Harry Potter: Corazón De Un Alma Mistica [Traducción]

16. Preparándose para Irse

Capítulo Dieciséis: Preparándose para irse

El resto del verano probablemente fue mucho mejor ahora que Harry había convertido en una forma de arte cómo evitar a todas las personas molestas en su vida. Incluso si no estaba en el piso familiar o en la biblioteca familiar, podía encontrar los mejores lugares para esconderse de las personas que estaban empezando a molestarlo seriamente. Y según la gente, en realidad solo eran Ron, Hermione, Ginny y la señora Weasley. Sirius, Remus, Olivia y Krinos eran probablemente las únicas otras constantes en el Número 12 y no tenía ninguna razón para evitar a ninguno de ellos.

Pero Harry conoció a Auror Kingsley un día cuando Sirius le presentó al hombre negro. Y se alegró de conocerlo. Especialmente porque Kingsley había sido otra persona que realmente le contó cosas sobre sus padres, ya que había estado un par de años detrás de ellos en Hogwarts. Kingsley a veces también le contaba a Harry sobre cuando Sirius era joven, ya que Sirius había sido quien lo entrenó para ser un Auror antes de que lo enviaran ilegalmente a Azkaban.

(AN: Por mucho que me guste el actor que interpretó a Kingsley en las películas, lo imagino más como Shemar Moore. Así que imagínelo como Kingsley, gracias).

A Harry le gustaba Kingsley y ciertamente era una buena diferencia con respecto a estar rodeado por los Gryffindors y ex Gryffindors habituales. Kingsley le contó que había sido un Ravenclaw y que era totalmente diferente a Gryffindor. En Gryffindor, por lo general siempre había mucho ruido y estaba lleno de actividad. En Ravenclaw, por lo general eran más tranquilos y privados que cualquier otra cosa. Además, parecía que tanto en Ravenclaw como en Slytherin, tenían sus propias habitaciones una vez que eran mayores. E incluso en su juventud, solo tendrían un compañero de cuarto.

Harry ciertamente deseaba que eso fuera parte de Gryffindor. Por mucho que le gustara tener amigos cerca, como Neville, también le gustaba mucho su privacidad y rara vez la tenía cuando estaba en la sala común o en el dormitorio. Y dado lo mucho que Ron lo había estado poniendo de los nervios últimamente, definitivamente preferiría habitación solo con Neville.

Harry también sabía que el tiempo que había pasado con su padrino durante este verano fue probablemente el más feliz que había tenido en su vida. Sirius siempre se aseguraba de saber cuánto lo amaba incluso cuando en realidad no lo decía. No importaba si era simplemente hablando de sus padres, o enseñándole cómo funciona la política en su país, o incluso simplemente estando en la misma habitación con él sin tratar de molestarlo o hacer que hablara. 

Hubo muchas cosas que Sirius hizo por él que le hicieron saber cuánto se preocupaba por él. Escapó de Azkaban para protegerlo de Pettigrew. Vivía de ratas en cuevas sólo para estar cerca de él. Regresó a una casa que obviamente odiaba y había experimentado un trauma extremo en su interior solo para poder proporcionarle una casa donde protegerlo. Se puso en contacto con Krinos y Olivia para hacer algo con Voldemort y poder protegerlo. Había hecho más para protegerlo que todos los demás en el mundo mágico juntos.

Y lo hizo por Harry Potter, su ahijado. Ni Harry Potter, el Niño-Que-Vivió, ni Harry Potter, el Elegido. Lo hizo porque lo amaba sin condiciones. Fue la primera persona que Harry sintió en su corazón que nunca lo trataría diferente debido a su cicatriz.

Pero ahora tenía que dejar a su padrino porque era hora de regresar a Hogwarts. Un lugar por el que Harry realmente estaba orando no tendría eventos que amenazaran su vida este año. No es que tuviera muchas esperanzas de que eso realmente sucediera. El primer año fue un maestro poseído, una escoba maldita, el señor oscuro matando unicornios y un perro de tres cabezas. El segundo año fue un basilisco gigante, un fantasma con problemas de gemidos, arañas gigantes y Hagrid siendo enviado a Azkaban sin otra razón que la del ministerio "que necesitaba ser visto haciendo algo". El tercer año fue probablemente el menos peligroso incluso con un mortífago haciéndose pasar por una rata y dementores volando por la escuela con un hombre lobo como maestro de DADA. Y luego, por supuesto, estaba el cuarto año y lidiaba con un torneo sangriento y mortal, dragones, sirenas psicóticas, un laberinto que seguía intentando matarlo y la resurrección de Voldemort.