SobReviViR

Samuel y Lu

Noviembre 2027

Victoria fue su puente a la grandeza.

La Duquesa tenía algunos proyectos filantrópicos que estaba planeando y queriendo ayudar a Samuel, por lo que él había hecho por ella antes, les dio el trabajo a ellos. Fue lo único que necesitaron para que su nuevo despacho: M'R & G subiera como la espuma.

Tanto fue así que ya estaban necesitando de algunos empleados extras. Obviamente su primer candidata fue Claudia, quien parecía llevar la publicidad de la mejor forma posible, contactaron a algunos compañeros ya fuera de su año o menores e incluso mayores que quisieran trabajar con ellos.

Para el final del año, ya eran un pequeño despacho, pero era de los más solicitados, eso les permitió darse un nivel de vida mejor del que ellos habrían esperado.

Lucrecia estaba en una llamada de trabajo con una infanta de Austria cuando recibió de América, (su secretaria) el informe de una llamada de Madrid.

No esperaba que fuera su casera de Madrid, de ese piso que ella había seguido pagando por años, hasta donde Lu sabía no se había retrasado en ningún pago.

-Señora Márquez, habla Luccía M'Rehndrechi ¿En qué puedo ayudarle?
-Soy su hijo, mi madre falleció hace un mes... solo llamo para informarle que no tendrá que seguir pagando el alquiler, venderemos la propiedad ahora que mi madre ya no está.

Fue suficiente para que a Lucrecia le diera un bajón de azúcar y se maldijo por no haber desayunado. Lo suyo no eran las bienes raíces... pero conocía a alguien que sí...

-¿Tienen ya comprador? -preguntó Lucrecia.
-Tenemos varios clientes interesados, pero aún no tenemos a nadie seguro, por eso pedimos a los inquilinos desocupen los departamentos lo más pront...
-¿Cuál es el precio?
-¿Disculpe?
-Me interesa comprar la propiedad -declaró Lucrecia.
-Si renta aquí es porque no tiene para nada más... ¿Crée usted que...
-Si para estas alturas no conoce la firma M'Rehndrechi-García, no es mi culpa que viva bajo una piedra, mandaré a una persona a que haga las negociaciones pertinentes, que tenga buena tarde señor y espero podamos firmar el contrato de compraventa lo más pronto y rápido posible, mi agenda está llena.

Nada más terminar la llamada había contactado a Sergio, había salido con él una ocasión y habían terminado bien, así que se dio la confianza de llamarlo y pedirle que revisara un contrato.

Lu no iba a perder ese departamento, no pudo seguir trabajando en nada por unas buenas tres horas hasta que Sergio no le había devuelto la llamada diciéndole que había conseguido un super trato, y que no tenía idea de porqué Lu quería comprar una propiedad en ese lugar, pero que era un buen trato y que podría ir a firmarlo mañana mismo.

Esa noche cuando llegó a casa, Samuel estaba haciendo la cena y Athena ya estaba dormida, ni siquiera tenía que decirle a Samuel que iría a Madrid, así que simplemente le comentó que tenía una agenda llenísima al día siguiente.

-La propiedad donde vivías en Madrid y la contigua están en venta.
-Parece que todo el mundo quiere vender en Madrid -masculló Lu.
-¿Qué?
-Nada -se apresuró a decir Lu-. ¿Entonces mi vieja casa está en venta?
-Sí... y la contigua... pensaba... ¿Y si hacemos un club en Madrid? uno donde la élite pueda ir a gastar su dinero en nuestras propiedades... -dijo Samuel maquiavélico.
-Eso suena demasiado tentador, pero no tenemos aún el capital para eso.
-Le comenté a Claudia y Sammy, están dispuestas a tomar el riesgo ¿Qué dices?

-¿Cómo se llamaría?
-Se lo mucho que quieres darle a tu padre una bofetada a guante blanco -dijo Samuel divertido-. Así que pensé que "Mansión M'Rehndrechi" sería la mejor forma.
-Vale, es brillante y tentador, pero... justo ahora no puedo poner dinero en nada... estoy en una inversión Samu -aclaró ella.
-Eso es lo divertido, tu y yo no invertiremos directamente, sino la empresa, será M'R&G quien haga la inversión, no nuestros fondos personales... sería el primer Club de una cadena.

-¿Por que en Madrid?
-Te lo dije, se lo mucho que quieres restregarles a todos que Lucrecia no se da por vencida -dijo Samuel con una sonrisa dulce y Lucrecia con más razón decidió hacer ese vuelo.
-Entonces estoy dentro.
-Perfecto, el viernes tendríamos que hacer una junta para que empecemos con el diseño... tengo un montón de ideas...

Lu escuchó cada idea con atención mientras, al mismo tiempo, pensaba en que tendría un buen regalo para Samuel... él no le había cobrado la casa de al lado, simplemente la había puesto a su nombre y Lucrecia cobraba las rentas, ella podía permitirse regalarle ese piso lleno de recuerdos a su hermano de vida.

Diciembre 2027

Nano y Pilar pasaron navidad en la casa de la novia de Nano, desgraciadamente Samuel y Lu no pudieron ir porque tenían mucho trabajo pendiente en Barcelona... o eso fue lo que había dicho Lucrecia a Samuel.

Tenía planeada esa sorpresa desde noviembre para él.

Preparó la pañalera de Athena, y dos maletas para una semana, una para ella y otra para Samuel, y tal cómo él le dijo a ella aquella vez que la llevó a Marruecos, ella lo hizo esta vez para él, era 22 de diciembre y llegaron casi corriendo al aeropuerto.

-¿Madrid? ¿Qué cojones vamos a hacer a Madrid? -inquirió Samuel.
-Tranquilo Camarero, nada malo, simplemente te tengo una sorpresa ¿Puedes confiar en mi?
-Sabes que si Lu -suspiró resignado Samuel.

Los tres abordaron el avión. Era el primer vuelo de Athena, razón por la cuál ninguno pudo dejar de tomarle millones de fotos. La niña le había aprendido muy bien a Lucrecia, era toda una modelo profesional con solo año y medio de vida.

Athena se quedó dormida durante el vuelo y mientras Samuel se encargaba de las maletas y de cargar a Athena, Lucrecia fue a por el taxi y le dio la dirección del viejo edificio en el que había vivido Samuel.

-¿Qué hacemos aquí Lu? -preguntó Samuel una vez se fue el taxi.
-Pensé que si tu me habías ayudado tanto... yo podía devolverte el favor... lo compré -dijo Lu señalando el edificio.
-¿Compraste el piso?
-No tonto, compré el edificio por una oferta increíble -dijo Lucrecia orgullosa-. Sergio me ayudó con ello, me consiguió un buen trato... no fue tan caro como esperaba y... sé cuánto significa esto para tí, ese piso... Samuel, sé muy bien lo que representa el piso en tu historia con Carla... e independientemente de ello, le tengo cariño al lugar... aquí aprendí a valerme por mi misma.

Pasaron Navidad en el viejo piso de Samuel, claramente después de limpiarlo. Athena curioseaba por todo el lugar con esos enormes ojos azules bien abiertos. Cenaron los 3 juntos divertidos con las ocurrencias de Athena. Y al día siguiente recibieron la visita de Mencía, quien de nueva cuenta, llevaba regalos para la niña. Le contaron sobre sus (ahora) dos proyectos en Madrid, la Mansión M'Rehndrechi y la remodelación del edificio, ella se encontraba entusiasmada con ambas ideas.

-¿Pasarán año nuevo acá? -preguntó Mencía.
-No lo creo, queremos llevar a Athena con Claudia, Hera y Hades -dijo Lucrecia.
-Bueno, parece que huyen exitosamente de cada reunión que hacen en Las Encinas, porque han organizado una para Año Nuevo -comentó Mencía.
-¿Carla ha confirmado? -preguntó preocupada Lucrecia.
-Lo hizo, estará aquí con su estirado prometido -dijo Mencía con mala cara.

-La conozco tanto que dudo de sus buenas intenciones Menci -confesó Lucrecia.
-¿A que te refieres?
-A que, si la conozco bien... ella no viene para buscarme a mí, sino a Samuel y lo hace justo ahora que él ya no sube fotos con Raquel.
-¿Tu crees que ella aún quiere volver con él? -inquirió Mencía confundida-. ¿Entonces porqué sigue comprometida?
-Porque es algo seguro... en caso de que Samuel la mande al carajo -afirmó Lu-. Ella nunca ha llevado bien un rechazo. Los lleva incluso peor que yo.

-¿Crees que no es buena idea que se vean con Samuel? -inquirió la chica.
-No lo sé, o sea, sé que Samuel siempre va a pensar primero en Athena... lo ha demostrado, pero... Carla siempre fue su punto débil... y Samuel es como un adicto, lleva siete años sobrio de ella... no sabría decirte que pasaría si la viese de nuevo -admitió Lu.
-Igual te mantendré informada de cualquier noticia de la boda de la Marquesita... seguro hace eco en el chat grupal.

-¿Y de Guzmán? ¿Has sabido algo?
-Que está de viajes constantes, trabaja con su padre -respondió Mencía-. Después de sus problemas con Ari, no es que sea muy parlanchín conmigo.
-¿Y qué tal con Rebe? -preguntó Samuel uniéndose a la charla después de acostar a Athena.
-Decidimos que vamos a intentarlo de nuevo -dijo Mencía y ambos chicos vieron un brillo increíble en sus ojos.

Celebraron con Mencía, pues realmente les hacía feliz ver a su amiga tan contenta.