Capítulo 28: Para los dos

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Apreté fuertemente la manta que estaba a mi alrededor mientras contemplaba las luces brillantes de la ciudad.

*¿Por qué aun no vienen a buscarme? ¿Y si está muy grave?*

Miré una vez más hacia adentro a través de los ventanales, pero no miré al grandote por ningún lado. Mi pecho estaba teniendo un dolor horrible porque mi omega sabía que su alfa lo necesitaba. Mi mente seguía regresando a suplica porque no lo dejara y lo hice.

Abracé más fuerte la almohada del sillón en el que me encontraba, como si eso fuese a aliviar un poco el dolor. No lo hizo.

Creí haber estado por días ahí afuera hasta que finalmente observé al grandote abrir la puerta de cristal y salir al balcón.

—Doc dice que entres.

Me levanté rápidamente y lo pasé prácticamente corriendo hasta subir las escaleras. La puerta de la habitación estaba abierta, pero me detuve cuando noté a "doc" caminar hacia mí. Observé rápidamente a Yibo dormido al centro de su gran cama.

—Esta sedado...

—¿Sedado?

—Era necesario —Asintió —No iba a dejar que trabajara en él. Le quedan unos 20 minutos —Levanto la vista del reloj que tenía en le muñeca —El RUT no dejará que el sedante sufra mucho efecto, de igual manera eso no sería lo ideal, sino que lo viva como todo alfa.

—Pero... ¿y su herida?

Se encogió de hombros.

—No le importará. Ya está desinfectada, era lo importante —Me observó unos segundos de arriba abajo. Se me hizo de mala educación, pero no dije nada —Ahora entiendo porque lo hizo.

—¿Qué?

Me observó directo a los ojos.

—Eres su omega, solo pasa una vez.

—No entiendo.

Me sonrió de lado.

—Al parecer debes hablar con él —Señaló sobre su hombro hacia la cama —Aunque me gustaría estar presente, debo irme —Camino hacia la puerta.

—¡Espere! ¿Sabe qué es lo que pasó? ¿Por qué... está en esta condición?

Me miró uno segundos.

—Lo sé —Asintió, pero no dijo más.

—¿Puede decirme?

Ladeo su cabeza un poco y me observó atento.

—Entró a la jaula.

—¿La jaula? ¿Qué es la jaula?

—¿Sabes?... — Se acercó a mí —Jamás me hubiese detenido a hablar con alguien como tú, pero... es verdugo —Señaló a Yibo —Y tú eres su omega, entonces entra a la jaula y boom, estamos aquí —Se rió como si acabara de contarme un chiste, pero no entendí nada —Es... es curioso ver lo que hizo —Movió las manos para dar mayor énfasis — Y tú... ¿No sabes lo qué es la jaula?

—Yo... no.

Se rió de nuevo.

—Mas le vale que te enseñe a cerrar la boca, porque le causaras problemas —Asintió para sí mismo —Verdugo tiene algunos enemigos y... ahora resulta que no es inquebrantable —Me miro serio —La jaula es un lugar de peleas cuerpo a cuerpo.

Tragué duro.

—Pero porque...

—No puedo quedarme aquí a hablarte de algo que desviste aprender por tu amo... bueno, como sea. Por cierto, los medicamentos están sobre el tocador, me voy.

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⏰ Última actualización: Dec 23, 2023 ⏰

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