Our Secret ~ Pablo Gavi

Capítulo 12.

El partido finalizó con un 2-0 a favor del Blaugrana.

Estábamos pensando en ir a cenar a casa de Balde, queríamos ir a la discoteca pero mañana, temprano salía el vuelo para ir a Argentina con Nico y Caro.

Por lo que dijimos que no, que solo íbamos a la cena y los demás si querían iban a la discoteca.

Llegamos a casa y fui volando a bañarme.

Tarde unos 30 minutos bañandome, me gusta darme duchas relajantes.

Estaba decidida de ponerme una falda con brillos y un crop top blanco.

Llegamos a casa de Ale y nos abrió Frenkie.

—Holaa —dijo Frenkie.

—Hola bro.

—Holaa.

—Hola fren —dije, me acostumbré a decirle así.

Llegamos con todos y nos sentamos en unos sofás que había fuera.

No entrabamos todos, por lo que Mikky se sentó arriba de Frenkie y Sira de Ferran.

Yo no tenía lugar por lo que me quedé parada.

Me podría haber sentado en el regazo de mi hermano, es algo que siempre hacía cuando no había más lugar y obvio que a Caro no le molestaba.

Gavi golpeó dos veces su regazo, insinuando a que me sentará allí.

—Ven.

—¿Seguro?

—Sí, ven —dijo.

Fui con él y me agarro la cintura, sentándome en su regazo a la vez que hechaba mi cuerpo hacia atrás para quedar juntos.

Mi espalda en su pecho y mi cabeza en su hombro.

Comimos así, como estábamos, unas pizzas, mientras hacíamos chistes y contábamos cosas.

Lo que más se habló fue lo del partido.

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Aterrizabamos en Ezeiza junto a otros jugadores.

El seleccionado argentino se iba a quedar en el predio Lionel Andres Messi, mientras que nosotras, las parejas y los hijos, bueno, yo me quedo aunque sea la hermana de Nico, porque no tengo más familia, nos quedábamos también ahí, pero en otro piso.

Los jugadores se quedaban en el piso 8, los familiares en el 7 y cuerpo técnico en el 6 y 5.

Llegamos a las habitaciones, la mía era la 709, 708 la de Caro, 707 la de Tini y 710 la de Ori, esas eran las que me rodeaban.

Dejamos las maletas y acomodamos un poco nuestras habitaciones.

Había saludado a la mayoría de chicos, pero me faltaban algunos.

Los iba a saludar ahora en el almuerzo.

Me puse el buzo de la selección con el short de Boca.

Me traje toda ropa deportiva, de Argentina, Boca, Barça, City, Inter Miami, Tottenham, etc.

Traje solo ocho vestidos, para las noches, íbamos a estar más tiempo, pero íbamos a ir de shopping.

Bajamos con las chicas al comedor.

Ahí estaban Enzo, Juli, Cuti y Ota.

—Holaaa —dije abrazando a Cris.

—Hola piba —dijo Enzo.

—Hola martinita —dijo Ota.

—Hola, bonita —dijo el calchinense.

—Tanto tiempo.

—Ahora vos que te fuiste a Barcelona y nos cambias por los españoles y los culés.

—Vos vas a ser mi central favorito siempre, Cris.

—¡Ey! Yo también soy central.

—Bueno, vos también.

—Más te vale.

Enzo y Juli me miraban ofendidos.

—Te diría que sos mi delantero favorito, pero todavía existe Lauti.

—Vaa, matate nena.

—Te quiero igual.

Fuimos a la mesa que nos tocaba, era la que íbamos a ir en estas tres semanas.

Ori, Tini, Caro, Valu, Anto, Cami, Jor y yo.

Esa era nuestra mesa.

Almorzamos unas ensaladas con pollo, mi comida favorita.

Después del almuerzo, los chicos fueron a prepararse para ir al entrenamiento.

Nosotras subimos a ponernos las bikinis y fuimos al ascensor para bajar a la pileta.

Estaban Dibu, Lean y Fideo.

—Holuu —dije.

—Tanto tiempo —dijo Lean.

—¿Los otros están abajo?

—Sí, Emiliano, treinta veces te lo dije —dijo Fide.

—Uhh, bueno chabon.

—Le faltan caramelos al pobre —dije cuando las puertas del ascensor se abrieron.

—¡Veni para acá! —dijo Dibu siguiendome.

Yo estaba corriendo por todo el Hall para llegar a los otros chicos.

—¡Cuti! ¡Cuti! ¡Cuti! ¡Cuti!

—¿Qué haces así nena? —dijo viéndome que estaba solo en bikini.

—¡Dibu me está persiguiendo! —dije subiendome a upa de Cris.

—¡Veni para acá!

Emi me agarro de la cintura y me soltó de Cuti.

Todos se estaban riendo a carcajadas.

—Salii.

—¿Qué dijiste?

—Que te faltan caramelos en la bocha.

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Tarde pero seguro!