Confusione di Francesco.

9.6K 911 148
                                    

Una semana... una semana habia transcurrido después de aquel incidente, en la cual, culla fotografía había sido por fín pública ante los medios...
Hoy, si, hoy ambos daría una "justificación" ante lo sucedido.

Ahora se encontraba con Francesco ante un entrevistador, nervioso, confundido, conflictuado. Incapaz de responder dejaba el campo libre a el italiano, quien respondia por los dos.
-Quiero dejar en claro que Mcqueen y yo solo somos colegas y nada mas... Lo visto en esa fotografía no es mas que un mal entendido- justificó el joven Bernolie.
-Entonces... ¿Usted y el Rayo Mcqueen solo son colegas?-
-Por supuesto que Francesco esta seguro señore-
-¿Qué tienes que decir sobre esto Rayo?- preguntó el entrevistador al joven corredor quien al parecer se volvió a verlo confundido y perdido.
-¿Eh? Yo... ¿Qué?-
-Bueno Rayo ¿que opinas sobre lo sucedido?-
-Nada-
-¿Perdón?-
-Nada... solo se trataba de una... tontería...- simple, una respuesta simple, una respuesta destructiva para Francesco, esta vez su acelerado corazón de corredor habia perdido el control y derrapado hasta chocar contra sus pulmones quitándole la respiración y estallando cubriendo su pecho en fuego... esta vez parecía no existir ningún paramedico para el ,para su herido corazón.
-Vaya ¿Quién diría que el Rayo pudiese ser tan frío,eh?-
-Lo que digas...- sus ojos azules rozaron con la mirada a Bernolie encontrando sus ojos con una expresión de dolor, moribunda, encontrando un corazón agonizante, SU corazón agónico.

Terminada por fín la entrevista, el ojiazul se encontraba buscando con la mirada a Bernolie.
-Rayo- se giró encontrandose frente a frente a el corredor italiano. Encontró sus ojos chocolates atrapados en una profunda depresión y dolor.
-Mcqueen tenemos que hablar...- le dijo el pelicafé indicándole que le siguiera.

Lejos, al fín lejos de los demas y en un lugar escondido de cualquiera, el corredor italiano acorraló al joven rubio y sin titubear y permitir hablar a el ojiazul capturó sus labios con los suyos, lentamente el joven cautivo comenzó a disfrutar del beso como el joven italiano, separó sus labios dando paso a la lengua ajena la cual una vez se enredó con la suya, la abandonó sin aviso tal como aquel beso había llegado.
- Questo bacio McQueen, Francesco significa più di quanto si pensi...- susurró el joven de cabello chocolate antes de pasar su lengua sobre los labios ajenos -Francesco... yo... ese beso...- esta vez el italiano no quería oir nada, no ahora...
Capturó los labios ajenos por segunda vez y fiero comenzó a devorar los labios de su presa. Las manos del cautivo se enredaron en las ropas del de cabellos chocolates.
-Mcqueen, Francesco se tiene que ir pero esto no ha terminado-
-¿Qué?-
-Asi como lo oyes Mcqueen...-

Non si allontanano(No me des la espalda)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora