22-.

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Alison

Como ambos estamos re acalorados nos cambiamos para meternos a la pileta, el boludo de mati no trajo short de baño asi que le robamos uno a alonso.

- Que rica te ves dios mio.

- Cállate tarado - rei.

- Te doy - corrí y me tire un chapuzon antes de que me atrapará.

Saque la cabeza de la pileta y no lo encontré en ningún lado así que decidí entrar a la casa.

Cuando entre lo escuche hablar, pero solo.

- Che ¿con quien hablas? - me mira y tiene su celular en la mano.

termino la llamada y me beso, salió nuevamente al patio sin decirme ni una palabra.

- ¿No me vas a contestar?

- ¿Has hablado con agus? - toma de su mate.

- No - me siento a su lado - ¿que tiene?

Lo miro y este niega con la cabeza.

- La boluda le dejo de hablar a joaco, ahora el tarado esta re bajoneado y bue, tu amiga es una forra.

- No le digas forra, joaco tal vez hizo algo también.

- No creo, si no los hubieras presentado... - lo miro confusa.

- ¿Que decis? No es mi culpa lo que haya pasado entre ellos.

- Nunca te eche la culpa alison - ¿alison? - vos tuviste la idea de presentarlos y ahora el chabon está re mal.

- Y quieres decir que es mi culpa que este mal.

- No alison, pero hubieras pensando las cosas bien antes de presentarlos.

- Que iba a saber yo que tu amigo es un lloron.

- Dale nena, te lo conté mil veces y vos vas y le dices a tu amiga la muy sorete que le hable.

Estamos peleando... se ve tan bien enojado, pero no le voy a dejar que me hable así.

Verlo enojado es mi nueva debilidad.

- Cálmate matías, ¿te das cuenta de como me estas hablando? - voltea todo serio.

- Debo de ir a ver a joaco. - se para y agarra la remera que dejo colgada.

- Voy con vos. - salgo detrás de él.

- No, tranqui, quiero ir solo.

- Dale mati, no podes estar enojado conmigo. - le agarro la mano pero este la corre.

Deja de caminar y se queda parado, voltea a verme, se acerca y me abraza.

- Perdóname, no puedo controlarme pero es que es joaco, no me gusta verlo mal.

- Claro - reí - pero cuando lo puteas en el teatro y lo haces sentir como el orto ahí no te importa verlo mal. - aprieta la mandíbula.

- Es muy diferente alison. - sube a mi cuarto y obvio yo voy detrás de él.

- Deja de llamarme alison boludo, pareces un inmaduro.

- Vos sos la inmadura, no te dije nada cuando andabas como tarada llorando por mary.

Es un hijo de puta.

No le dirigí la palabra y el paro en seco, me miró re arrepentido y dejó su mochila de lado.

- La cague, perdóname yo- lo interrumpo.

- Andate de mi casa.

Este intenta disculparse y acercarse a mi pero me alejo.

Daylight / Matías recaltDonde viven las historias. Descúbrelo ahora