Me sentí como volando en una nube al llegar a casa. No podía creer que me estuviera pasando algo así, precisamente a mí. Recordé entonces que Jhon vivía a unos paraderos más allá de mi casa. Pero, ¿por qué tomar el mismo bus al cual subí? Quizá todo era fruto de la casualidad y yo ya construía una novela con todo lo que había sucedido. Pero Vero dijo que él no paraba de mirarme. Entonces, no había casualidad alguna y de verdad había subido aquel bus para intentar hablar conmigo. ¿Acaso mi vida monótona y rutinaria se volvería como esas cursis novelas y series donde la protagonista era buena, muy buena, y la mala era mala, muy mala, rayando ya casi a lo ridículo? Bueno, para comenzar, desde que desperté, no había hecho nada más que compadecerme de mí misma. Eso no era aceptable. Y entonces recapacité que en verdad estaba comenzando a actuar como las protagonistas de las novelas y series rosas que tanto amaba mi hermana Bianca. No podía seguir así. Era momento de tomar el control de mi vida. ¿En verdad mi vida no era de color rosa? La verdad no, y eso nunca me había importado. ¿Y no tenía por qué ser diferente ahora? Estaba tan concentrada en mis propios pensamientos que no prestaba atención a las preguntas de mi madre y hermanas, respondiendo de cualquier modo mientras tomaba lo más rápido posible la humeante sopa que mi madre me había servido en pleno verano al llegar la tarde. Como ya era costumbre, Vero vino a mi casa para hacer las tareas en la mesa de la sala mientras escuchábamos música y tratábamos de adivinar qué canción ganaría como la más escuchada del día. Mi gato Chanclas nos acompañaba mientras dormía cómodamente en una de las sillas. Vero seguía hablando de los raros muchachos del bus. Yo trataba de esquivar cualquier pregunta sobre el tema. Al terminar los deberes, se fue a su casa. Y cuando llegó la noche, ya había tomado una decisión: no huiría más y enfrentaría lo que tuviera que suceder de hoy en adelante.
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¿Mi Vida no es color de Rosa?...
Novela Juvenil"Melanie se siente atrapada en la monotonía y aburrimiento de una vida escolar donde no encaja en ningún grupo. A pesar de tener cerca a sus dos mejores amigas de la infancia en la misma escuela, la falta de emoción la sumerge en una profunda insati...