❥. CAPÍTULO XIX

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Un año, ha pasado un maldito año desde que Hyunjin se fue de la casa, la pequeña hija de Jeongin ya tenía 3 meses, ante los ojos ajenos, Yuna era un angelito, una pequeño y dulce angelito. Jeongin agradecía la ayuda que Chan y Jisung me daban, si ellos no estuvieran, él ya estaría muy loco, ser padre soltero no era nada fácil.

Desde que Chan y él se besaron, se ponía muy nervioso con su presencia, intentaba disimular sus nervios, pero le era imposible, no podía estar tranquilo. Ellos no habían hablado del tema, ni siquiera lo habían intentado hablar, los dos estaban nerviosos.

Jeongin se encontraba en su casa, con Jisung cuidando a Yuna, que cada día crecía más, le entristecía enormemente pensar que algo le había pasado a Hyunjin y por eso su desaparición, aunque intentara no llorar en las noches, no podía, el dolor era grande, nadie podría entenderlo. Estaba tan sumido en sus pensamientos que se sobresaltó cuando el teléfono sonó, no iba a contestar hasta que vio el número, su cuerpo se alertó "Estación de policía", no sabía cómo ponerse, en el fondo deseaba que sean noticias de Hyunjin.

—¿Bueno?

—Buenas tardes ¿Hablo con el señor Yang Jeongin, el esposo de Hwang Hyunjin?

—Así es, soy yo ¿Pasa algo?

—Buenas tardes, habla el comisario Park. Bien señor Yang, usted levanto una denuncia por desaparición de su esposo ¿Correcto?

—Si señor Park, es correcto.

—Señor Yang, queremos informarle que encontramos el carro de su esposo a las afueras de la cuidad, en una barranca

—¿Cómo dice? ¿Y él? ¿Lo encontraron? ¿Cómo está? ¿Dónde está?

—Lo siento mucho... Señor Yang no sé cómo decirle esto, posiblemente y en las condiciones que se encuentra todo, todo indicia que ocurrió un suicidio.

—¿Q-Qué está tratando de decirme?

—Ha pasado más de 1 año, señor Yang, encontramos el cuerpo de su marido, claramente está en descomposición absoluta y será muy difícil hacer alguna autopsia o prueba forense.

El corazón de Jeongin de partió en mil pedazos, el aire abandonó sus pulmones y las lagrimas comenzaron a hacerse presentes.

—No. . . No señor Park, él no puede estar muerto, por favor dígame que esto es una mentira ¡Por favor! —susurró con la voz quebrada.

—Lo siento señor Yang, realmente lo siento, no hay nada más que podamos hacer y es muy imprudente pedirle esto, pero necesitamos que venga y firme un acta de defunción.

Jeongin no dijo nada y colgó el teléfono, su cuerpo chocó y se deslizó por la pared de la sala, con un terrible nudo en la garganta.

Sus lágrimas salían sin intención de querer detenerse, Hyunjin estaba muerto. . . Era algo obvio ¿No? Fue mucho tiempo sin saber de él, no aguanto todo lo que me hizo y se suicidó, pensó, ¿Cómo le diría a su hijo que su padre está muerto? Su hija recién nacida nunca conocería a su padre, ¿Por qué siento que todo es mi culpa? ¿Por qué? Yo lo amaba.

El dolor se hacía cada vez más grande, su corazón le dolía y sentía que iba a explotar, quería aguantarse las ganas de llorar, pero no podía, los sollozos se hacían mas fuertes y el aire comenzaba a faltarle.

—¿Jeongin? —Jisung entró a la sala— Innie ¿Qué pasa?

—Está muerto, Jisung . . . Hyunjin está muerto —por fin pudo llorar fuertemente y desahogarse —Encontraron su auto en una torrentera a las afueras de la ciudad, también encontraron sus restos en total descomposición, y-ya... no se puede hacer nada.

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