¡Basta!

Enfermería

Luego de escuchar el relato de los niños, ambos adultos los tranquilizaron, diciendo que averiguarían sobre lo que pasa, y que tan pronto tengan noticias de Wei Wuxian se las harían saber, ellos se retiraron dejándoles solos.

–Tío, creo que esto tiene que ver con los ancianos–, –seguramente, me sorprende que hayan llevado esto tan lejos, y que él lo haya permitido–.

–Si me disculpa, iré a ver al joven–, el mayor asintió, –hablaré con tu hermano, esto se está saliendo de las manos–.

°•°
–Señor, líder de secta– saludaron las dos almas del lugar, aunque habían prohibido el paso, a él no se lo podían negar, rápidamente se dirigió donde vió la silueta de alguien más.

–Está dormido ahora, hemos aplicado medicina para que el dolor sea llevadero–, comentó Ming, –líder, disculpe la intromisión pero, ¿por qué el joven Wei está siendo lastimado?–, el deje de preocupación era palpable.

–También me gustaría saber eso, pero antes, ¿me pueden decir como inició todo esto desde su perspectiva?, por favor–, no había sonrisa en su rostro, sin embargo, su voz aún era suave y amistosa, el enojo no era con ellos.

–Todo inició el día que lo trajo, señor. Después de que lo curamos, al siguiente día él despertó y comió un poco, sin embargo, por la madrugada vinieron miembros de la secta y se lo llevaron–.

–Lo estuvimos buscando un rato, aún no terminaba el tratamiento pero lo encontramos tirado en alguna parte, con más heridas e inconsciente, lo atendimos hasta que despertó, eventualmente esto se repitió por alrededor de casi dos semanas– concluyó Ming.

–Lo buscábamos y lo encontrábamos lastimado, él no nos quiso decir nada, pero se convirtió en algo casi diario el tenerlo aquí–.

–La última vez, su cuerpo estaba muy débil así que las heridas fueron más profundas, sin mencionar que tiene varias infecciones en ellas por la mala cicatrización y exposición– explicó el doctor.

–Los juniors lo trajeron inconsciente, esta vez demoró más en despertar, pero, cuando lo hizo su fiebre era muy alta y empezó a delirar, le dimos medicación para la infección y el dolor, y un calmante, si está dormido es menos consciente de lo que siente y ayuda a su mejoría–.

–Afortunadamente aún no lo han venido a ver, lo han dejado descansar pero temo que pase, y en su estado, es difícil que soporte más–, la preocupación de las voces también era palpable en la cara del mayor.

–Su cuerpo está muy lastimado, y aunque le pasemos energía, su núcleo sigue siendo débil para poder curarlo rápidamente– concluyeron.

Xichen miró hacia la cama donde yacía el cuerpo dormido del joven, su rostro era preocupación palpable. Desvió su mirada hacia los otros dos.

–En realidad, no sé qué está pasando, se supone que era un castigo por los ancianos de la secta, pero esto se ha alargado y viendo su estado, se convirtió en prácticamente tortura, Wangji está al tanto, pero parece no hacer nada por detenerlo–.

–Les agradezco por cuidarlo hasta ahora, sé qué también están preocupados, así que intentaré hallar una solución, avísenme si lo vienen a ver de nuevo, por favor–.

Al finalizar, ambos asintieron, el pequeño Ming estaba intentando no llorar, luego de lo dicho, ambos estaban en shock, le habían agarrado cariño a aquel que para ellos era un niño, si esto seguía, jamás mejoraría.

–Puedo... ¿Puedo quedarme un rato?– preguntó con duda, –por supuesto, siéntese, estaremos cerca por cualquier cosa– salieron de la especie de habitación dejando al de brillante sonrisa con el cuerpo del que alguna vez también la tuvo.