SobReviViR

Guzmán

Marzo 2021

—¿Qué decía Lucrecia entonces? —preguntó Ander.
—Que me ama, aunque yo no la ame a ella.
—Sigo sorprendiéndome de cómo es que ella pudo poner eso en tu mochila —dijo Ander—. No hemos sabido de ella en medio año y de repente aparece en tu mochila una carta suya.

—Es extraño, es su letra, pero su escritura es diferente... como si fuera menos Lucrecia que normalmente -externó Guzmán.
—¿Realmente nunca la quisiste? -preguntó Ander.
—El sexo siempre fue bueno, pero siempre nos faltó algo —declaró Guzmán.
—No tío, siempre te faltó amor a tí -le aclaró el chico—. Porque ella derramaba amor por ti.

—Eso no me hace sentir mejor, Ander.
—El punto no era que te sintieras mejor, Nunier -rió Ander-. El punto aquí era que pensaras un poco... ¿Por qué si no la querías, si nunca la quisiste de esa forma... por qué hacerle creer que sí? Guzmán, ella pasó el verano después de la muerte de Marina contigo... ambos sabemos que Lucrecia y el campo simplemente no se van... y se quedó allí contigo.

—¿Quieres escuchar que soy un gilipollas? —casi gritó Guzmán—. ¡Bien! lo soy, soy un puto gilipollas que lastimó a la mejor amiga que jamás podré tener y que ahora, a pesar de que mágicamente me dio una carta, no tengo forma de contactar con ella, porque ahora es ella quien dice que necesita alejarse para poder sanar. Lo dije.

—Espero que eso te ayude a sentirte mejor... al menos un poco —recalcó Ander—. Al menos mientras entiendes que ella siempre fue más que tu mejor amiga.
—¿De qué cojones hablas?
—Ustedes no eran una pareja de novios normales —sonrió de lado Ander—. Eran más como un matrimonio, los padres de todos nosotros... y tú le pusiste el cuerno a mamá Lu... una aventura que ahora es nada, te hizo perder a la única chica que siempre estuvo para ti, sin importar la mierda que cargaras contigo.

—¿Que insinúas?
—Nada, solo esclarezco que diste por hecho que Lu siempre estaría allí, y por eso no te importó irte con Nadia, después de todo, Lu seguía allí para ti, y es ahora que no está, cuando la valoras.

—No sé que pasó con ella, y no tengo idea de cómo esa carta pudo llegar a mi valija pero...
—Quieres hablar con ella. Lo sé, todos queremos habar con ella.
—Valerio sigue diciendo que ella está bien... —dijo Guzmán, pero él conocía a Lu mejor que eso y si ella había desaparecido de las redes sociales, es que definitivamente no estaba bien.

—Ambos lo sabemos mejor ¿No? —preguntó Ander—. Ella no está bien Guzmán, y tenemos que encontrarla, de alguna forma, todos ustedes siempre fueron familia, Lucrecia siempre fue nuestra hermana caprichuda, pero hermana al fin. Y no se tú, pero a mi algo no termina de cerrarme, estoy preocupado por Lu.
—Era su letra, no de nadie más... eso me altera al tiempo que me tranquiliza, porque quiere decir que está viva, pero... quien sabe en que puto culo del undo puede estar —expresó Guzmán ya sin máscaras, sin filtros, dejando que Ander viese plenamente su angustia por Lucrecia.

—Busquemosle entonces.
—¿No querías ir tu de mochilero?
—Bueno, sí, pero... buscar a mi hermana también es importante.
—¿Le vamos a decir a los demás? —preguntó Guzmán.
—A Nadie parece importarle... ni siquiera a Carla... ta vez por ahora podamos mantenerlo en secreto —dijo Ander y Guzmán solo asintió con la cabeza.

Ninguno de ellos sabía por donde empezar a buscarla, pero era algo que habían decidido hacer por ella.