Our Secret ~ Pablo Gavi

Capítulo 37.

Gavi me llevaba a casa para cambiarme, ya que Nico tenía la reserva en el restaurante, se tenia que presentar en él.

-Entonces, ¿Qué te pondrás mañana? -preguntó el sevillano. O mi casi algo, jiji.

-No te voy a decir, solo te dire que es un vestido.

-Joder, puedes mostrármelo.

-Mhm...Nop.

Llegamos a mi habitación y busqué una falda blanca y un top celeste.

Estaba en ropa interior, en el baño, Gavi en mi habitación, cuando recordé que me faltaban mis tiras celestes del sujetador, para que se camuflen un poco con ese top.

-¡Pablo!

-¡Dime!

-¡Cerra los ojos, que tengo que buscar algo y estoy en ropa interior!

-¡Valee!

Salí a mi habitación a buscar esas tiras, en ropa interior, Gavi no veía.

Estaba de espaldas a Gavi, cuando sentí sus manos en mi cintura, su boca en mi mejilla y dejando besos en ella.

-¿Qué haces? -pregunté.

-Besarte -dijo antes de darme vuelta y deborar mi boca.

Su mano bajaba por mi abdomen, haciéndome poner nerviosa.

-¿Puedo? -preguntó con su mano en el comienzo de mi braga.

Asentí.

Sus dos dedos en mi interior se movían con agilidad y rapidez.

-Sí, correte, hazlo -dijo con su boca en mi cuello.

Algunos jadeos salían por mi boca, a la vez que él besaba mi cuello.

Me corrí con sus dedos en mi.

-Vete a cambiar, si no quieres llegar tarde -dijo besándome.

Sacó sus dedos de mi interior y fui a cambiarme.

Me limpié y me cambie.

Llegamos al restaurante unos veinte minutos después.

-¿Por qué tardaron tanto? -preguntó Balde.

-No encontraba mis zapatos -dije nerviosa.

-Vamos a ordenar -dijo Sira feliz.

Pedimos sushi, EL MEJOR SUSHI QUE PUDE PROBAR.

Estaba riquísimo.

-Esta exquisito -dijo Ansu -. Pero no sé como es usan estos palos -dijo clavando uno de ellos en una pieza de sushi.

-Así no, Ansu -reí.

Ayudamos a que los use bien y se dio cuanta que siempre los usó mal.

-¡Vamos a brindar por nuestra graduada! -gritó Sira con una copa de Champán en su mano.

-¡Por la graduada! -gritamos todos.

Tomamos un sorbo luego de golpear las copas, una con la otra.

Se armaron pequeños grupos, Sira, Mikky, Caro y yo en uno, Nico, Balde y Ansu, otro, Gavi, Pedri y Ferran, el último.

Estaba hablando con Sira y Mikky.

-Ya vengo, voy a buscar a Gavi.

-Valee -dijieron.

Ellos estaban en unos sofás cerca de la entrada, de espaldas a mi.

Llegue donde ellos y escuché algo, un poco antes de hablar.

-Entonces, ¿Cómo vas con la apuesta de Martina? -preguntó Pedri.

-¡Shh! Te puede escuchar -dijo el sevillano.

-¿Qué? ¿Te enamoraste en serio? -preguntó Ferran, ahora.

-Lo hablamos luego, callar, que os puede escuchar.

-Ya escuché, Gavi -dije con mis ojos cristalizados.

-¿Qué? -dijo dándose vuelta, mirándome -. Espera, Martina, puedo explicartelo -dijo viniendo hasta a mi.

Salí del restaurante con lagrimas en mis mejillas y triste.

El mejor día, terminó siendo el peor.

-¡Martina! -gritó Gavi.

Gavi corrió hasta a mi, me alcanzó.

-Espera, nena, puedo explicarte.

Su apodo "nena" paso de ser 💘💕💗 a ser un vacío.

-Nena nada, Gavi, nunca fui ni voy a ser tu chica -dije triste.

-Quiero explicarte -habló con sus ojos cristalizados.

-¿Explicarme como vos y tus amigos se reían de mí?

-¡No! -gritó desesperado.

-¿Por qué lo hiciste?

-Quería... -un silencio.

-Genial -dije sarcásticamente.

Subí a un taxi y fui a mi lugar favorito.

La playa de noche.

Llegué con lágrimas en los ojos.

Me senté contra un mural que había ahí, mi celular en mis piernas, yo mirando al mar, pensando en como me usan siempre.

Luca, mi ex, Julián, mi otro ex y ahora Gavi.

¿Qué hago mal?

Mi celular vibraba en mis piernas, llamadas de Nico, Gavi, Sira, Mikky, Caro, Ferran, Ansu, Balde y Frenkie inundaban mi celular.

Atendí a Frenkie.

-¡Martina! -gritó el holandés.

-Frenkie, estoy bien.

-¿Dónde estás? -habló Nico preocupado.

Colgué.

No iba a decirle, eran las 02:41, era tarde, pero quería estar sola.

Pasado mañana nos íbamos a Argentina.

05:34 a.m.

Entré a casa con mis llaves y estaban todos en el sillón con cara de preocupados.

-Por fin, Martina -dijo Nicolás levantándose.

-Perdón -dije antes de subir las escaleras.

-Veni -me dijo Nico.

-¿Qué? -dije cabizbaja para que no noten que lloré.

-¿Por qué te fuiste? -preguntó Sira abrazándome.

-Perdón, no tengo ganas de hablarlo.

-Martu... -dijo Pedri tratando de agarrar mi brazo.

-Voy a mi habitación -dije ignorandolo.

-Espera -dijo intentado agarrarme del brazo nuevamente.

-¡ANDATE A LA MIERDA, PEDRI! -grité.

Llegue a mi habitación y me duche.

Me hice mi skincare y cuando salí del baño vi a Gavi sentado en mi cama.

-¿Podemos hablar? -dijo arrepentido.

-Andate -no se fue-. ¡Ya! -grité.

Se fue y yo me puse mi pijama.

Me dormí, después de tantos intentos.

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¿Alguien acompaña a Martu a hacer la lloración?

Yo voy 🙋‍♀️.