Capitulo 36

1K 75 10
                                    

Su corazón latía tan fuerte que Hyera podía sentir el pálpito golpear en su pecho. Su agarre era tan violento como si un depredador la sometiera impregnandola de cálor y deslizandole la lengua sobre el cuello. Las piernas le temblaban. Un escalofríos subió por su espina y a la vez su zona íntima se estaba humedeciendo. ¿Como un hombre podia irradiar tanto deseo? Bajo la tela de su pantalón su virilidad estaba tan dura que ardía incontenible.

Jk: Quiero que seas mía.. - susurró rosando sus gruesos labios al oído. A la peli rosa se le ruborizó tanto el rostro como las orejas. Cada palabra eléctriso su cuerpo. Jaek no tardó tanto en subir su falda y tomar cada glúteo entre sus manos con fuerza. Una bofetada directa quemándole una nalga bastó para derretirla. - Me gustas Hyera, me vuelves loco. - dijo presionandola más hacia él y besando con deleite su tersa mejilla. Para Jaekyung no había sabor más dulce y placentero que quererla... Querer su lujuria, su egoísmo, su falsedad y cada parte cruel o sádica en ella. Muy en el fondo sabía que había una niña

Hyera: ¿N-no crees que vas demasiado ra-rapido?.. Jaekyung.. y-yo —tapandole los labios tiernamente con ambas manos— deberás que me gustas y estoy feliz de verte, pero.. es muy repentino que me lo digas así.

Jaek la tomó de las muñecas para hablar claramente.

Jk: No es muy pronto, se lo que siento, no soy un tonto.. -tomandola por debajo del muslo y cargandola- Crees que para mí es solo sexo y ya, no tienes idea de lo que me importa que quieras estar a mi lado, ¿Cuántas veces tengo que demostrarlo?

Hyera reconoció que tenía un punto, nadie pagaría tanto por un mísero perdón y teniendo un orgullo como el suyo. Eso le sacaba el peso de la duda. Ahora quería saber si era capas de sostener esa actitud tan comprensible y amable, ¿y si así fuera? ¿Que haría teniendo un hombre enamorado? Definitivamente esa responsabilidad y compromisos no eran propios de ella, temía traicionar la buena voluntad de un hombre capas de cambiar.. ¿Pero porque ahora eso le resultaba otra carga? Muy en el fondo estaba maldiciendo.
Solo tragó con dificultad con el pecho afligido y un nudo en la garganta. Con sus manos tomó el rostro de Jaek, este era frío y húmedo, su textura era como él pan tostado, pero aún así era demasiado guapo. En los labios del peli negro se formó una sonrísa ladina, era como si disfrutará de su calido rose, en sus ojos había un brillo, no de esperanza, no de inocencia sino de admiración..

¿Porqué? ¿Que vió en ella?

Para la Peli rosa esto ya no era divertido.. era triste

Jaekyung no parecía darse cuánta que ella no era para él.. o si lo sabía decidía ignorarlo por completo.

Hyera: Eres adorable - admitió deslizando su pulgar en aquellas mejillas.

Jk: Quiero metertela.

Desesperadamente TUYO [Hyera x Jaekyung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora