Cap 8

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Black Abyss se acercaba al lugar en donde se escuchaban los sonidos de batalla, viendo a los que parecían ser los guardias de tal lugar bajando de los muros, mientras podía posar su vista en manos que intentaban escalar los muros, y escuchar los claros golpes en la puerta.

Algo intentaba entrar, y bueno, subir.

"¡Hey! ¡Apresurense y huyan de aqu-!"

Cuando los guardias la vieron a ella y Elise parecieron tener un brillo de esperanza, el cual se apagó rápidamente cuando vieron que sus placas no eran nada más que bronce.

Black Abyss quiso suspirar por lo molesto que era esto del rango actualmente.

Pero la Aventurera simplemente siguió caminando en dirección a la puerta principal.

"¡Ustedes! ¿¡No escucharon!? ¡Váyanse, ahora!" El guardia gritó con la esperanza de que al menos esas Aventureras novatas se salvaran, pero no parecían querer hacerle caso, viendo a la que iba vestida de blanco sacar su espada.

Ésta apuntó la misma hacia adelante y luego la llevó hacia atrás, como si estuviera por dar una estocada.

Los guardias escucharon poderosos pasos detrás de ellos y cuando lo observaron, vieron la muerte delante de ellos, una amalgama de esqueletos unidos en un solo ser de un tamaño superior a los 4 metros, el grupo de guardias gritó despavorido e intentó escapar.

Pero la criatura habría golpeado mucho más rápido, matándolos en el acto. Al menos si no fuera porque, de repente, lo que parecía ser una espada intangible, lo atravesó, y repentinamente se lo llevó consigo, apareciendo delante de la mujer de blanco como si ésta le hubiese tirado un gancho.

Una onda expansiva dorada salió de la mujer, cubriendo al monstruo el cual quedó totalmente inmóvil.

Los guardias quedaron totalmente asombrados, aún más cuando la mujer saltó y de una patada rompió al monstruo desde su pecho hasta su cabeza, partiéndolo casi a la mitad de un solo golpe.

El sonido casi explosivo se escuchó, la caída del gigante No-Muerto al suelo mientras la mujer de blanco y su acompañante caminaron por un lado de éste hacia la puerta.

"Ábranla." Exclamó hacia los guardias, los cuales se levantaron y la miraron.

"Hay una multitud de No-Muertos detrás de esa puerta ¡No la abriremos!"

Uno de ellos dijo con preocupación, a lo que Black Abyss suspiró, podría simplemente darle una patada a la puerta y entrar, pero se vería como un maleante... Elise entonces le habló.

"Titania, podemos saltarla." Ah, claro, se había olvidado de que podía, en teoría, saltar extremadamente alto... A lo que Titania asintió, acercándose a la puerta.

Los guardias se sorprendieron del gran salto que pegó Black Abyss, seguida de su compañera, que era tan hermosa que los hizo detenerse por un segundo, habiendo saltado el gran muro.

Pero, aunque estaban sumamente preocupados y consideraban muertas a las mujeres, comenzaron a escuchar los cortes, desgarres y explosiones detrás de la puerta... Por encima del muro podían verse grandes destellos de luz, mientras la voz de la mujer que había llamado a la otra 'Titania' era escuchada cantando hechizos maestros de Nivel 3. No es como si los soldados supieran tanto de magia.

Eventualmente, el sonido de golpes en la puerta comenzaba a apaciguarse hasta totalmente desaparecer, pero los golpes y golpes aún se escuchaban, aunque más lejos.

"Ustedes... ¿Creen ésto...? Esas dos chicas entraron allí y se están abriendo paso en ese ejército de No-Muertos..." En su conmoción, sorpresa y admiración, los guardias aceptaron realizar una cosa, subir a los muros para ver qué era lo que sucedía.ds

Overlord Fic: La Rosa Roja y la Rosa NegraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora