CAPÍTULO |25|

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Maratón 1/2

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Maratón 1/2

─ ¿Estás seguro? ─ pregunta San a su lado.

¿Lo estaba? No lo sabía.

La gran casa frente a ellos era un poco intimidante, así que probablemente se sintiera un poco cohibido ante ello. Por otro lado, de una cosa si estaba seguro, y es que no dejaría solo al mayor. Habían llegado juntos hasta ese punto, y juntos saldrían de ese lugar.

Una hora, Wooyoung. Solo debes sobrevivir a eso. Saludan a las personas, les dan los buenos deseos en su matrimonio. ─aunque no lo merezcan. ─ y se van.

─ Podemos volver a mi departamento y...

─ No. ─ sujeta la mano del azabache con fuerza. ─ Estaré contigo en todo momento. Si tu eres el que no se siente bien, podemos volver.

San inclinó un poco la cabeza mostrando algo de indecisión en sus bonitos ojos grises.

─ Estaremos bien. ─ responde con una sonrisa en sus labios.

─ Entonces...entremos.

Ambos respiran profundo antes de caminar a paso seguro hacia las rejas de color negro que rodeaban toda la propiedad. Se notaba la seguridad con la que contaban la familia Choi. 

La música es apenas perceptible a esa distancia.

─ Hijo...─ una voz dulce e incomoda les da la bienvenida. ─ ¿Tu eres?

La vista de la mujer elegante y cuerpo esbelto se posa en la pareja de San.

─ Es mi novio, madre. ─ responde San con una sutil advertencia en su voz.

─ ¿Novio? ─ la voz delicada era tan forzada que empezaba a darle jaqueca al menor.

─ Sí, novio. ─ responde Wooyoung con una bonita sonrisa en sus labios. ─ Jung Wooyoung.

El menor extiende su mano por educación hacia la mujer, quien con una sonrisa forzada apenas y toca los dedos del pelirrojo, esto le provoca una risa que se ve obligado a ocultar.

─ Creí que vendrías solo. ─ remarca la ultima palabra. ─ Había preparado una sorpresa para ti.

¿Sorpresa?

Wooyoung estaba seguro de que por esa palabra y la sonrisa malvada que la mujer le dirigió, no le iba a gustar para nada la sorpresa que ella tenía preparada para su hijo.

─ ¿De qué...─ un borrón rojo se acerca a ellos a velocidad y termina chocando con el pecho del mayor

─ ¡San hyung! ─ el chillido de esa voz lo deja perplejo un momento. ─ ¡Ha pasado mucho tiempo desde que nos vimos!

Wooyoung estaba sorprendido. Acaso... ¿acaso ese chico tenía el mismo color de cabello?

Cabello rojo.

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