Non si allontanano(No me des la espalda)

Mentimi

Había buscado sin fin la habitación 345, buscado sin fin a su pequeño herido, su ahora esposa iba detrás de el joven italiano reclamando por la insistencia a ver a McQueen y estar con el. Una vez frente a la habitación sintió como todo su ser temblaba. Abrió con lentitud la puerta encontrándolo solo en una gran habitación de hospital solo para el.

-McQueen...- con cuidado se fue acercando a el hasta verlo bien, parecía haber sanado un poco y ya estar mejor tanto como estable... los orbes azulados del joven corredor golpearon con brusquedad los achocolatados de el intruso, hizo un gesto de molestia para luego incorporarse un poco, con una voz tan débil y frágil comenzó a hablar -Vete... por tu culpa... estoy así... por tus mentiras... ¿qué acaso no vez que ya no tengo nada mas que dar?-

-McQueen yo...-

-Nada... solo déjame aquí en soledad...-

-No McQueen, te prometo que...-

-¿Sabes que no hay nada que me regresará lo que he perdido? Pero solo... dime algo ¿Alguna vez me amaste?-

-¡Claro que lo hice! LO HAGO... Desde que tu amico llamo a aquel programa me enamore de ti sin conocerte y al verte acabe encantado por ti piccolo...-

-¿Y porque... me hiciste daño en... tonces...?-

-Porque tenia miedo de que algo saliera mal... sufría de inseguridad... y... solo lo empeoré...-

-Jeje...- una pequeña risa brotó de sus labios mientras lagrimas corrían de sus ojos -Y vaya que metiste la pata...-.