~Te Amo Más Que A Nada~ - (FANG X EDGAR 🔞)

2 - Qué molesto eres 💥

Narra Edgar.

Aquella noche anterior fue extraña, realmente esperé menos de aquel chico nuevo. Parecía ser un egocéntrico que no le importaban los demás.

Ya había pasado una semana de que él se había incorporado, había conseguido amigos muy rápido. Eso, lamentablemente, me incluía. Hablamos casi todos los días ya sea por teléfono o porque él mismo iba a visitarme. Esa mañana en específico, llegó a mi departamento por la mañana.
Con una gran camisa y un short corto, abrí la puerta. Cruzando miradas con Fang.

Edgar: Ugh... otra vez tú. ¿Por qué te deje que me acompañases esa noche? — Golpeé mi cabeza contra el marco de la puerta, su risa se hizo presente y me entregó una flor — ¿Qué es esto?

Fang: Una flor. ¿No es obvio? — Sonrió y trató de ver detrás de mí, puse mi bufanda frente a su rostro.

Edgar: ¿Qué tratas de hacer, rarito? — Levantó la ceja.

Fang: Sólo echaba un vistazo. ¿Cómo has ido con tu padre? — Fruncí el ceño enojado. Él me miró con seguridad — ¿Qué?

Edgar: ¿Qué te importa cómo me ha ido con mi padre? — Le saqué el dedo, él pareció ignorar aquello por completo — Ya la verdad no me importa, sólo... ¿por qué estás aquí?

Fang: Vine a saludarte, ¿no puedo? — Movió sus cejas, parecía que quería hacerme molestar — Y quiero saber de tí, eres un amigo. Me contaste que tenías problemas con tu papá y pues, por preguntar algo.

Observé que Byron iba caminando detrás de mi, callé a Fang con un dedo en sus labios. Algo que lo puso nervioso, cuando me giré hacia él, tenía una sonrisa "pícara" en su rostro.

Fang: ¿Apurado? — Una carcajada hizo ruido. Byron se acercó a mirar y nos observó a ambos, colocando su brazo sobre el marco de la puerta — Hola, señor. ¿Cómo está?

Edgar: Fang, cállate... — Lo miré con rabia. Haciendo una seña de que hiciera silencio — ¿Qué quieres, Byron?

Byron: Buenos días... eh, ¿quién es él, Edgar? — Puse ojos en blanco e intenté alejarlo de la puerta — Quiero explicaciones de quién es la persona frente a mi puerta.

Edgar: ¿Tu puerta? — Lo dejé más lejos de la puerta, pedí a Fang que me esperase un rato. Golpeé el bastón de Byron con fuerza — No es nadie que te importe a tí, idiota, vete de aquí y déjame hablar en paz.

Byron: ¿Qué te hice yo, Edgar? — Lo volví a empujar una vez más.

Edgar: Que qué hiciste... ¡Imbécil, te fuiste por casi 4 años y nos dejaste a como pudiésemos! — Pude notar una mirada perdida en él, se molestó conmigo.

Byron: ¡Pero ya estoy aquí! — Abrió sus brazos para un supuesto "abrazo", el cual negué con ambos brazos cruzados, oi un suspiro de su parte — Bien, Edgar... sí, quizá me fui por mucho tiempo... pero entiéndeme, ¡tenía que tener tiempo, estaba haciendo muchas cosas!

Edgar: ¿Entenderte? ¡No haré tal cosa, no soy imbécil! — Caminé hasta la puerta sin ver a Byron a los ojos — Después hablaremos de esto, ahora tengo que atender mis propios asuntos... asuntos que no te incumben en nada.