Siempre he creído que las historias más interesantes tienen un trocito del final en su principio y a mí, particularmente, me encanta leer el final de la historia antes de adentrarme en ella, me gusta la sensación de saber sin saber nada en realidad, desbloquea una nueva necesidad en mi cerebro y se almacena en mis memorias.
La memoria, jum... un proceso extremadamente complicado como todo lo que tiene que ver con nuestro cerebro, los recuerdos es lo que nos hace ser quienes somos, nos permite aprender de los errores, nos enseña a disfrutar de las cosas buenas y llorar ante las tragedias que nos pasa. Los recuerdos es la única esencia que en ocasiones nos gustaría no tener y otras veces añorar, porque te muestra cuando fuiste muy feliz, pero no te deja olvidar cuando y porqué estuviste en tu peor momento.
En efecto, es lo que nos hace ser quienes somos.
Es curioso como hay cosas que olvidamos fácilmente y otras que no olvidamos jamás. Hasta el recuerdo de vidas pasadas, amores frustrados, principios errados y una profecía destinada a hacerse realidad.
Luisita se despertó abruptamente dando un grito silencioso, el cuerpo entero temblaba de miedo luego de esa pesadilla horrible, aquellos ojos que no dejaban de perseguirla, se pasó la mano por la cara encontrando su frente húmeda del sudor y relamió sus labios secos, entonces su pesadilla se reprodujo en su mente de nuevo y saltó fuera de la cama cuando un relámpago iluminó la otra figura en su habitación.
-Respira. - Le dijeron y aunque ella conocía esa voz, era como si su cerebro aún estuviera inmerso en el sueño que acababa de tener.
Parpadeó varias veces y se instó a respirar profundamente para así calmar su desbocado corazón. - ¿Estás aquí para hacerme daño? - Preguntó mirando a la otra mujer que se recostaba en el marco de su ventana.
La mujer miró al suelo y respondió débilmente. - Es lo que menos he querido, Luisa. -
La médica tragó grueso. - Te he visto en mi sueño, todo el tiempo has sido tú. - Apretó sus manos temblorosas. - ¿Dime que razón tienes para haberme mentido de esta forma todo este tiempo? - Preguntó con la voz ronca.
-¿De verdad crees que te he estado mintiendo? - Levantó la vista y caminó hacia la cama que se interponía entre ellas.
Luisita tomó un paso hacia atrás sintiendo el miedo correrle por todo el cuerpo. - Yo sé lo que vi, nunca lo he visto tan claro como hasta esta noche. - Respiró profundo. - Por una vez, dime la verdad, Amelia. -
La de rizos la miró impasible. - La verdad tiene muchas caras, Luisita. - La rubia la miró confundida. - Y me gustaría decirte que las tengo todas a mi alcance, pero no es así, solo tengo la mía y no sé si esa te sea suficiente. -
-Para de querer liarme, ¡Yo sé lo que vi! - Gritó frustrada llevándose las manos a la cabeza, sentía que se volvía loca.
-¿Y qué es lo que has visto? - Preguntó mientras los relámpagos iluminaban la habitación de vez en cuando.
Afuera se empezaba a escuchar el caos, Luisita escuchó gritos, autos chocar y personas pidiendo ser auxiliadas. - ¿Qué está pasando afuera? - Preguntó preocupada.
-Lo que tanto temíamos. - Dijo Amelia. - Es por lo que me he mantenido bajo tierra estas semanas, el mundo de la oscuridad esta llegando a tu mundo y ya no hay quien lo detenga. - Quería acercarse a ella, pero tenía la sensación de miedo por parte de la rubia que le decía mejor no hacerlo.
-¿Qué coño estás diciendo? Esto no es True Blood o esas pelis de inframundo donde la ciudad es atacada por criaturas de la oscuridad. - Luisita soltó una risita histérica.

ESTÁS LEYENDO
She Dark
FanficEmpezó como especial de Halloween 🎃 Ahora veamos que tan reales son los sueños y que tan afilados son los colmillos de un Vampiro.