¡Eyy! Me gustas...

Pequeño bum

Mario acaba yéndose con sus amigos y yo con las mías. No se lo discuto... Carlota le ha echado una indirecta y le ha molestado. Otra celosa... De verdad, esto empieza a no gustarme ni un pelo.

Entramos en la discoteca y bailamos sin que nadie conocido nos vea.

Al cabo de un buen rato decidimos ir al baño.

Entramos y nos arreglamos un poco.

Al salir nos encontramos a Mario y a un amigo suyo.

Las chicas suben y yo las sigo. Pero Mario me coge del brazo y me detiene. Su amigo se va y ambos nos quedamos solos. Comenzamos a dar una vuelta por el enorme patio mientras hablamos y nos besamos. Lo echaba de menos. Es hermoso. Ojalá esto nunca acabe...

-Chicos, no podéis estar aquí.-Nos dice un guardia de seguridad.

Mario me da la mano y nos dirigimos hacia las escaleras.

Observo como al fondo nos miran cuatro de sus ex novias y su mejor amigo, el que por cierto, me cae mal.

Noto como en sus ojos nace la envidia.

Pero entonces, piso un escalón, me resbalo y caigo al suelo.

Todos ellos se empiezan a reír, incluido Mario.

Me levanto rápidamente y bajo el resto de las escaleras.

Me quiero morir.

Definitivamente no tenía que haber venido.

-¡Eyy! ¡Alicia! ¡Espera! -Grita Mario incorporándose a mi lado.-¿Estás bien?

-Genial... Como nunca... Acabo de hacer el ridículo y encima tú te ríes.

-Vale vale... Perdón. Pero tú también lo habrías echo, ¿no?

-¡No!

-Bueno... Pero no te enfades que yo te amo.-Dice dándome un beso en los labios.-¿Segura de que estás bien?

-Si...