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Me senté a la mesa entre Octavia y Abby, con el pequeño cuadrado carnoso que tenía delante. Me miré las manos, jugueteando con los dedos para evitar el contacto visual.
— Necesitan vernos hacer esto — susurró Abby a nuestra mesa. Nadie quería, pero todos sabíamos lo que pasaría si no lo hacíamos. Octavia parecía vacilante, antes de ponerse de pie frente a todos, con su bloque de carne en la mano.
― Todos conocemos la situación. Lo que hacemos aquí ahora, sobrevivimos. Algunos de ustedes piensan que es un pecado. Pero el pecado sería dejarnos morir de hambre cuando sabemos que somos todo lo que queda de la raza humana ― admitió a todos. Levanté la vista y vi cómo se sacaba un poco de la plaza. Tomó un sorbo del caldo de verduras, que es más fácil como sugirió Cooper.
— No sé si podré hacer esto — susurró Niylah desde el otro lado de Octavia. Miré hacia la plaza, respirando hondo mientras la recogía. Dudé antes de darle un mordisco. No era muy bueno, y casi me atraganto, pero lo contuve. Octavia me entregó el cuenco de caldo de verduras, por la mañana para que me lo bebiera. Lo hice, solo tratando de probarlo. Me puso la mano en el hombro, tratando de consolarme de alguna manera.
Vi cómo Kane se levantaba, curioso por saber con qué iba. ― Todos tenemos que tomar una decisión, por nosotros mismos ― dijo.
— No hay otra opción, si no comes te mueres de hambre — dijo Abby, en un grito susurrado, de pie junto a él.
― Siempre hay una opción, Abby, lo sabes ― le dijo antes de irse. Unas pocas personas lo siguieron, todas dispersas. Lo entendí, me alegré de no haber conocido a nadie personalmente en los boxes. Era más fácil así.
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― De ninguna manera, no les quitaré su elección. Cuando tengan suficiente hambre, comerán —dijo Octavia, cruzándose de brazos. Me senté en la silla mientras Abby, ella y yo conversábamos.
― Escúchenme, nadie quiere hacer esto, pero no podemos dejar que se mueran de hambre. Si mueren de desnutrición, sus músculos se atrofian y no habrá suficiente carne en sus huesos...— comenzó a explicar Abby. Me retorcí, ya que esto me estaba haciendo sentir incómoda.
— No puedo oír esto — me retorcí, tapándome las orejas con los dedos como una niña.
― Tienes que oír esto ― me dijo Abby, dirigiéndose a Octavia y a mí ― En el arca, la generación de la plaga, tuvieron una opción, y nunca se recuperaron de ella. La gente que está tiene que ver morir lentamente a la gente que no comió. Y su culpa casi los destruye ― nos dijo. Gran historia, excepto que no tenía idea de lo que eso significa.
― ¿Qué quieres que haga? ¿Convertir en un crimen no ser caníbal? — preguntó Octavia a Abby, con los ojos llenos de agua y la conmoción en la voz. Abby se limitó a asentir. Miré hacia abajo, evitando el contacto visual con ellos una vez más. Octavia se dejó caer en la silla y se pasó los dedos por el pelo con ansiedad.
― Oh, esa es una forma de llenar el congelador ― dijo ― Primero obtenemos el cumplimiento total y luego nos ocupamos del suministro.
― ¿Suministro? Esta es mi gente de la que estás hablando — dijo Octavia, sorprendida.
― Lo sé, también son míos ―recordó Abby.
― Y quieres una excepción para Kane, ¿Verdad? — le pregunté a Abby, sin creérme. Ella negó con la cabeza.
― No ― dijo simplemente. Mis cejas saltaron rápidamente, recuperando su postura normal después. — Marcus es la clave — dijo ella, ominosamente, con una sonrisa cínica
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― Honramos a los que murieron, para que nosotros pudiéramos vivir. Te entrego todo de mí. Tú lo sabes, y ellos también — dijo Octavia, dándole un mordisco a la carne. Me levanté junto a ella, sosteniendo la mía en mi mano temblorosa. Le di un mordisco, como la mayoría de los demás me siguieron.
Vi cómo Octavia se acercaba a un hombre que no había tocado su comida, observando cómo se desarrollaba la escena. Vi cómo los guardias lo golpeaban, mientras me mordía la lengua y cerraba los ojos para quedarme callada.
—Todo él, por todos nosotros —dijo Octavia, sosteniendo el cuadrado de carne—. Me acerqué a Indra, sosteniendo la mía en la mano.
— Omon Gon Oson —dije, dándole otro mordisco al cubo de carne—. Otros me copiaron, mientras yo trataba de detener mis manos temblorosas y mis ojos llorosos. Indra me envió un gesto de aprobación, lo que calmó un poco mis nervios. Al menos hice una cosa bien.
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Me levanté de un disparo, despertándome sobresaltada, jadeando por aire. Mis ojos se movieron a mi alrededor, vi que estaba sola en mi tienda como siempre. Me tapé la boca con la mano para evitar que el sollozo saliera de mi boca, me temblaban las manos. Acerqué mis rodillas a mi pecho mientras las lágrimas comenzaban a correr por mi rostro, de repente se quedó en silencio.
Lo hicimos para sobrevivir, todos. Hicimos cosas indescriptibles e inhumanas para sobrevivir, y nos convertimos en lo que necesitábamos ser para nuestro pueblo. El pequeño sollozo logró escapar de mis labios y me cubrí la mano con la boca. Finalmente me di cuenta de lo sola que estaba.
Una vez más, lo soportamos para que ellos no tengan que hacerlo
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Hola¿Cómo están? Yo, bien.
Okey, ahora necesito un fic de Enola Holmes.
Escribirlo? No creo
(Me cortó una tta por tantas cosas q tengo q escribir)
Ahora sí alguna me quiere recomendar alguno para leer, no me molesta.
Cómo digo siempre; si les gustó voten y comenten...
