¿Quién fue?

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¡Hola a todos! Acá un nuevo capítulo.

Sé lo mucho que desean venganza contra Laena y Harwin, pero les aviso que la relación de Laena y Harwin será importante en lo que queda de la historia, así que no lo escribiré como un acto de venganza, sino como una tragedia.

Por supuesto tendrán la venganza de Daemon por así decirlo, pero aparte de eso, ocurrirá una tragedia. Sobre aviso no hay engaño jajaja así que los invito a leer.

No olviden comentar y votar. Créanme que leo todos los comentarios y me encanta leerlos jejejejejeje, me pondré a responder todos un día, así que preparense para el spam jaja. 

Pero si comenten, quiero salir del puesto 19 en Daemyra y llegar un poco más alto jaja. 

Besos y abrazos.

Harwin vio al príncipe parado frente a él, la ira cubriendo su mirada, el odio grabado en sus facciones y supo que no saldría vivo o caminando de allí.

- Daemon, te lo puedo explicar, te lo juro por  lo más sagrado, que te lo iba a contar, solamente estábamos esperando que volvieras- dijo Laena  intentando calmar a su esposo, sabiendo que eso no funcionaría. 

- ¿Cuánto tiempo llevan juntos?- preguntó Daemon avanzando hacia ellos que se pusieron de pie arreglándose la ropa desordenada, mientras Harwin mantenía  a Laena tras de él.

- Daemon por favor- rogó Laena y él la miró a los ojos- Algunos meses- dijo ella comenzando a temblar porque lo conocía bien. Nada iba a evitar que él explotara.

- Mi príncipe, Laena y yo nos enamoramos, sé que hemos mentido por meses, pero íbamos a decir la verdad- dijo Harwin tratando en vano de abrocharse la camisa. 

- Daemon por favor no, por favor- rogó Laena observándolo y gritó cuando Daemon golpeó a Harwin. 

Harwin intentó defenderse, pero no podía ganar esa batalla.

- Daemon por favor para- gritó Laena intentando detenerlo pero él solo la apartó mientras seguía golpeando a Harwin que había caído al suelo.

Daemon no dijo una sola palabra, no dijo nada, en su mente, todo era rojo por la ira.

No le importaba nada, ni siquiera Laena que gritaba aterrada a su lado.

Laena lloraba al ver a su esposo matando a Harwin, él no se detenía y Harwin estaba demasiado herido en el suelo.

Laena gritó y sollozó cuando él lo pateó en el suelo y cuando ella se lanzó sobre él para detenerlo, él la tomó con fuerza de la ropa y levantó su mano para golpearla.

Ella solo apartó la mirada aterrada, esperando que él la golpeara, y sin embargo él bajó su mano y la sostuvo con más fuerza.

- ¿Por qué? ¿Por qué me mentiste? ¿Por qué todos tus ataques de celos si tú me engañabas con este imbécil? ¿Por qué?- gritó Daemon tirándola con fuerza de la ropa y ella sollozó.

- Me enamoré de él- sollozó ella y Daemon la miró con ira.

- ¿No pudiste decírmelo antes? ¿Acaso no eras tú la que no querías el divorcio por las niñas? ¿Te importaron las niñas mientras te revolcabas con este imbécil?- gritó Daemon y ella sollozó.

- Te lo iba a decir, perdóname, Daemon por favor- sollozó ella y Daemon solo la apartó.

- Mi príncipe, por favor, no se desquite con Laena- rogó Harwin y Daemon lo golpeó de nuevo haciéndolo gritar de dolor.

Se detuvo solamente cuando sintió dos brazos atrás de su espalda, y una voz quebrada que le suplicaba que se detuviera.

- Tío por favor, por favor basta, no valen la pena- dijo Rhaenyra que tenía lágrimas en los ojos y había llegado hace algunos minutos.

Los secretos de la corona (Daemyra)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora