Estaba tranquila viendo una película en el sofa, precisamente "Culpa Mía".
Hace mucho que deseaba verla.
Mi Tik Tok me hacía muchos spoilers y como hoy tenía casa sola.
Culpa Mía + Pochoclos = Plan ideal.
Al poco tiempo que terminé la película, Caro y Nico llegaron con la cena.
Les había pedido que me traigan sushi, y como Caro convenció a Nico, tengo sushi para comer.
Comí sola, mi hermano y mi cuñada ya habían comido.
Termine y subí a mi habitación, agarré mi móvil y...
Oh, sorpresa...
Pablogavi te ha enviado un mensaje de voz.
¿Qué? Pero, no entiendo nada.
No lo abrí, me duche, puse mis cremas y ahí si, abrí el mensaje.
II |I|I|II|I|I||I|I 0:05
{Hombre, fuiste tú, pues, me
la pagas, niñita}¿Pagarle? ¿Por una mancha que sale con jabón?
Bueno, tal vez, la mancha de café no era tan fácil de sacar, pero ni loca le pagaría eso.
Y si, otra vez, me despertaban, pero esta vez fue Caro. Amaba que me despierte ella, se sentaba en mi cama y me hacía mimos por la cara y el pelo.
Así si me gustaba que me despierten, Nicolas era una bestia, me tocaba la puerta y encima gritaba.
—Buen día —dije sonriendo.
—Buen día, linda, anda a cambiarte que tenemos que irnos —dijo Caro.
Yo asentí y me pusé un short negro con un top azul y un buzo blanco.
Hacía un poco de frío.
—Holaa —dije saludando a Nico.
—Hola, pendex —siempre me decía así.
Yo reí y luego tomamos rumbo al entrenamiento.
Llegamos, pero esta vez estaban Sira, Ferran, Pedri, Frenkie y Ronald, esperándonos.
Como no, Gavi también.
—Menos mal que llegas, Nico —dijo Frenkie.
—Perdón, buenos días, chicos —dijo mi hermano.
—Hola, chicos —sonreí, Caro y yo les dimos dos besos a cada uno, al llegar con Sira —. Chicas, miren —dije sacando la carta.
—¿Y eso? —dijo Caro.
—No lo se, creo que fue Gavi —dije susurrando.
—¿Yo qué? —dijo este al pasar por detrás mio.
—Sira, ¿me acompañas al baño?
—Claro, vamos —dijo Sira.
—Esperenme —dije.
Sentí como Gavi agarró mi brazo y me giro para verlo.
—¿Yo qué?
—Vos...vos... vos nada —dije nerviosa.
—Dime
—Que vos me enviaste la carta amenazandome.
—¿Una carta amenazandote?
Yo asentí y deje la carta en sus manos para luego irme con las chicas.
—Martina, espera —dijo él.
—Gavi, en serio, que solo fue una mancha sin querer —dije caminando cada vez más rápido.
—Lo sé, pero yo no escribí esto.
Lo ignore y comencé a correr hasta llegar a las chicas.
¿Dónde estaban? Del otro lado del predio y yo con Gavi corriendome detrás.
Llegué a ellas, Gavi había dejado de perseguirme y lo agradecí.
—¿Qué te ha dicho?
—Que él no había sido.
Seguimos hablando un poco más, hasta que terminó el entrenamiento.
Y como siempre, los chicos vinieron.
—Chicas, vienen los chicos a casa —dijo Nico mirándonos a Caro y a mi.
Nosotras asentimos.
—Sira, veni.
Ella asintió y después del entrenamiento ya estaban todos en casa.
—Nico, yo no quiero almorzar —dije mirando mi celular.
—¿Por qué?
—No tengo hambre.
—¿Enserió?
—De verdad, no tengo hambre —dije mirándolo.
Nico asintió.
—Nos vemos después, chicos —dije sonriendo.
Ponte-ponte pa' la vuelta
que yo voy pa'l partySi no nos vemo', mami,
en el after partyPonte pa'l problema, ándale,
déjate verLo que aquí empezamo' lo
matamo' en el motelTú estás suelta por ahí, yo
estoy suelto por acáHacerte el wiki wiki, como
dice YaviahEsa melodía se escuchaba desde mis audífonos.
Estaba con los ojos cerrados, el volumen al máximo y la cabeza para arriba, cuando sentí que alguien se sentaba en mi cama.
Abrí los ojos lentamente y vi al futbolista del Barça, el sevillano.
—¿Qué haces acá? —pregunté bajando el volumen de la música en mis audífonos.
—Le dije a los chicos que he ido al baño, pero quiero hablar contigo.
—¿Por qué? Necesito bañarme.
—No escribí esa carta.
—¿Todavía sigues con eso?
—Hombre, dices que es una carta mía amenazandote y eso no es verdad.
—Gavi, no importa, me iré a duchar.
Sin esperar respuesta, entré en mi baño para encender la ducha.
Me saque mi top, quedando en sujetador cuando Gavi entró.
—¿Qué haces, Gavi? —chille.
—Sh, shh—dijo cerrando la puerta.
Me tapé con una toalla que había y Gavi me miró extrañado.
—¿Qué?
—¿Por qué te tapas?
—Porque estoy en sujetador.
—¿Y? Como si nunca hubiera visto una tía en sujetador.
—La diferencia es que tu a esas chicas las conoces, a mi no.
—¿No?
—No.
—Sé que te llamas Martina, también que tienes 17 años y tu hermano juega conmigo.
—Me quiero duchar.
—Hazlo —dijo sentándose en el retrete.
—Fuera, no me pienso duchar contigo en el baño.
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Our Secret ~ Pablo Gavi
RomansaComo miles de personas más, Martina, debía dejar su casa, nuevamente. De Argentina a España, de nuevo a Argentina, luego Paises Bajos y Francia, de allí a España, ese fue su recorrido de vida. ¿Por qué? Su hermano, Nicolás, jugador de fútbol profesi...