Daylight / Matías recalt

16-.

Alison

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- Que preciosa te ves amor. - dice mati al segundo de verme.

- Graciaas, fue lo primero que encontré.

- Que mentirosa, se demoro diez minutos en buscar un buen conjunto - responde alonso - No fui a la obra pero me contaron que actuaste re bien eh, felicidades.

- Que copado alonso, gracias.

Lo miré mal y mati paso su brazo por mi hombro, pasamos por al lado de la casa para llegar al patio y ya habían llegado todos.

- Hable con hector y me contó que tiene otro proyecto en mente, puede que nos llame para ser parte de el.

- ¿Posta? - asiente - amo trabajar con hector.

- Yo te amo a vos - me besa.

- ¿cuanto haz tomado vos?

- Una birra nada más - intenta darme otro beso pero me corro - bueno ya, cinco.

- ¿por que tantas? para un poco chabon.

- Pero estamos celebrando, aparte no soy el único eh, salvi y joaco van por la octava.

- Y que mierda me importa lo que hagan esos dos, vos me importas. - me mira.

- Bueno ya, no tomo más. ¿queres un poco de carne?

- No tengo hambre, gracias.

- Dalee, quedo jugosita. - me besa - ¿me acompañas adentro?

Asentí, mire por última vez a mis viejos y estos ya estaban comiendo carne. Entramos, fuimos al baño para que mati se lavara la cara y de paso los dientes.

- ¿Tas enojada? - pregunta secándose la cara.

- Nop.

- Claro, te creo. - dijo sarcástico - ¿por que no invitaste a agus?

- No quiere ver a alonso, pelearon.

- Son unos tóxicos esos dos, no como nosotros - me sonríe y tenia los ojos entrecerrados. - Dale amor, ya no voy a tomar más, ya fue.

Se acercó a mí y empezó a darme besos por el cuello, lentamente subiendo a mi boca y me lame los labios.

- Sos un asqueroso. - rei y me limpie con la manga.

- Vos - me lame otra vez - Sos re tierna cuando te enojas pero igual no me gusta.

- Que no me enoje pibito.

- Ah mira que linda, yo llamándote amor y vos me dices "pibito" - hace comillas con los dedos - anda a cagar.

No respondí pero me quería cagar de la risa porque ahora el "enojado" es él, no pasó ni un minuto y se dio cuenta de lo que dijo.

- Perdón. - rei y lo besé.

- Nuestra primera pelea, lindito. Volve a mandarme a cagar y juro que no te hablo más. - ahora el ríe, pero nerviso.

Lo tome de la muñeca para que saliéramos del baño porque ya me estaba irritando. Cuando llegamos al patio joaco y salvi saltaron hacia nosotros.

- Mati tu viejo te estaba buscando.

- Vale, gracias salvi - me besa - vuelvo altiro amor.

Asentí y estos dos me llevaron a las sillas, tipo acorralandome.

- Nos robaste a mati boluda. - dijo joaco.

- Eso no importa, ya ni lo soportabamos - rei - ¿como empezó todo?