Agapē (Oliver y Tn)

XVI

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No sé qué hacer con esta
sensación en mi pecho que me
hace creer que pase lo que pase,
siempre te voy a querer.

~Jarhat Pacheco~

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-Chicos, vayan a sus actividades- les dijo Lucas, ellos hicieron caso y nos dejaron solos en la entrada -Oliver-

-Se que pudiste llegar a pensar eso, pero tú sabes que no me atrevería siquiera a pensar en ello- él soltó un suspiro

-Lo sé, perdón Oliver- yo solo negué con la cabeza

-Tengo actividades que hacer- si bien me dolía dejarlo, también me afectaba que pensará así de mí, que la confianza que construimos con mucho tiempo fuera así de débil.

Tomé algunas cosas de mi cuarto y fui a entrenar un poco mi tiro con arco para después pasar con el rifle. Al cabo de una hora regresé todo a su lugar y salí a caminar por el pueblo. Los niños se veían alegres, jugando entre ellos.

-¿Todavía nadie la ha encontrado?- oí decir de una niña

-No, ya hemos revisado cada casa y algunos están por el bosque, pero nadie ha dado con ella- respondió un niño

-¿A quién están buscando?- me animé a preguntarles

-A ____- respondió la niña

-Estamos jugando a las escondidas, todos están buscándola, pero nadie la encuentra- prosiguió él

-¿Cuánto tiempo le queda?-

-No nos dijo un límite...- dijo la niña

-Ya veo, pero si hay algunas reglas ¿Cierto?-

-Si, dijo que nadie podía entrar en las casas, porque sería más complicado buscar-

-¿Otra cosa?- volví a preguntar

-Que no debemos rebasar los límites del bosque-

-De acuerdo, con estas reglas, si fueran ella ¿Qué harían?- les cuestioné

-Mhm, una de dos, o me escondo dónde nadie me pueda encontrar jamás, o me voy moviendo conforme los demás se muevan- respondió el niño

-Muy bien-

-Pero yo creo que más bien es la segunda opción- hablo la niña -Cuando ella juega con nosotros nunca se queda quieta, tiene más energía que todos aquí- argumentó

-Tienes razón- afirmó el niño

-Entonces reúnan a todos- dije con una sonrisa -Planeen algo y háganlo entre todos, en algún momento ____ se tiene que cansar-

-¡Si!- me contestaron al unísono, rápidamente ellos se reunieron con los demás en la plazoleta, yo en cambio me adentré en el bosque.

No tarde tanto en oír crujir unas ramas, levanté mi vista, y en medio de las hojas la vi sentada en una rama fuerte, con la vista al cielo falso del lugar.

-Te encontré- hablé despacio, ella me miró y bajó del árbol con gran agilidad

-No sabía que tú también estabas jugando-

-No lo estaba, es mi descanso y salí a caminar, pero oí de casualidad que te estaban buscando y yo decidí caminar por el bosque-

-Ni tú te lo crees- respondió, no le tome importancia a su comentario

-Que peculiar el lugar que elegiste- el brillo en sus ojos se apagó por un momento -Ese niño ya está descansando en un lugar mejor-. Ella se había estado escondiendo en el árbol que nos protegió de Nous y Nouma cuando cazaron al niño que ella salvó de Luce.

-Si, quiero creer que si-

-Hiciste lo que pudiste, y eso es mejor que nada-

-Si...- iba a decirle algo más, pero un grupo grande de niños llegó corriendo

-¡Aquí! Ya la encontramos- gritó quien dirigía al grupo

-Si que se tomaron su tiempo- les dijo ella

-Lo sentimos- contestaron al unísono

-No pasa nada, yo sé que pronto lograrán encontrarme más rápido-

-Si-

-Bien, vayan a jugar, tengo algunas cosas que hacer-

-Nos vemos- algunos se despidieron de voz, pero los más pequeños la abrazaron

-Tengan cuidado. Recuerden, mañana es la cacería-. Todos los niños se fueron, dejándonos solos. Nosotros empezamos a dirigirnos al molino.

-En verdad te aprecian-

-Si, y son un amor, deberías de jugar, tómalo como parte de tu entrenamiento- yo la mire confundido -¿No te das cuenta?-

-Sinceramente, no- le respondí -Espera... Ya, ya entiendo, los niños no solo mejoran su capacidad física, sino que también mental, pues tienen que pensar como al que buscan, como el enemigo-

-Así es mi estimado. No creas que estoy perdiendo el tiempo jugando, soy instructora, y que mejor que aprender jugando-

-Muy ingeniosa-

-No tanto. Bueno, tengo que practicar, nos vemos Oliver-

-Adiós, con cuidado-

-Siempre-

La perdí de vista. Entré a la cocina, ahí ya estaban Zack y Pepe para hacer la comida

-Llegas tarde- me regañó Pepe

-Lo siento- respondí arremangándome los puños

-¿Qué pasó? Es raro en ti llegar tarde- dijo Zack

-Me puse a jugar con los niños y se me fue volando el tiempo-. De estar picando verdura me voltearon a ver consternados

-¿Tu jugando con los niños? Eso es aún más raro- comentó Zack

-Si, algo te pasa Oliver, ¿o es acaso alguien?- siguió Pepe

-La verdad no lo sé, tengo muchas cosas en la cabeza-

-¿Alguna de esas cosas se llama ___?- insistió Zack

-Tal vez-

-¿Te gusta?-

-No, no es eso. Es que desde que ella llegó ha habido muchos cambios aquí ¿No lo creen?-

-Bueno, si lo dices así, si- afirmó Zack mientras Pepe solo asentía con la cabeza -Iniciando por los entrenamientos-

-Si, pero no sé si recuerdes, pero antes de que ella llegara, aquí nos hablábamos poco, solo en grupitos, pero poco a poco ella nos fue uniendo más-

-Antes solo hablaba con Zack, pero heme aquí, hablando contigo, Nigel y ella- agregó Pepe

-Bueno, sin duda ella ha traído varios cambios ¿y eso qué? Si alguno de nosotros se hubiera propuesto hablar con todos para tener una mejor convivencia el resultado sería el mismo- preguntó Zack

-Yo creo que no, ella ha encontrado lugares ocultos en las cabañas e indirectamente está entrenando a los demás niños, y si le agregamos que es prófuga y que ha logrado que Lucas sonría verdaderamente, ella tiene un expediente increíble-

-¿Está entrenando a los niños?- volvió a preguntar Zack

-Si, con juegos como las escondidas o las traes-

-¿En serio eso es entrenamiento?-

-Claro, si tu objetivo es fuerte, si-

-Definitivamente es una caja de sorpresas- comentó Pepe

-Si, tienes toda la razón-