II

206 33 13
                                    

Tenía que entrar a la mente de Yuqi, es lo único que deseaba en ese momento. Entrar y estudiar cada esquina de su desastrosa mansión llamada cerebro. Pero no importaba cuanto pensaba como entrar ahí, no podía encontrar un método. Sus antiguos pacientes solían llegar con información, un familiar o algún cercano que le daba la base. También, después de sesión tras sesión, se daban cuenta de que estaban mal, en él muy muy en el fondo sentían culpa y eso era necesario para trasladarlos a un psicólogo.

Sin embargo, Yuqi ya sabía que estaba mal y es por eso que todo era más difícil. Pensaba que seguro hasta sabía todos sus diagnósticos, hasta los que los demás psiquiatras no podían llegar a ver.

Conocía a Yuqi, su ego decía que más que nadie, y siempre estaba tres pasos más adelantes que la autoridad. Ganaba, aunque los policías pensaban que ya habían ganado, ella sabía que ella era la que había ganado, ya que la autoridad hacía exactamente lo que ella quería. Era tan inteligente, narcisistas y sin ninguna pizca de empatía que puede que también esté tres pasos más adelante que Soyeon. Lo presentía y, si es que no era así y solo una paranoia, se decepcionaría tanto...

—Voy bien—soltó Soyeon al sentarse en el bar—así que no me mires así.

—Tu cara dice que desde la última vez que nos vimos, solo dormiste una hora.

—Fueron cinco.

—En una semana.

—Y es por eso que voy bien, Soojin. Si estuvieran en mis zapatos, lo entenderías.

—Deja de usar frases de tus pacientes—le pasó una jarra de cerveza—¿Cómo es Yuqi de cerca?

—Mejor de lo que me imaginaba—Soojin se quedó mirándola, "mejor" podía significar muchas cosas—Su mente es perfecta, es mucho más que el paciente perfecto, creo que con su cerebro puedo llegar a hacer grandes cosas—se bebió toda la cerveza—y eso será un camino complejo—se recostó en la mesa.

—¿Y qué harás?

—¿Qué haré?—sonrió levemente—me abriré para que ella lo haga.

(...)

—¿Qué harás?—preguntó Yuqi al verla llegar con un detector de mentiras—Uy, siempre quise que utilizaran uno de eso en mí—se encontraban en una habitación aparte, con una cámara de seguridad vigilando a Yuqi que se encontraba con un chaleco de fuerza para no dañar a Soyeon.

—No es la primera vez que lo utilizan en ti—le dijo—y no es para ti—se sentó en la silla al frente de ella y preparó la máquina para sí misma—¿Sabes leerla?

—No hay nada que no sepa hacer—miró donde iban a aparecer los resultados—¿Qué harás?

—Intento que confíes en mí, para que me cuentes tus secretos.

—¿O sea, puedo hacer cualquier pregunta?—Soyeon asintió—¿Cuántas veces fuiste al baño hoy?

—Tres.

—No preguntaré detalles ¿Orientación sexual?

—Pansexual.

—¿Físico o mente?

—Mente—Yuqi frunció el ceño al ver la máquina moverse un poco más de lo que debería—ambas.

—¡Me encanta esto!—se levantó de la silla y con ayuda de su pie, lo puso al lado de Soyeon, extremadamente cerca,  sin dejar de ver la máquina —¿Quién es más linda? ¿Shuhua o Yo?

—Shuhua—Yuqi miró la máquina e hizo un puchero, era verdad.

—Ahora si las preguntas serían—tosió levemente y se enderezó—¿Perro o gato?

Don't Go Insane [YuYeon/SoQi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora