• Libro 3 •
|| Novela basada en la película The Kissing Booth 3 ||
• ¿Qué sucederá ahora que Nea y Noah se han separado? Ambos residen en ciudades diferentes, pero sus corazones aún laten al compás, aún añoran al otro en silencio. ¿Continuarán sint...
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•𝓝𝓮𝓪 •
No estoy segura de cómo debería actuar ahora. He pasado una noche fantástica con Jared, mis piernas aún tiemblan por ello y mi útero se sacude con sólo mencionar su nombre. Pero esto no significa que ya somos una pareja, que nos juraremos amor eterno y que nos casaremos algún día. Estoy satisfecha por lo que ha sucedido, el recuerdo de sus labios y de su toque, jamás me será borrado de la mente o de la piel, eso lo sé con certeza.
Por ello es que deseo mucho más.
No sólo más noches, más besos, palabras sucias y embestidas firmes que enloquecen a mi cabeza y que bien podrían partirme en dos. Quiero su amistad y su compañía, quiero sentirme lo único y más maravilloso en su mundo, quiero ser lo primero para una persona, quiero ser por lo que quemaría a todo su alrededor, por lo que daría todo lo que pudiera. Quiero lealtad, fidelidad y cariño. Quiero honestidad, respeto y muchísima lujuria.
Quiero ser adorada, quiero ser el todo.
Pero el no va a dármelo. Y jamás se lo reprocharía, tampoco lo juzgaría por ello. He visto el dolor que aún ensombrece su corazón y su alma, aunque el siempre trata de evitarlo, de ocultarlo y enterrarlo en lo más hondo de su existencia, he podido ver lo roto que aún se encuentra. Realmente lo jodió esa mujer, lo hizo trizar, le quitó su esencia y sólo dejó un cascarón vacío que cree que el sexo podrá llenar.
El no quiere enamorarse, no quiere sentir amor o alguna clase de afecto romántico por nadie. Está en todo su derecho de no hacerlo, así como yo estoy en el mío de reservarme los sentimientos que tengo por él, sean cuales sean y signifiquen lo que signifiquen. Ni siquiera estoy segura de que es lo que siento, no puedo armar un escándalo por ello ni echarlo todo a perder para nada. Siempre me he considerado valiente, pero esta vez no quiero arriesgarme.
Además, tampoco estoy lista para formalizar con alguien después de tan poco tiempo de la ruptura con mi primer amor. Así que supongo que puedo conformarme con lo que sea que el pueda ofrecerme por ahora, lo disfrutaré cuanto pueda y hasta que decida que ya no quiero más eso, que quiero más y que quiero seguir, pasar la página, de una forma u otra. Tarde o temprano seguiré mis deseos y el los suyos, así que por ahora, podemos sacar provecho de la situación.
La química sobra y los corazones no tienen porque interferir. ¿No? Sólo la lujuria y la atracción sexual son recíprocas entre nosotros, al igual que la amistad y la confianza. Debo meterme bien en la cabeza que eso no cambiará, aunque me cuesta y hasta me duela hacerlo. Así debe ser.
Froto suavemente mis párpados antes de espabílame y sentarme a la orilla de la cama con pereza y algo de entumecimiento. Mi piel se eriza por el cambio de temperatura una vez que el edredón cae a los rodillas dejándome desnuda de nuevo. Miro sobre mi hombro y una estúpida sonrisa se forma en mis labios al ver a Jared completamente dormido, con el cabello hecho un nido de aves, la boca abierta y los brazos acomodados de una manera extraña sobre su cabeza.
