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Alison

- Matii - dice mi viejo al segundo de ver a matías, él lo abraza y le remueve el cabello.

- Hola Santi, Hola ali. - me sonríe y yo se la devuelvo.

- ¿Como la pasaste ayer con tus abuelos? - pregunté y el dejo su mochila encima del sofá.

- Re bien, les hable de vos y quedaron con ganas de conocerte. - ríe.

- Sos un lindo, quizás algún día los conozca... - nos miramos y la tensión se siente a lo lejos, maal.

- Bueno! - mi pa da una palmada que se escucho re fuerte e hizo que le pusiéramos atención. - La pintura y las brochas están arriba.

Mati asiente y ambos suben, me quede pensando en si subir con ellos. De seguro mi pa me tira para abajo si me quedo con ellos.

No importa, igual subí.

- ¿Hay una brocha para mí? - entro y empiezo a buscar.

- No, si hay pero para vos no. Déjame a mi y a mati pintar, es nuestro momento. ‐ mati y yo reímos.

- Pero dale pa, unos minutos nada más. - él dejo de pintar para mirarme, se quedo callado y siguió pintando.

- Solo dies minutos, harás que el pibe se desconcentre alison.

Solo negué con la cabeza y agarre una brocha, me puse a pintar a su lado y hacia de todo para que no lo sintiera lejos.

- Quedan solo días para la función de la obra... estoy re ansioso eh.

- Yo igual, tengo miedo de no recordar las líneas y cagar todo.

- Deja el miedo de lado, si se te olvida algo vos solo improvisa y haré lo mismo, para salir mal los dos. - lo miro y me guiña el ojo.

Imposible no sonreír gracias a él.

- Mi pa cree que esto se secará hoy, ni en pedo. - le susurro.

- Escuche eso alison, estoy viejo pero no sordo. - reímos.

- Alison tiene razón santi, quizás pueda dormir en su cuarto hoy.

Mi viejo voltea a verlo y le tiro pintura, mati quedo sorprendido y dudo en si devolvérselo. Igualmente le tiro unas gotas.

- Se que no se va a secar hoy así que dormirás en nuestro cuarto. - ríe.

- Que gracioso pa - digo sarcástica

- Agradezcan que traje la pintura hoy y no mañana, terminaríamos re cansados.

Cierto, se me olvido que íbamos a pintar mañana, pero mejor así... Para que mati se quede lo antes posible en "su cuarto"

- Santi, no creo que salga la pintura de mi remera - dice mirándola.

- Sí sale hijo, vos tranqui. - mira su reloj - ya pasaron los dies minutos alison.

Deje la brocha encima del diario que esta en el suelo y limpio mis manos con un trapo.

- Bueno, los dejo... Pa, no le tires más pintura al pobre de mati.

- No prometo nada. - me guiña el ojo y mire a matías, este hizo una cara de preocupación pero en broma, rei.

No me preocupa dejarlos solos porque mi viejo no es de los que son mala onda, puede que este medio viejo pero sigue con una mentalidad y personalidad de adolescente.

Baje al living y ahí estaba alonso con un amigo, no se en que momento llegaron y me sorprendí.

- Hola alison - dice el amigo, se paro del sofá para saludarme e hice lo mismo.

- Hola valentin, hace tiempo no venias. - este volvió al sofá y asintió.

- Tu hermanito me cambio por su nuevo grupo de amigos, no me banco a ninguno.

- Bueno, yaya, alison no necesita explicaciones. - valentin hace una mueca y me mira.

‐ No seas así. - alonso lo ignoro.

- ¿Donde esta pa?

- Arriba con matías. - se volteo a verme.

- ¿Mati esta aquí? pensé que llegaría más tarde, valentin veni. - se para y se dirige a las escaleras, el otro iba detrás de él.

- ¿Quien es matías y por qué se alegra tanto?

- Es el noviesito de alison, es re copado. Te va a caer bien.

- No es mi novio. - todavía.

Valentin me miró por última vez y subió, yo voy detrás de él para ver que el tarado de alonso no diga alguna boluces.

Entraron al cuarto y claro, ahí estaban.

- Matii - reaccionó de la misma manera que mi papá.

Alonso le presentó a valentin y preguntó si podían pintar con ellos a lo que pa respondió con un sí. Perfecto, seré la única que no esta pintando.

Amo que incluyan a matías pero me da rabia, no lo voy a negar; siento celos de que pasen tiempo con él siendo que es mi amigo, mío.

Mi mamá no está para poder escucharme, fui a la cocina y me puse a hacer una masa para preparar pizza, amo la pizza.

( ... )

Ya horneada la pizza la saque con cuidado para no quemarme, valentin me ayudo un poco ya que fue el primero en aburrirse en pintar.

- Quedo re linda ali. - le saca una foto.

Él y mi hermano son iguales, se la pasan con la cámara en mano para sacarle foto a todo.

- Iré a buscar a los otros, no te la comas solo. - ríe.

Subí y ya habían terminado, estaban sentados tomando bebida y no dejaban de reír.

- Eu hice pizza, vengan a comer.

- Aa que rico, me muero de hambre - dice mati y se acerca a mi.

Bajamos solo los dos, ya llegando a la cocina me para para decirme algo.

- Ahora que estamos solos - mira hacia arriba para asegurar que no viene mi viejo - Te ves bonita hoy, eres bonita.

Es un lindooo, me muero.

- Para mati, me haces ponerme roja. - se ríe.

- Cuando el amigo de tu hermano salio del cuarto empezaron a interrogarmee - lo miro confusa - no me puse nervioso ni nada, al contrario. Me quería cagar de la risa porque se hacían los malos.

- Que decis mati - rei.

- Alonso me decía que si te hago algo malo voy a salir cobrando.

Y tiene razón, la última vez que estuve con un chavon salió todo mal, alonso lo hizo mierda.

- Quieren meterte miedo, pero vos tranqui que te adoran. - le doy un beso en la mejilla.

- Tas diferente hoy. - me mira re contento.

Estoy diferente porque ya tengo claro mis sentimientos y puedo demostrar que me gusta, puedo hacerlo feliz

- Ya veni a comer pizza.























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Voten xfissssss

besos 🍒

Daylight / Matías recaltDonde viven las historias. Descúbrelo ahora