Mi perdición

Capitulo 38. Pasado

Scott:
-6 años atrás-

-¡Te dije que ese luchador iba a ganar!

-Bien, acepto mi derrota, mi hijo tenía razón- a mi padre se le forma en la cara un gran sonrisa

-Obvio, cuando se trata de deportes soy el mejor, siempre se quien gana- digo con confianza

Mi padre me rodea con su brazo mientras caminamos hacia el estacionamiento- Por qué aprendiste del mejor, osea de mi - mi padre es igual que yo en ese sentido los dos tenemos mucha seguridad

Río- Bien, todo lo aprendí de ti padre-

-Exacto-

Vamos caminando por el estacionamiento en busca de nuestro auto, lo encontramos bastante rapido y nos dirijimos  a casa, debo admitir que todo el camino fue muy ameno, nos reimos mucho y la pasamos genial sin duda fue un gran día.

Una vez que llegamos a casa estaba super emocionado por contarle a mi madre todo lo que paso en la pelea y como le gane a mi padre con las predicciones de la pelea.

 Sin embargo lo que vi al entrar por esa puerta no estaba ni cercano a ser la idea más loca que pude tener ni siquiera el escenario más caotico que mi cerebro pudo imaginar. 

Nunca lo espere,o tal vez si pero nunca imagine presenciar tal escena.

Mi madre estaba con otro hombre teniendo relaciones en la sala de nuestra casa.

-¡Que carajos!- mi padre estaba tan furiosos, lo pude notar en el instante y era más que comprensible, ver a la mujer que más ama engañarlo en su propia casa fue arollador. Mi padre fue directo a donde ellos se encontraban para poder ver la cara de aquel hombre que estaba robando el amor de su mujer y ni él pudo cree lo que veia, por que aquel hombre que le robanba el cariño de su amada era su propio y unico hermano.

-No puedo creelo.... tu... tu.... ¿Mi hermano?- mi padre estaba en shock 

Mi madre trataba de levantarse del sofa y cubrirse al igual que mi... tio-Todo tiene una explicación cariño- 

-No puedes ser más sinica- dijo con bastante odio- y si todo tiene una explicación, entonces dime ¿Qué carajos es esto?, dime que mis ojos me estan engañando, dime que no es verdad lo que ven, dime que no te estas acostando con mi hermano, dime que no me dejaste de amar.- mi padre estaba la borde de las lagrimas y en cada palabra podria apreciar su dolor, en cada palabra dejaba un  pedazo de su corazón, de su alma...

-Hermano perdón, yo.... no sé que paso, solo perdón de verdad que...

-No hables más, no te quieoro volver a ver en mi vida

-Por favor herm...

-Por favor nada y no me vuelvas a decir hermano, por que esto no se le hace a un hermano, esto no se le hace a alguien de tu familia, no a alguien que quieres y amas.

-Por favor, calmemonos y hablemos como adultos-

-¿Hablar como adultos?, valla que estas loca, aqui no hay nada de que hablar, todo esta dicho - mi padre dio media vuelta y fue hacia mi direccion.- Vamos hijo, vámonos de este asqueroso lugar- tomo mi mano y nos dirigimos a la puerta de salida

-No te puedes llevas asi a Scott, es mi hijo tambien 

-CALLATE- mi padre nunca fue de gritar a menos que estuviera muy muy enojado, pero ese grito salió del alma fue un basta ya de mentiras fue un se cabo definitivamente

No dijo más y salimos por esa puerta, nos subimos al auto y mi padre conducio hasta llegar a la casa de mi abuela, el me dejo ahi sin darle muchas explicacionea a mi abuela, solo le dijo que me cuidara.