Ninguno de los dos [Malakev]

03 - Amigas

—¿Y como vas con Diego? — preguntó aquella chica de ojos verdes y pelo ondulado

—¿A que te refieres exactamente con esa pregunta?

—Me vas a decir que no has hablado con él desde Camerún — el pelinegro solo apretó sus labios como última opción de comunicarle que tenía la razón — ¡Ay, no puedo contigo Kevin Nahin!

—¡Oye!

—¿Qué? ¿Quieres que te felicite y te de un cafecito por ello? Me va a dar el soponcio

—Ya sé, solo que me han dicho bastantes veces ya Nahin en el día como para aguantar que lo hagas otra vez — se quejó con la cabeza baja el chico

—¿Quién además de mi tuvo la dicha de llamarte por el nombre que menos te gusta por algo mal que hiciste?— mencionó nuevamente la chica con los ojos entrecerrados

—Ángel Malagon, el portero y no lo hizo por mis idioteces esta vez, aunque no me molestó realmente que lo mencionara terminé correteándolo como gallo

La chica se quedó observando cada uno de los gestos y palabras que el contrario decía y se preguntaba como en ciertas ocasiones cómo podía seguir ahí, suspiró y lo miro con ambas cejas alzadas dándole a entender cierta pregunta.

—¿Qué? Si, es gay, pero tiene novio y no soy una gata rompe hogares, además de que estoy apartado

—Ajá, se nota

—¡Fati!

—Dios mío, ¿por qué tuviste que salir hombre Kevin?

—Ni yo se. En fin, ayúdame por favor, no soporto ver esos ojos con heterocromia sabiendo que jamás me verán de una forma romántica, ayúdame te lo ruego — sus manos se juntaron a manera que estaba a nada de arrodillarse para implorarle a la chica

—Está bien, pero si no funciona adiós a todo

—¡Si! ¡Gracias Fátima, te adoro! — ambos se juntaron en un abrazo donde Fátima negaba levemente con su cabeza, aunque mantenía su sonrisa, tampoco podía odiar a Kevin

—Ándale, ándale

Después de eso la charla fluyó, bien Kevin había dicho que Fátima era solo una amiga, la cual si, en efecto, le llegó a llamar la atención pero pronto se dio cuenta que era más del lado de su misma "especie" que de el otro lado, aunque no podía no mirar a ambos lados, tenía cierto ojo alegre en cualquiera de las situaciones y bueno ella fue quien le ayudo a encontrar esa parte de manera más tranquila.

Al menos en lo que podía, Kevin es un chico muy indeciso que probablemente en un día diría que ama a las mujeres y otro que ama a los hombres.

Además de que Kevin hace mucho no tenía como tal una relación, había sido al menos hasta esos momentos hetero en todo el significado de la palabra.

Y ahora se encontraban ahí tratando de resolver la existencia de Kevin de alguna manera pues a veces parecía que se le caería la cabeza pero no sucedía pues la tenía pegada.

Por otro lado en la misma bella Ciudad de México estaba aquella pareja que ni siquiera se hablaba únicamente por aquella situación dada hace unos momentos.

La música seguía sonando y bueno era prácticamente lo único que mantenía el ambiente no tan incómodo y tenso a como lo era hace unos momentos atrás.

—¿Entonces a las 4 debemos estar allá, cierto? — Ángel asintió ante la pregunta de su novio

Ambos tenían ese compromiso de ir con sus debidas selecciones para jugar probablemente el uno contra el otro, aunque era algo dudoso y probablemente no pasaría, de todas maneras ambos fueron convocados y bueno para ninguno de los dos era un problema pues podrían verse desde lo lejos, o al menos el portero lo pensaba así.