Parte 27

17 1 0
                                    

Lisa PoV:
Estábamos todos bailando cuando la abuela de Lucas anunció con un micrófono que quedaban dos minutos para las 12. Los camareros empezaron a repartir pequeños cuencos con uvas peladas y sin huesos. 'Que nivel' pensé.
Nos acercamos a la televisión donde estaban echando el típico programa de año nuevo. Estábamos Lucas, Alex, Lucy, Lisel... Un momento, faltaban Nathan y Vera 'se habrán ido juntos a besarse o algo', pensé. Otro momento, ¿ y Rafa? Lo mismo había conocido a otra chica.
Iba a ir a buscarlos pero Lucas me frenó.
- ¿ Dónde te piensas que vas?- me dijo con el ceño fruncido.
- A buscar a Rafa, Vera y Nathan.
- Lisa no te va a dar tiempo, ellos seguro que se lo están pasando bien y a las doce saltan los fuegos artificiales osea que se darán cuenta.
No me dió tiempo a protestar porque empezaron a sonar las campanadas.
Cuando iba por la sexta uva cometí el error de mirar a Lucas, estaba con las mejillas infladas como una ardilla y no paraba de meterse uvas, pero no se las tragaba. Me empecé a reír y no pude evitar escupir las uvas que tenía en la boca, entonces Lisel me miró se rió y las escupió también. Alex nos vió y en un intento de no escupir las uvas se atragantó.
Sonó la última campanada y empezaron a tirar confeti y a gritar y a volverse locos por el año nuevo. Lucas y yo salimos al jardín a ver los fuegos artificiales . Me tiré a besar a Lucas, pero por alguna razón él no me devolvió el beso. Me separé de él mosqueada y le miré. Él negó con la cabeza y empezó a señalarse las mejillas. Entonces me di cuenta, todavía tenía la boca llena de uvas.
- Quieres tragarte eso.- dije intentando no reírme. Realmente parecía una ardilla.
- Go Guego.- intentó decir.
-¿Qué? - cada vez era más difícil no reírse.
- Gue go guego.
En ese momento llegaron Lisel y Alex. Alex dió una fuerte palmada en la espalda a Lucas y éste escupió todas las uvas, directas hacia mí. Suerte que Lisel tuvo buenos reflejos y me tiró del brazo para esquivar las uvas. Nos quedamos mirando los cuatro en silencio unos segundos y nos empezamos a reír.
- Feliz año nuevo.- dijo Nathan apareciendo por detrás. Se le veía como muy contento.
-¿Y Vera?.- pregunté.
- No lo sé, ¿debería saberlo?.- dijo confundido.
- No, da igual, estará con Rafa.
- Creéis que Rafa y Vera...- empezó Lisel.
- No creo, sinceramente no me parece que se lleven muy bien la mayoría de los días como para ahora encima que estén saliendo o algo.- dijo Alex.
Seguimos bailando cuando al rato apareció Vera.
- Lisa, necesito hablar contigo. - me gritó al oído.
Le indiqué a Lucas con la mirada que me iba y me fui con Vera al desván.
- ¿ Era necesario subir hasta aquí? - dijo quejándose.
- Es el único sitio donde no se escucha mucho la música.
Nos sentamos en una cama y Vera me empezó a mirar y a sonreír.
- Vera, ¿qué pasa?, ¿tengo un moco o algo? ,¿ por qué sonríes?
-¿Te acuerdas de la primera noche que pasamos todos juntos contigo?.
Asentí con la cabeza.
-¿ Y te acuerdas de cuando me preguntaste por Lisel y mi hermano?.
Volví a asentir.
-¿Y te acuerdas de cuándo me preguntaste por mí y te dije que no había nadie que valiese la pena?.
- Dios Vera, me estás poniendo nerviosa, sí me acuerdo de todo eso.- dije exasperada.
- Bueno, pues que me equivoqué, si que había alguien que merecía la pena pero no me había dado cuenta, y hoy me he dado cuenta y le he besado y ha sido el mejor beso porque justo después han empezado los fuegos artificiales.
- ¿Te has besado con Nathan?.- dije ligeramente sorprendida.
-No, digamos que Nathan está un poquito pillado.
- ¿ Tiene novia? Espera, espera, si no ha sido con Nathan, ¿con quién ha sido?.
- Con Rafa.
-¡¿Con Rafa?!- dije abriendo los ojos como platos.
- Sip.- dijo sonriendo y poniendose ligeramente roja.
Me contó todos los detalles del beso y todo lo que se habían dicho, pero no me quiso contar con que chica estaba Nathan. Ahora lo entendía todo, por eso Rafa estaba tan raro con Nathan

Bajamos al salón a encontrarnos con los demás y seguir bailando. Tiramos petardos en el jardín y asamos nubes en unas velas que había por ahí porque Lucas no nos dejó hacer una hoguera en su precioso césped. Eran las ocho de la mañana cuando decidimos subir al desván a dormir, aunque cuando llegamos empezamos a hablar y tardamos como una hora en dormirnos, yo fui la primera.
...............

Ángeles sin alasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora