06─Idear un plan

116 13 0
                                    

El sol apenas iba saliendo, Izar estaba acostada aún, tenía los ojos fijos en el espejo que su padre tenía frente a la cama, recién se daba cuenta que eso estaba ahí. Los minutos pasaban y ella solo se quedó ahí acostada, pensando en que podría hacer para salvar a su tío. Porque lo había pensado demasiado, y habían unas grandes posibilidades de que su padre se salve si Regulus estaba vivo.

Al cabo de un rato se levantó para poder tomar un baño, sentía el cuerpo muy cansado aún. Era horrible. Cuando bajo a la cocina se encontró con Kreacher, Harry y Hermione. Ron debía estar por ahí en la casa. El elfo parecía más gruñón que de costumbre, ¿también lo había afectado a él todo eso? Tal vez cambiar las cosas no iba a salir muy bien que digamos.

─Buenos días, Kreacher ─saludó Izar con cautela.

El elfo cambio rápidamente su expresión amarga por una serena y maravillada. Él caminó rápidamente hasta la castaña.

─Ama Izar, siéntese, enseguida le traigo algo para que pueda comer.

Tanta amabilidad de la nada le hizo un poco de ruido, porque Kreacher siempre había sido atento y respetuoso, mantenía lealtad a los Black que no eran traicioneros de sangre. Pero que Kreacher sea tranquilo, "cariñoso", eso sí no era normal.

Izar tomó asiento y miró a Harry, Hermione mordía una tostada con las cejas arqueadas. Ambos se movieron de lugar y se sentaron frente a la Black.

─Aunque no lo creas, ya no me habla mal ─susurró consternado el azabache.

─¿Qué fue lo hiciste? Estuvo todo el día hablando de que te  extrañaba. Bueno, más bien se quejaba hablando solo, como lo hace siempre.

Izar miró a Hermione con los ojos abiertos, sorprendida y esperando que dijera que era una broma. Pero nunca llegó el comentario, hablaba de verdad. ¿Qué tanto había pasado en esos años? Definitivamente la escapada de Regulus de aquella casa había cambiado algo.

Kreacher dejo un plato con comida frente a su ama, él la miró con sus ojos casi traslúcidos. Ella empezó a comer, estaba riquísimo, el elfo al darse cuenta sonrió muy levemente y volvió a sus cosas, limpiando lo que restaba de la casa. Hermione y Harry miraban a la castaña, esperaban el momento oportuno para hablar. Ella se dio cuenta.

─Sirius escapó de casa con su hermano, fueron a la casa de tu padre, Harry ─dijo mientas dejaba de lado el plato vacío─. Estuve un mes ahí, los seguí, todos se llevaban bien. Incluso Peter era muy unido al grupo. Aunque eso no pudo cambiar que se convierta en un traidor.

─Al igual que el hermano de Sirius, ¿no?

─En efecto. También conocí a Barty Crouch Jr.

Harry miró a la chica asustado. Ella lo miró con intriga.

─¿Está vivo?

─Murió, recibió el beso del dementor. Fue quien trajo a Voldemort devuelta.

─Mmmm...

Izar miró la mesa unos segundos, al menos sabía que era un hombre de palabra, le había jurado lealtad y así fue, por más mortífago que haya sido.

─Tengo que volver ─murmuró mirando la mesa.

─¿Qué? ¿Por qué? ─Harry la miró alterado, no podía irse otra vez.

─Puede alterar demasiado tu percepción de la realidad y tiempo.

─El tiempo no cambia para mi si voy a un lugar en el cual no existo, el tiempo no corre, pero si me agota físicamente y me descoloca un poco a nivel mental. Solo debo trabajar en ello ─le dijo a Hermione tratando de pensar en una alternativa.

El reloj de Linjat |⋆Regulus BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora