Hoy es el día

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Nota: ¡Woooooolaas! Bienvenidos la continuación de "Rumbo a la guillotina"

Si alguien estuvo esperando la continuación sorry por haber tardado la eternidad, pero entre que no estaba muy segura de si iba o no a hacer continuación y entre que estoy escribiendo otra historia también y entre que blah blah blah se me hizo el santo al cielo. Aunque en realidad esto lo empecé a escribir hace meses XDDD Solo que no lo publiqué por una simple razón ¡ NO SABÍA QUE NOMBRE PONERLE! (putabida tts) El nombre de " Sin rumbo" no es que me convenza mucho... pero lo único que se me ocurría era eso o "Rumbo a tu ptm" de lo harta que estaba ya jajajaja. Al final me decidí a poner de una vez el primer cap, porque leñe, me apetecía.

Si no tuviste que esperar entre la primera parte y la segunda, pues genial por ti ¡Me alegro mucho! Espero que disfrutes esto y que no me mates... y si acabas de llegar a esta historia sin haber leído la anterior permíteme decirte que no te vas a enterar de un carajo XD (Nah, es broma, puedes hacer lo que quieras)

Dedico el cap a theelmayazmiin porque me dio la idea de poner al porta de Ten Count en la portada :D Gracias (Deberías agradecerle, gracias a ella publico esto jajaja)

Bueno, después de este pequeño monologo con el que probablemente ya he espantado a la mitad de lectores permitidme deciros a los que quedáis que sois los guays y todas esas ñoñerías

Espero que os guste esta historieta ^^



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James Hook siempre había sido un chico que prefería actuar antes que planear. "Acción y reacción" solía decir su padre cuando él era pequeño. Por eso no podía evitar compadecerse de su amigo ante la inmensa montaña de papeles que inundaban su mesa de trabajo. Karen alegaba que hacer el papeleo le solía tranquilizar y le ayudaba a organizar las ideas, pero para el soldado el papeleo era más bien como una jaula. Ser Rey debía ser una tortura llena de tardes tediosas y responsabilidades. Aburrido tamborileó los dedos contra la madera oscura del escritorio sintiendo como los segundos parecían horas en aquel horrible despacho. Su amigo pareció percatarse de su malestar porque le alzó la vista del montón de papeles y le miró pensativo unos minutos. Entonces carraspeó para atraer la atención del soldado.


-James. No tienes porque hacerme compañía si no quieres- El soldado rápidamente se irguió con nerviosismo e mostrando una sonrisa forzada intentó ordenar sin mucho éxito el fajo de documentos que había estado sujetando por la última media hora.

-No, no. Estoy bien- El castaño se removió en la silla intentando encontrar una postura más cómoda y fingió buscar algo entre las hojas que sostenía. Su amigo mantuvo la mirada fija en él receloso. Hasta que al final optó por ignorarle y volvió a su papeleo. Nada más sentir que el rey no le observaba James borró la sonrisa automática de su rostro y la sustituyó por una mueca de aburrimiento.

Desde que el nuevo capitán general le había dado la baja por el luto de su padre los días parecían ser eternos. "Sabes perfectamente que esa no es la razón" El castaño chasqueó la lengua de acuerdo con su voz interior. Sí, vale. Lo reconocía, los días eternos no eran por falta de trabajo eran por él.

-Más de dos meses y ni una sola señal -Gruñó entre dientes para sí mismo. Las imágenes de la noche de hacía ya demasiadas semanas volvieron a su mente. Christian había decidido marcharse por la noche, para evitar tener que despedirse de todas las personas de la ciudad y así poder decirle adiós al castaño a solas. James aún podía recordar la sonrisa que le había dedicado el pelinegro antes de marcharse, esa estúpida sonrisa que parecía tranquilizar cada fibra de su ser. Sin borrarla de sus labios el pelinegro le había dado un golpe cariñoso en la frente y sin decir ni una sola palabra se había marchado. Así sin más.

Sin rumbo (BL) (Rumbo a la guillotina 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora