, cosa que tenía un poco estresada a la joven, bueno, un poco era poco. En fin, nos quedamos en que Andrea y Erick habían terminado por la güera Abril, Elisa estaba saliendo con Gustav y Sol había retomado un poco lo que tenía con Iván.

—Rosas, los arreglos tendrán rosas amarillas. ¿Pueden creerlo? —dijo Sol con molestia.

—Odio el amarillo y el verde —comentó Andrea.

—Tú odias todos los colores del arcoíris Andrea, eres oscura —contestó Karla.

—Claro que no, Elisa es igual que yo. ¿Verdad, Elisa? —expresó Andrea. Elisa suspiró.

—Claro, el rosa es lindo —dijo y todas la miraron.

—Creo que ya le pegó duro el alemán —dijo Abril quien ya era parte de las curvas peligrosas.

—¿Creen que él piense en mí como yo en él? —preguntó Elisa.

—Ni idea, pero deberías de hacer algo antes de que llegue su exnovia —dijo Andrea riendo.

—¿Eso fue una broma sobre mí? —preguntó Abril.

—Sí —dijo Andrea.

—Que linda, me hace sentir dentro del grupo —dijo Abril.

Llegaron Leonardo con un lunch robado, Erick e Irving.

—¿Cuánto a que no pagaste por eso? —dijo Andrea.

—¿Acaso me crees estúpido? El dinero no crece en los árboles, le hice la chillona a una de segundo y me dio medio sándwich, otra medio chicharrón y esta torta me la invitaron.

Vivía como rey a expensas de los demás.

—Todos van a ir el sábado. ¿Verdad? —preguntó Sol.

—Sí —contestaron todos.

—¿Nadie va a faltar? —preguntó Sol.

—No —contestaron todos.

—¿Alguien lleva a alguien extra? —preguntó Sol—. Si es así no lo dejaran pasar.

Todos se miraron.

—Bueno, Erick y Abril van juntos. ¿No? —dijo Irving.

—¿Tienes que decir eso? —dijo Erick.

—Ay no me molesta, somos amigos —contestó Andrea.

Erick al oír eso sonrió un tanto triste. No era que no le doliera a Andrea, él había dicho que quería ser su amigo. ¿No? Entonces ella actuaba como su amiga, pero sí se sentía un poco incómoda.