Inevitable
No había logrado escuchar el sonido de las llaves, ni los pasos lentos de su novio, tampoco sintió su presencia hasta que el sillón se hundió a su lado.
JungKook sonrió.
Llevaban varias semanas en eso, no podían separarse, no demasiado al menos, sus lobos y ellos estaban cada vez más comprometidos en esa relación de cinco meses que florecía día con día. Ahora compartían cualquiera de sus apartamentos, incluso JungKook había mudado una de sus consolas de videojuegos a la casa de TaeHyung.
El pelinegro había quedado encantado luego de que su omega le regalara varios juegos nuevos en su último mes juntos para que pudiera jugar en su casa.
—¿Podrías dejar de gritarme? Rompes mi tímpano mocoso idiota. —gruñó hacia su micrófono. Por eso no había escuchado la llegada de TaeHyung, tenía sus audífonos especiales puestos. —Concéntrate en el juego.
Luego de lograr su cometido en su partida, despegó una mano de su control para posarla en la pierna de TaeHyung, quien aún vestía su uniforme de enfermero.
—Hola, algodón.
—Hola, JungKookie. —por fin pudo escuchar su voz. —¿Cómo estuvo tu día? ¿Qué hiciste?
JungKook frunció el ceño sin despegar la mirada de la pantalla. El cuerpo de TaeHyung se había tensado, lo había sentido con un solo toque.
—Estuve bien, entrené hasta las cinco treinta y comí el estofado que sobró ayer. —respondió tratando de seguir la corriente. —¿Qué tal tu día?
El olor a cereza desapareció poco a poco, convirtiéndose al paso de los segundos en un aroma agrio y totalmente diferente al de su novio.
JungKook supo que definitivamente algo no iba bien.
Su lobo rasguñó en su interior y su instinto de protección se activó. Necesitaba saber qué había ocurrido ya mismo.
Retiró su mano de la pierna del mayor y pausó su juego, tomó el micrófono de sus audífonos y lo acercó a su boca.
—Termina sin mí. —las quejas no tardaron en llegar. —No me importa, adiós.
Se quitó los audífonos y los aventó junto a su control para voltear y, por fin, poder ver a su novio, entonces confirmó sus sospechas, algo no estaba bien.
La mirada de TaeHyung derrochaba tristeza, su aroma estaba perdido y su semblante era igual al de una persona que acaba de perder algo.
—Tae...
TaeHyung hizo un puchero y luego alzó sus bracitos hacia JungKook, quien inmediatamente se acomodó mejor sobre el sillón.
—Ven aquí. —lo ayudó a subir a su regazo, el omega se aferró y enterró su rostro en el cuello del más alto, quien le rodeó con sus brazos fuertemente, tratando de dar un poco de alivio.
ESTÁS LEYENDO
Falling for you ୧ kv
RomanceEra un club para omegas, ¿cómo iba a imaginar que uno de estos iba a llevárselo a la cama para darle la mejor noche de su vida? "Es un omega, TaeHyung" "¿Eso es un problema? Yo también lo soy" - <3 - -kooktae: (koo omega/top || th omega/bottom...