gemelas

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Uckermann abrió la puerta del apartamento e hizo una mueca.

Ucker: ¡Oh, mierda! - refunfuñó cuando vio el apartamento desordenado. - Dul, cierra los ojos. Se acercó a ella y le tapó los ojos.

Dulce: ¡¿Ucker?! - Se sorprendió al ser conducida al apartamento.

Ucker: Mantén los ojos cerrados, ¿de acuerdo? Apartó lentamente la mano de su rostro.

Dulce: Vale, pero... ¿No quieres que vea qué? ¿Te olvidaste de un amiguito aquí? Se cruzó de brazos y sonrió irónicamente.

Ucker: No seas tonto, solo necesito quitarte algunas cosas de la vista. - respondió tomando su ropa, zapatillas, calcetines y se llevó todo al dormitorio tirando todo al suelo y corrió de regreso a la sala.

Dulce oyó el portazo y sonrió.

Dulce: ¡¿Ahora no podré entrar en tu habitación?!

Ucker: De ninguna manera, pero... Puedes abrir los ojos ahora. - respondió sin aliento y la besó.

Dulce obedeció y sonrió mirando el apartamento.

Dulce: ¡Parece que está en orden!

Ucker: Genial, hubiera sido mejor si hubiera hecho esto antes de que llegaras. -Sonrió.

Dulce: Saber... Pero, ¿por qué me trajiste aquí a tu apartamento?

Ucker: Oh, porque has estado aquí antes, pero esta vez es diferente, porque ahora puedo decir que eres mi novia.

Dulce: ¡¿Desde cuándo te vuelves tonto así?! - sonrió mirándolo.

Ucker: Desde que empecé a descubrir que te quiero. La abrazó por la cintura.

Dulce: ¿Y cuándo sucedió eso? - Envolvió sus brazos alrededor de su cuello.

Ucker: Creo que poco a poco después de que rompiste conmigo... Creo que fue después de eso que empecé a ver a la chica maravillosa que realmente eras y luego a enamorarme de ti... - sonrió encogiéndose de hombros.

Dulce sonrió emocionada y sin perder más tiempo lo besó.

Ucker la abrazó con fuerza y la levantó del suelo, mientras la volvía a poner caminó con ella hasta que cayeron en el sofá sin dejar de besarse. Ucker bajó los labios hasta su cuello y chupó la zona con deseo.

Dulce sonrió, se mordió los labios y, resistiéndose, lo empujó por los hombros.

Dulce: Ucker... ¡Se comporta! - sonrió mirándolo a los ojos.

Ucker: Pero ahora estamos saliendo. -Argumentó.

Dulce: Sí, pero... Tomémoslo con calma, ¿de acuerdo? - preguntó amablemente.

Ucker contuvo la respiración sorprendido, pero asintió con un suspiro. Le dio un besito y se sentó en el sofá.

Dulce: Gracias por su comprensión, ¿ves? Ella le sonrió y le besó la mejilla.

Ucker: Es difícil, pero lo entenderé y me guardaré para mí mismo. - asintió molesto, arrancando una sonrisa de Dulce.

Alfonso acarició el cabello de Any mientras veían la película. Any suspiró relajada y se acostó de lado envolviendo un brazo alrededor de la cintura de su novio. Poncho sonrió y la acurrucó besándole el pelo.

Poncho: ¿Ya no quieres ver la película?

Any: No... Me he vuelto perezoso y tengo mejores cosas que hacer. - susurró ella, escondiendo su rostro en el hueco de su cuello y rozando con su nariz la región, perdiéndose en el aroma de su piel.