XXV

58 3 0
                                    

∞∞∞∞∞∞∞∞

Soñar no te sirve de nada
si te olvidas de vivir

~Harry Potter~

∞∞∞∞∞∞∞∞

Ya habían pasado dos semanas desde que todos los de Goldy Pond llegamos al refugio, las cosas estaban muy animadas desde entonces, las mañanas estaban endulzadas con música y las noches casi parecían pijamadas.

Todos mis amigos ya estaban de pie y por su cuenta, solo Gillian y en ratos Oliver necesitaban ayuda para algunas cosas, como levantar algo del suelo o alcanzar algo de un estante. Solo Emma seguía sin despertar.

-No Gillian, es la décima cuarta vez que te lo digo está mañana. Papá no me dejaría- en serio que la adoraba, pero a veces era muy... Insistente

-Anda ____, un nuevo estilo no te quedaría nada mal-

-Si, los cambios son buenos- le siguió Sonia

-¿Aparte de eso hay alguna otra buena razón?- pregunté agobiada

-Impresionaras a ya sabes quién- me susurró Paula

-No necesito de un corte de cabello para eso- les respondí segura

-¿Quién es "ya sabes quién"?- papá se metió a la habitación y por ende a la plática, sin duda era un chismoso

-Alguien- le respondí. Él todavía no sabía que gustaba de Oliver -Luego con calma te cuento-

-Mas te vale-

-Qué bueno que llegó- comentó Gillian -¿Nos da permiso de cortarle el cabello?-

-Claro- su respuesta inmediata me sorprendió

-Ya lo oyeron chicas, cierren la puerta que la magia comienza-

Con empujones todas sacaron a papá de la habitación, quien ahora preguntaba desesperado que me iban a hacer. Ya me lo imagino mordiéndose las uñas siendo consolado por Lucas.

-Yo creo que le quedarían bien las capas, sus ondas resaltarán- comentó Paula, todas asintieron

-¿Hasta dónde quieres la capa de abajo?-

Me la pensé un poco, me gustaba mi cabello a la altura de la cintura, pero a veces me causa problemas

-Córtenle unos seis centímetros- dije con seguridad

-Bien-

Todas pusieron manos a la obra, al finalizar el corte me pusieron dos aceites, uno para fortalecer y el otro para brillo.

-¿Y si aprovechamos y también cambiamos tu vestimenta?-

-Claro, como tenemos tantas opciones- comenté sarcásticamente

-¿Qué tal si te pones falda? Siempre usas pantalón- propuso Violet

-Me gusta llevar pantalón-

-De acuerdo, tápenla- ordenó Gillian.

De repente sentí una toalla que me cubría toda la cabeza, todas me guiaron hacia afuera, en cuanto abrieron la puerta los gritos de histeria de mi papá comenzaron

-¿Que le hicieron a mi niña? Le mocharon la oreja ¿Verdad?-

Oí que Lucas lo calmaba, pero no funcionaba. Las chicas me guiaron hasta el baño, ahí fue donde me quitaron la toalla sin que nadie más viera

-Ahora métete a bañar y depílate- me ordenó Gillian

Sabía que si me negaba ella era capaz de ducharme, así que maldiciéndola en secreto me metí a bañar. La ropa que habían dejado era una falda tipo paraguas en color negro que me llegaba hasta los tobillos, la blusa de botones y manga larga del refugio, un listón negro y botas del mismo color. No sabía para que me había pedido depilarme.

Al salir del cuarto de duchas, todas se sorprendieron al ver el cambio.

-Te ves espectacular- halagó Paula

-Fabulosa- agregó Sonia

-Linda- siguió Violet

-Simplemente divina- concluyó Gillian

-Gracias chicas-

-Ahora ven, vamos a arreglar ese cabello-

Me desheredaron mi cabello, y por capas me fueron poniendo crema para peinar, gel, me hicieron scrunch y por último me pusieron aceite. Tomó algo de tiempo, pero el resultado era genial.

-Estas lista para tu presentación en sociedad- dijo con orgullo Gillian

-Pues andando-

En cuanto abrí la puerta de los baños sentí los brazos de papá

-¿Estás bien? ¿Te lastimaron?- preguntó con preocupación

-Ve por ti mismo-

Su mirada cambio de un momento a otro, sus ojitos de tlacuache se iluminaron

-Te ves bonita- al recordar que las chicas y Lucas estaban viendo, carraspeó -Si, te queda bien- me dio unos empujones para que siguiera caminando.

Ya era hora de la comida, en cuanto puse un pie en el comedor las miradas de todos se pasaron en mí.

Los cumplidos y abrazos de los pequeños no tardaron, todos se reunieron a mi alrededor, las chicas más grandes también me halagaron

-¿Y ustedes que miran?- volteé a ver a quien estaba regañando papá, eran los chicos, todos voltearon la mirada a excepción de Oliver y Ray, este último se acercó a mí y me dio una vuelta, haciendo que la falda reluciera

-Que buen cambio te dieron- me dijo con una sonrisa

-Si ¿Quieres unirte?- le propuse mientras tocaba el mechón que le tapaba media cara

-No, gracias. Mi flequillo y yo somos muy felices- se apartó de mi con algo de miedo a lo que yo reí

-Si cambias de opinión te puedo agendar cita con las mejores estilistas-

-Lo pensaré- fue a sentarse

_ _ _ _ _

El día terminó, todos nos pusimos nuestros pijamas para dormir. Antes de entrar a mi habitación, papá me tomó por el hombro, su mirada calmada reflejaba algo de curiosidad

-Me debes respuestas, ya sabes quién-

-Vamos a los archivos-

Estando ahí, nos tumbamos en los sillones puff

-Mira, te voy a contar todo, pero prométeme que después de esto actuaras como si está plática nunca hubiera existido- alce mi meñique

-Por supuesto- entrelazó nuestros dedos, los movimos de arriba para abajo y dimos un último apretón, sellando la promesa

Agapē (Oliver y Tn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora