Jack contrajo la cara de miedo y de rabia. Tan solo segundos después, un nuevo mensaje apareció en su campo de visión.
"Ven solo, o te prometo que jamás volverás a verla"
Estaba confundido y asustado a más no poder. Ahí estaba de nuevo, con sus malditos juegos de palabras, con su estupidez y su inteligencia. ¿Qué demonios era lo que quería con él? ¿Por qué no le dejaba tranquilo?
¿Dónde cayó el ultimo pétalo? No entendía nada y estaba desesperado, se debatía firmemente entre gritar por ayuda, llamar a Billy, pedir que alguien le sostuviera el peso enorme que cargaba en la espalda. Waylon le miraba con curiosidad, sin entender demasiado. Al verlo, una imagen se le encendió en la retina.
El ultimo pétalo. Las ultimas dos rosas.
Su antigua casa.
Andrew estaba escondido a plena vista, en una casa grande y que se encontraba desocupada. Vanessa no lograba venderla aún, pero el muy infeliz estaba usando aquel espacio para molestarle.
¿Qué debía hacer entonces? ¿Pedir ayuda?
No, la policía no. ¿A Billy? Andrew sabría que él le acompañaba en cuanto se presentará allí. Le olería o sentiría su presencia porque al fin y al cabo era su hijo.
Volteo a mirar con atención, y la respuesta le fue obvia de inmediato.
"Waylon" llamó.
Su padre le observó nuevamente. "¿Qué sucede?" le preguntó en tono de voz bajo.
Jack respiró. "Necesito que hagas algo por mí"
"Lo que sea" respondió él.
Jack le explicó brevemente la situación, y entre ambos, bajo susurros, trazaron un plan medianamente razonable. Waylon era la persona más hábil que Jack conocía para no ser detectada en todo el mundo. Si alguien podía acompañarle y ayudarle, era él.
El plan consistía en que Jack entraría por la puerta principal y mientras él intentaba distraer a su padrastro, Waylon por su parte, se metería por la parte trasera de la casa y buscaría a Celeste para ponerla a salvo. Si por alguna razón algo salía mal, él se encargaría de protegerle y llamar a la policía.
Era un buen plan, pero era peligroso y arriesgado. Jack estaba decidido, la vida de su hija valía cualquier situación, cualquier riesgo. Si sus conjeturas estaban en lo cierto, ella se salvaría, y Waylon le ayudaría a salir de allí también. Quizá finalmente pudieran aprehender a Andrew y tener una vida en paz, pero no lo lograría estando sentado en el sofá de su casa mientras lloraba, escuchando disculpas o esperando noticias. Esta vez estaba listo para hacer lo que fuese necesario si con eso salvaba a su hija.
Jack inventó que salía con Waylon a tomar un paseo, a respirar o a intentar ayudar en lo que sea que pudiese, y aunque todos le miraron extrañados, ninguno intento detenerlo o decir nada.
Tomaron un taxi con la dirección de su antigua vivienda. El camino fue tan eterno como nunca antes, el frio de la ciudad y el miedo en su interior se combinaban para lograr un ambiente desolador y triste. ¿Qué haría si algo salía mal? ¿Si su conjetura estaba mal, si Andrew estaba en ese mismo instante con su hija lastimándole alguna parte delicada de su cuerpo?
Se moriría o le mataría, pero una de esas dos sería verdad aquella noche.
Waylon se bajo tres cuadras antes de llegar, y Jack le pidió que, si Andrew estaba armado, o si hacia un esfuerzo por dañarle físicamente, o si lograba lo que sea que estaba planeando, que llamará a la policía inmediatamente.
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Big Brother ⌠Omegaverse⌡
RomanceDonde Jack se despierta con una marca que lo vincula como la pareja destinada...de su peor pesadilla.