𝐋𝐢𝐠𝐡𝐭 𝐢𝐧 𝐓𝐞𝐦𝐩𝐞𝐬𝐭‖𝐁𝐚𝐤𝐮𝐠𝐨 𝐊𝐚𝐭𝐬𝐮𝐤𝐢 • 𝐅𝐞𝐦𝐚𝐥𝐞 𝐎𝐜

𝟎𝟏𝟏

𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫 𝐨𝐦𝐧𝐢𝐩𝐫𝐞𝐬𝐞𝐧𝐭𝐞

Había pasado un día desde que el festival terminó, Tanaka había descansado lo suficiente, ahora estaba sana y salva. Se encontraba en su habitación, estaba en el suelo mirando al techo, reflexionando en cómo era posible que los delfines fueran tan crueles "𝘗𝘦𝘳𝘰, 𝘴𝘶 𝘤𝘰𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘮𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘦𝘴 𝘮𝘶𝘺 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘤𝘪𝘥𝘰 𝘢𝘭 𝘥𝘦 𝘭𝘰𝘴 𝘩𝘶𝘮𝘢𝘯𝘰𝘴, ¿𝘈𝘤𝘢𝘴𝘰 𝘴𝘰𝘯 𝘭𝘢 𝘱𝘦𝘳𝘥𝘪𝘤𝘪ó𝘯 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘩𝘶𝘮𝘢𝘯𝘪𝘥𝘢𝘥? ¿𝘚𝘦𝘳á𝘯 𝘭𝘰𝘴 𝘷𝘦𝘳𝘥𝘢𝘥𝘦𝘳𝘰𝘴 𝘷𝘪𝘭𝘭𝘢𝘯𝘰𝘴? ¿𝘖 𝘴𝘰𝘭𝘢𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘴𝘰𝘯 𝘦𝘭 𝘳𝘦𝘧𝘭𝘦𝘫𝘰 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘤𝘰𝘥𝘪𝘤𝘪𝘢 𝘺 𝘮𝘢𝘭𝘥𝘢𝘥 𝘥𝘦𝘭 𝘴𝘦𝘳 𝘩𝘶𝘮𝘢𝘯𝘰 𝘦𝘯 𝘶𝘯 𝘪𝘯𝘵𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘥𝘦𝘴𝘦𝘴𝘱𝘦𝘳𝘢𝘥𝘰 𝘥𝘦 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦𝘷𝘪𝘷𝘪𝘳 𝘦𝘯 𝘶𝘯 𝘦𝘯𝘵𝘰𝘳𝘯𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘳𝘢 𝘮𝘶𝘤𝘩𝘰 𝘮á𝘴 𝘧𝘶𝘦𝘳𝘵𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘢 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘢 𝘦𝘴𝘱𝘦𝘤𝘪𝘦 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘢𝘭 𝘧𝘪𝘯𝘢𝘭 𝘤𝘰𝘯𝘷𝘦𝘳𝘵𝘪𝘳𝘴𝘦 𝘦𝘯 𝘶𝘯𝘢 𝘦𝘯𝘧𝘦𝘳𝘮𝘪𝘻𝘢 𝘱𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘱𝘢𝘳𝘢𝘴𝘪𝘵𝘢𝘳𝘪𝘢 𝘥𝘦𝘴𝘵𝘪𝘯𝘢𝘥𝘢 𝘢 𝘥𝘦𝘴𝘵𝘳𝘶𝘪𝘳 𝘺 𝘤𝘰𝘯𝘴𝘶𝘮𝘪𝘳 𝘦𝘭 𝘱𝘭𝘢𝘯𝘦𝘵𝘢 𝘤𝘰𝘮𝘱𝘭𝘦𝘵𝘰?" Después de unos largos minutos meditando la respuesta decidió que preguntaría a la persona más inteligente que conocía, a Katsuki, además de que no habían hablado desde hace rato por lo que sería una buen tema de conversación. Revisó su chat con él, todos sus mensajes habían sido ignorados , entre la lista estaban "Hola gruñón :D, ¿Cómo están tus heridas?" "Oye, ¿Quieres jugar Street Fighter? Mejoré mucho mi técnica desde la última partida >:)" "Hey! No me ignores, te voy a acusar con tu mamá" "¿No quieres ir a comer ramen? Desde que llegué no he podido ir a comer en el puestito de la esquina xd Brócoli dice que están muy buenos, pero es probable que nos dé diarrea, en tu caso explosiva JAJA" "¿Kats?" Los mensajes estaban intercalados por unas dos horas en cada mensaje, no entendía qué le sucedía incluso le llamó por el apodo que más le molestaba para que así le contestara "𝘕𝘰 𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘦 𝘥𝘪𝘨𝘢 𝘒𝘢𝘵𝘴, 𝘶𝘴𝘶𝘢𝘭𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘴ó𝘭𝘰 𝘭𝘰 𝘶𝘵𝘪𝘭𝘪𝘻𝘰 𝘤𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘮𝘦 𝘪𝘨𝘯𝘰𝘳𝘢 𝘺 𝘴𝘶𝘦𝘭𝘦 𝘧𝘶𝘯𝘤𝘪𝘰𝘯𝘢𝘳 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘢𝘩𝘰𝘳𝘢 𝘴𝘰𝘭𝘢𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘭𝘰 𝘭𝘦𝘺ó 𝘴𝘪𝘯 𝘳𝘦𝘴𝘱𝘰𝘯𝘥𝘦𝘳. ¿𝘗𝘰𝘳 𝘲𝘶é 𝘯𝘰 𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢𝘳á 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘰 𝘭𝘭𝘢𝘮𝘦 𝘢𝘴í? 𝘉𝘶𝘦𝘯𝘰, 𝘭𝘦 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘰 𝘱𝘳𝘦𝘨𝘶𝘯𝘵𝘢𝘳" A pesar de que era evidente de que el rubio no tenía ninguna intención de hablar con ella, Tanaka decidió llamarle para ver cómo se encontraba su amigo.

En la casa de los Bakugo, se encontraba el muchacho ordenando sus cuadernos y su cama para bajar a comer, luego se dedicaría a estudiar. Era cierto que había ignorado a su amiga pero estaba atónito por su pelea ¿Cómo la había lastimado tanto? ¿Cómo era posible que la hubiera confundido con el maldito Deku? En su mente había una batalla interna por responderle o no, estaba tal vez ¿Apenado? Era un sentimiento similar al que tenía cuando discutía con ella por el peliverde cuando eran niños "𝘛𝘰𝘥𝘰𝘴 𝘦𝘴 𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘴 𝘢𝘭 𝘦𝘴𝘵ú𝘱𝘪𝘥𝘰 𝘋𝘦𝘬𝘶 𝘥𝘦 𝘮𝘪𝘦𝘳𝘥𝘢" Sus problemas giraban alrededor de ese individuo, incluso la relación que tenía con su mejor amiga, no sólo lo estaba alcanzando si no que también empezaba a meterse en su vida cotidiana. Una llamada se hizo visible en la pantalla de su celular interrumpiendo su diálogo interno, el número estaba guardado cómo "Hō" el nombre era simple y corto pero en comparación a sus demás contactos era bastante bueno ya que la mayoría eran números sin registrar. Suspiró "𝘓𝘢 𝘦𝘴𝘵ú𝘱𝘪𝘥𝘢 𝘦𝘴 𝘮𝘶𝘺 𝘮𝘰𝘭𝘦𝘴𝘵𝘢" y con un poco de resignación contestó el teléfono.