𝐘𝐀𝐌𝐀𝐆𝐔𝐂𝐇𝐈 𝐕𝐈𝐁𝐄𝐒 - Tsukishima Kei ✓

18 | Perder

Omnisciente

—No esperaba que me llames por mi nombre —dice ______.

—¿Está mal que lo haya hecho? —pregunta el rubio.

—No, pero pensé que ibas a tardar más, Kei —amaba decir su nombre.

—Tonta —dice mirando al lado contrario.

—Acá el que dio flores fuiste tú —dijo haciéndole entender que el tonto era él—. Ahora me sentiré mal por no darte nada.

—Ronda de San Valentín ganada —fingió que lo anotaba en una lista imaginaria—. ¿Yamaguchi está en tu casa?

—No lo sé —responde sin importancia—. Tal vez anda con Hinata por ahí practicando, no sé en qué momento se volvieron tan amigos.

Llegaron a su casa, y como era de esperar Tadashi no estaba, se notaba por el silencio que había en la casa. Ambos entraron y de deshicieron de sus zapatillas, ______ dejo las flores en un florero que estaba vacío, les puso agua mientras las miraba con una sonrisa. Tsukishima la miraba sin poder dejar de pensar en lo que casi había pasado ayer, de hecho, no pudo dormir en toda la noche pensando en eso.

—¿Pasa algo? —pregunta la chica al notar la mirada de este.

—No, solo te miraba —dice tratando de no sonar nervioso.

—¿Seguro? Por qué tal vez mi regalo de San Valentín podría ser... seguir lo de ayer —dice acercándose e invadiendo su espacio personal.

—Sería un buen regalo —dice Tsukishima sin poder dejar de mirar sus labios, esos labios tan perfectos.

—En ese caso ganaría yo —dice para mirarlo a los ojos—. ¿Estás dispuesto a perder?

—Mierda, sí —dice para besarla descontroladamente, como si fuese a morir al no sentir sus labios.

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—Kei~ —dice cuando se separaron para poder tomar aire.

—Juro que si dices una vez más mi nombre en ese tono voy a perder la cabeza —le dice el rubio mirándola seriamente.

—¿Vas a morir, Kei~? —dijo con la clara intención de que este perdiese la cabeza, Tsukishima no era una persona fácil de poner nerviosa o hacerle "perder la cabeza", y que solo con decir su nombre esto pasase era como un regalo.

—Te odio tanto —dice tomando una bocanada de aire.

—Yo también te amo —dijo para volver a besarlo y guiarlo escaleras arriba a su habitación.

Iban subiendo las escaleras y deshaciéndose de las prendas menos importantes, como el buzo, una remera, para cuando llegaron a la habitación ambos estaban en pantalones (y ______ con el sostén aun puesto).

—¿Quieres hacer esto? —pregunta Tsukishima para estar seguro de no estarla presionando o algo así.

—Si no quisiese hacerlo no lo hubiese propuesto —respondió mientras le sacaba los lentes y los dejaba en su escritorio—. Además, no podría dejar a tu amigo con ganas por segunda vez —dijo tocando el miembro del rubio sobre los pantalones.

—______~ —claramente ______ no era la única que sabía cómo decir el nombre de su pareja en un tono muy seductor—. No hagas eso.

—¿Por qué? —pregunta "inocentemente"—. ¿Es mucho para ti, Kei?