3 de mayo de 1924
Era la mañana de un sábado poco común para tratarse de la gran ciudad de Londres. El día amaneció claro, las temperaturas eran inusualmente altas y el bullicio de la acera de enfrente se escuchaba a través de la ventana entre abierta, entre cortinas se colaba una fina brisa que le revolvió los largos cabellos rizados que descansaban sobre su rostro. Harry se revolvió bajo la fina sábana que cubría su cuerpo semidesnudo. Se hizo una bola bajo la misma y quiso taparse la cara con la almohada para que la incomoda luz mañanera no le molestase en los ojos. Pero algo impactó contra su cabeza con fuerza. Dio gracias que al menos era blando.
- Levántate de una vez, eres un maldito holgazán - su mejor amigo, Niall Horan , le había lanzado su propia almohada. Esperaba impaciente y con los brazos cruzados a un lado de la puerta de la única y pequeña habitación de la casa, la cual tenían que compartir.
Harry murmuró algo, posiblemente un insulto, y se dio la vuelta sobre la cama, dándole la espalda.
- Oh, no, querido, a mí no me vas a ignorar - avanzó hacia la estrecha cama y se lanzó sobre el cuerpo de su amigo aplastándolo debajo de él.
-¡Quítate! que pesas - Harry intentó moverlo con ambas manos pero la fuerza mañanera era prácticamente inexistente nada más despertarse.
Niall soltó una carcajada cuando los ojos cansados y enfadados del rizado se posaron sobre su persona. - No será por todo lo que comemos - comentó sarcástico pero la cara niño enfadado que tenía su amigo le hizo reír más - Tendrías que verte la cara pareces la abuela de una chica lesbiana el día de su boda
Harry lo miró perplejo, esperando a que Niall dejase de reír.
- Qué comparaciones tan absurdas -volvió a intentar quitarlo de encima pero sin mucho éxito. Niall terminó por apartarse él solo, quedando tumbado boca arriba pero sujetando su cabeza con las manos para ver bien al rizado.
Harry se puso en pie. Lo único que llevaba puesto eran los pantalones de pijama. Se acercó a la cabecera de la cama para tomar la camisa que el día anterior había dejado ahí tirada. Niall aprovechó para darle una patada juguetona en el trasero.
-¡Niall! - se quejó.
-¿Que? No es mi culpa que tengas ese culo - le guiñó un ojo y Harry se puso colorado. Decidió ignorarlo y se colocó la camisa blanca, aunque de blanca había pasado a beige; problemas de vivir entre suciedad. Por mucho que intentasen mantener la casa relativamente limpia la mierda siempre se colaba hasta por debajo de las puertas.
- Tienes mala cara - apuntó Niall poniéndose en pie y persiguiendo a su amigo fuera de la habitación hacia la diminuta cocina del piso -, ¿se han vuelto a pasar toda la noche follando los de arriba?
- No sabes cuánto - suspiró Harry mientras tomaba una galleta rancia de un bote -. Encima parece que tiembla todo el edificio, son incansables.
- Sí sé cuánto, te recuerdo que yo también vivo aquí - le robó la nueva galleta que Harry había tomado y se la llevó a la boca -, y yo también soy incansable.
- Ya, lo sé perfectamente - rió rodando los ojos - ¿a dónde fuiste anoche?
- ¿A dónde voy a ir, cariño? A Hole
Hole era uno de los barrios más oscuros de Londres. Allí había de todo; desde los garitos más desagradables y pervertidos hasta vendedores de las sustancias más nuevas y solicitadas en el mercado.
Harry y Niall se pasaban allí la mayoría de las noches, prácticamente todos los gays de la ciudad se reunían allí para encontrar alguna aventura de una noche.
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Intocable ( Larry stylinson)
Fanfiction"En el Londres de 1920, donde las apariencias engañan y los secretos pueden ser mortales, Louis Tomlinson, un joven aristócrata, se encuentra atrapado entre su destino y su deseo cuando conoce a Harry, un enigmático y libre espíritu que desafía las...