Capítulo 20

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La madrugada se encontraba en su punto mas profundo. Ese en el que dicen que todo es mas oscuro, solo porque estaba a nada de empezar a amanecer. Pero aún había movimiento en casa.

Wesley había dejado a Darren durmiendo, y se dispuso a dar una última vuelta a Derek, quien dormía plácidamente en su cuna, junto a Bárbara.

Bajó a la sala y encontró a Adam en silencio sentado en el sofá. Revisaba desde su Tablet algunas fotografías relacionadas al rodaje. Se veía tan concentrado que no quería molestarle. Así que, casi zombificado, se quedó parado al pie de la escalera.

Adam, al escuchar la respiración tras él, volteó algo nervioso, creyendo que era Bárbara para reclamarle que aun estuviese trabajando. Pero al ver a Wesley ahí parado, se sorprendió un poco. Apagó la Tablet y la dejó de un lado.

No le gustaba verle de ese modo, se veía triste, pesaroso. Las ojeras eran más que visibles, haciendo enormes bolsas bajo sus ojos.

—Perdón, no quería molestarte. -Habló el chico al notar que tenía la atención de su padre. –

—No, no estás molestando. Ven, siéntate un rato. Has estado todo el día de aquí para allá, y no has parado. -Wesley caminó lentamente hacia el sofá, quedándose de pie. – Estoy consciente de que para ti las prioridades ahora, son Derek y Darren, pero no vas a poder hacer nada por ellos, si no descansas. -El chico suspiró, bajando la mirada. Adam se puso de pie frente a él, tomándole de los hombros para hacer que levantara la mirada. - ¿Cómo estás? -No obtuvo una respuesta por parte del chico, solo encogió los hombros. –

Todo esto estaba siendo muy pesado para Wes, pero a pesar de eso, había logrado sacar adelante esos dos días siendo la piedra angular. Y ya sus hombros no podían contener el peso.

—¿Puedo pedirte algo? Es algo estúpido, pero… -Se sentó antes de terminar la oración. - ¿Podrías abrazarme? -La voz se le quebró al hacer esta pregunta, Adam sintió un nudo en el estómago al escucharle decir esas palabras, y no dudó ni un segundo en hacerlo. –

Se sentó a su lado y le envolvió con sus brazos. Wesley pegó la cabeza del pecho de su padre, dejando escapar las primeras lágrimas desde la terrible noticia.

—Era mi amiga… Mi mejor amiga. –Entenderle, era algo difícil, porque se le dificultaba expresar las palabras debido al llanto. – Y ahora ya no está. Quería ser fuerte, quería estar ahí para Darren, tal y como él lo ha estado para mí en los momentos duros. Pero no puedo mas, no puedo aguantar más.

—Llora todo lo que tengas que llorar, no te lo guardes más. -Podía sentir la pena y el dolor en el llanto de su hijo. – Has sido fuerte Wesley, más de lo que tú mismo podrías imaginar. Pero está bien detenerse y llorar.

—Es muy duro… Es muy injusto papá, es muy injusto. Ella tenía tantas ilusiones, estaba feliz por convertirse en madre y… Pasa esto ¿Por qué? ¿Por qué tuvo que pasar esto? –Esta pregunta era tan importante, pero no tenia una respuesta concisa. -

—Hay cosas que no podemos controlar, que por más duras que sean, debemos aceptar que pasan. Eso no quiere decir que no nos duela. Esto es algo terrible, lo sé, ella no lo merecía. Ella merecía una vida alegre junto a su bebé. Y ese pequeñito merecía crecer con su madre. –Suspiró con pena. - Pero la vida no siempre es justa. -Wesley continuaba llorando desconsoladamente, mientras su padre le envolvía en sus brazos. Adam no veía a un hombre llorar, solo podía sentir a un pequeño desconsolado. –

—Me duele pensar en Derek, en lo que va a pasar más adelante. Es tan pequeño y obviamente no tiene noción de nada. Pero un día lo va a entender y va a ser doloroso para él, va a crecer sin su mamá, y… -Se interrumpió a si mismo, porque el llanto no le dejaba hablar. Adam entendía lo que estaba pasando, eso que iba más allá del hecho de perder a su amiga, o pensar en lo que pasaría con el pequeño Derek. Esto tenía que ver con él mismo. – Perdón yo… -Se separó ligeramente de su padre, para intentar secar sus propias lágrimas. – Estoy haciendo esto mal, yo… Me estoy proyectando en Derek, y está mal. -Adam le tomó de la mejilla, observándole fijamente, estaba intentando contenerse, pero fue inevitable dejar correr una lágrima. –

—No estás mal ¿Ok? Esto es algo que te afecta directamente. No tuviste la oportunidad de dejarlo fluir, y ahora todo se acumula, haciéndote explotar. Y es mi culpa. Nunca voy a dejar de pedirte perdón por eso. –A Wesley le estaba costando respirar debido al llanto, así que lo hacia por la boca. – Perdóname ¿Sí?

—Perdóname tu a mi. –Adam frunció el ceño. – Sí te llamé para que hablaras con Darren, y sirvió porque después de hablar contigo, se abrió mas y logró expresar todo lo que tenia adentro. –Adam asintió. – Pero también lo hice para que, mediante la ayuda que pudieses prestarle a Darren, te perdonaras a ti mismo por lo que pudiste hacer hace unos años. –Andy respiró profundo, susurrando un “lo sé”, mientras asentía, sus ojos se cristalizaban. – Pero siento que fue contraproducente, principalmente para mi, porque… -Encogió los hombros sin parar de llorar. – Me niego a convertirte en un villano, porque entiendo completamente lo que pasaste, pero…  Me hubiese gustado que en ese momento reaccionaras conmigo, como lo hizo Darren hoy con Derek. –Decir esta ultima frase, le volvió a quebrar, pero también lo hizo con Adam. Esto le causó un dolor profundo, que le hizo soltar las lagrimas que aguantaba. Había sido un golpe tan fuerte, pero del cual estaba consciente que merecía. Wesley le abrazó con fuerza nuevamente, dejando fluir todo eso que le apretaba en el alma. –

—¡Perdón! –Susurró Adam, consciente de su dolor. Era una herida que Wesley guardaría consigo siempre, sin importar cuanto hubiesen perdonado. –

Lazos DesenterradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora