Capítulo 33: SE MÍA

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Capítulo final

— ¿A donde vamos? — Madeline pregunto ya sentada en el avión.

— A un lugar qué te encantará, estoy seguro — Bastián no podía dejar de ver a Madeline —

El avión aterrizó y un auto los llevo a una amplia casa en dónde estuvieron cómodos durante dos días. Estuvieron desconectados del mundo y solo intentaron recuperar el tiempo perdido.

Después de esas pequeñas vacaciones regresaron a la villa de los Donovan en San Diego. Madeline fue recibida por todo el personal Adela y Samuel fueron los más felices de verlos juntos.

Los días pasaron y ambos estaban más enamorados que nunca. Una tarde Bastián le pidió a Madeline que salieran a cenar ella eligió un lindo vestido azul muy elegante y femenino muy a su estilo.
Al llegar al restaurante Bastian ya la esperaba como todo un caballero le brindo el asiento y comenzaron con su velada.
En un momento muy especial Bastián saco de su bolsillo una cajita de terciopelo rojo , dentro estaba un anillo de compromiso de oro con un gran diamante en solitario.

— Madeline Cross ¿Quieres casarte conmigo? Nada más me haría más feliz que ser tu esposo ya que eres la única mujer con la que quiero pasar el resto de mi vida — Bastián tenía lágrimas en los ojos al hacerle su propuesta a Madeline.

— Claro que sí mi amor — Madeline no contuvo sus lágrimas.

Bastián coloco el anillo en el dedo de Madeline — Esta vez será perfecto, será lo que tú te mereces —

Bastián le dió un delicado beso a Madeline — ¿Y mi otro anillo? — pregunto Madeline al ver que era otro anillo.

— Ese está en tu joyero. Cómo este es un nuevo inicio es otro anillo. Madeline se que el pasado no lo puedo cambiar o borrar pero estoy seguro que nuestro futuro sera el mejor , te lo prometo —

Los preparativos de la boda comenzaron y el tiempo paso rápidamente. Los meses se convirtieron en días y todo estaba espectacular. El jardín de la casa estaba decorado de madera fastuosa, la elegancia estaba hasta en el más mínimo detalle. A la ceremonia solo fueron invitados los más allegados a la familia Donovan, desde New York vino Sophie, Jonathan, Bria y Peyton. También llegó desde Suiza la tía Eugenia. No podía hacer falta Annia y Néstor. Robert juntó con su esposa fue invitado. También estuvieron presentes Helena y Ernesto Capaldi entre otros invitados.
Madeline estaba en su habitación afinando sus últimos detalles de su vestimenta cuando Adela enteró.

— Señora acaba de llegar este paquete y me pidieron que se lo entregara de manera urgente — Adela tenía en sus manos lo que parecía un regalo de bodas.

— Gracias Adela — Madeline tomo el paquete y al abrirlo vio una peineta plateada con cristales blancos y unos pocos azules a lado de la peineta tenía una pequeña nota.

Madeline o Caitlin: se que te parecerá extraño saber de mi por este medio. Me am informado que te casarás y lamentó no estar presente ese día pero de todo corazón te deseo mucha felicidad. Te preguntarás qué ha sido de mi , te informo que estoy viviendo en Chile, he encontrado al amor de mi vida y espero regresar a Michigan para casarme con ella , pero basta de hablar de mi. Te envío este pequeño regalo ya que en este día debes de tener algo nuevo, algo regalado algo prestado y algo azul así que te regalo esta peineta como algo regalado y algo azul.
Me despido esperando volvernos a encontrar.
Liam Sean

Madeline se puso feliz de saber que Liam estaba bien. Pido que le colocarán la peineta y salió al jardín. Frente a ella ya la esperaba Bastián con un lindo traje y una gran sonrisa, nerviosa dió sus primeros pasos suspiro y pedía que su felicidad comenzará con esa boda. Conforme caminaba recordó esa boda en el restaurante japonés, donde solo la acompaño su amiga, su hermana y dónde se sintió más sola que nunca y ahora estaba rodeada de personal que la estimaban.

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