Non si allontanano(No me des la espalda)

♡Jill 2/3 ♡

Segundo Ganadora del Concurso de Oc's:

Se encontraba dando de brincos en el caro sofá de su hogar mientras a todo volúmen sonaba Queen y el fingia tocar la guitarra como todo un experto agitando su cabello en el proceso gracias al brutal movimiento.

Dio un salto con voltereta quedando sobre la mesa de cristal al medio de la sala donde volvió a fingir que tocaba y daba de brincos haciendo sonar la mesita como si cualquier momento fuese a romperse. Alcanzó una de las latas de bebida energética que tenía por ahí regada y se bebió el contenido de un solo trago para seguir ahora cantando a todo pulmón.

*Click* la puerta del Penthousesse abrió mostrando a papá Francesco con las compras, las cuales cayeron al suelo por la sorpresa del hombre. -JILL- gritó viendo a su hiperactivo hijo -Portate la vostra tracero benedetta qui adesso prima di rompere che marmocchio-

-¡Oh vamos! No me voy a romper el bendito t- *crash* la mesa terminó por romperse y Jill por quedar -como su padre predijo- con el culo atorado y semi roto en la mesa. -Bueno... Tal vez tengas razón, papi- Francesco lo miró con un tic nervioso en su ojo izquiero y sonrio de manera retorcida, de suegras endemoniadas a hijos con demonios internos que por más que lo intentaron no pudieron exorcizar.

-Jill...-

-Papa- el chico sonrió mirando a su padre.

-APAGA LA MALDITA MUSICA ANTES DE QUE TERMINE DE PARTIRTE EL CULO BAMBINO Y PONTE A ORDENAR TODO ESTO ANTES DE MCQUEEN LLEGUE Y PIERDA LA POCA AUTORIDAD QUE YA TENGO EN ESTA CASA- gritoneo arrojandole lo que tuviese a la mano a su hijo con tal de apresurar a su hiperactivo demonio.

Jill terminó y suspiró dejandose caer en el sofá agotado mirando al techo. -Mi padre está loco- susurró viendo a su viejo preparar la cena para cuando su otro papá llegase. El joven hiperactivo sonrió -¿Puedo invitar a Dylan a casa esta noche para cenar?- preguntó en un susurro para luego fingir un asento italiano como el e su progenitor y hablar -Por supuesto Bambino, trae a tuyo amico a cenar esta noche-

Se estiró, alcanzó el teléfono y marcó un número viendo a su hermano menor, por un año, entrando decaido. -¿Alister?-

Este lo miró y se dejó caer pesadamente a su lado -Trate de hablarle a "el" y solo conseguí cagarla, hipercagarla después y luego embarrar toda esa cagad-

-Mas te vale que Francesco no te vuelva a oir hablar hací- gritó el castaño desde la cocina.

-Pero el las dice...- murmuró Jill mirándolo -No es justo-

-Nada en esta casa lo es- murmuró Alister cuando tocaron a la puerta.

Jill se levantó casi de un salto y corrió a abrir totalmente emocionado -DYLAN- abrazó al chico que yacia en la puerta con un moregon en el ojo y una gasa con sangre en la mejilla, con los cabellos megros y azules cayendo por su rostro ocultando el cielo que parecía perder color de sus ojos.

Alister lo miró con sorpresa y comenzó a titubear. ¿El era el famoso amigo de Jill? Comenzó a hundirse en un aura oscura de celos y preguntas sin respuesta junto a temor y nerviosismo.