Capitulo 9: Saludos para la Princesa

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Coryanne me insistió tanto de ir al barco nuevamente, que terminé accediendo a su petición.
En esta ocasión, dejé los vestidos a un lado y los cambié por un pantalon marrón y una camisa holgada blanca para estar mas comoda.

Llegamos al puerto, está vez en un carruaje con dos guardias y acompañadas de Addam y Aliandra. Compramos vino y licor de datil muy cerca del puerto.

La mayoría de la tripulación había salido a divertirse a las casas de Placer y a pasear por el pueblo. Solo estaban Elia, Edward y 5 tripulantes que estaban descansando en los camarotes.

Dejamos a los dos guardias cuidando las puertas del pasillo que daba a los camarotes principales y nos metimos a la recámara de Addam para beber y pasar el rato.

-No Coryanne. Tu solo beberás una copa de vino.
-Por favor Aliandra, solo déjame probar un poco del licor de dátiles.-suplico con sus manos pegadas como si fuera a rezar.
-Ya dije que no, así que no insistas.

Coryanne fruncio el ceño enojada por la prohibición que le estaba dando su hermana, pero Elia sabia que bailar era algo que siempre mejoraba el ánimo de la princesa. Asi que ambas amigas comenzaron a bailar y me jalaron en el proceso para enseñarme
algunos pasos.

-Creo que el licor me chocó un poco. -Aliandra se levantó de la silla.-Iré a tomar aire ¿Me acompañas?-pregunto a Addam.
-Claro, princesa.

Ambos salieron y nos dejaron solas, tendidas en la cama cansadas de tanto bailar.

-Ya que tu hermana se fue.- me pare de la cama.- Vamos a brindar por mi primer dia de clases de bailé.-servi en tres copas un poco del licor.
-¿Enserio me dejaras tomarlo?
-No serví tres copas por las puras. ¡Vengan!

Coryanne se paró de la cama entusiasmada siendo seguida por Elia.

-Brindo por las mejores profesoras de baile. -alce mi copa.
-Y nosotras brindamos por la mejor alumna. -Elia asintió levemente.

Elia y yo saboreamos el dulzor del licor antes de dejar que siguiera su rumbo por nuestra garganta. Pero Coryanne lo tomo de golpe y empezó a toser por el ardor que le generó.

-Primero tenías que saborearlo. -dijo Elia riendo.
-Debieron decirlo antes. -continúo tosiendo. —Pero está bueno. ¿Me sirves un poco más?
-Este es el último, si no tu hermana me mata. -serví nuevamente.

Esta segunda vez, Coryanne bebió el licor como le indicamos.

-Está mucho mejor. - asintió con una sonrisa.
-Volviendo al tema del baile ¿Qué es lo que suelen usar cuando danzan?
-El traje tradicional se divide en dos partes, una falda vaporosa que va a la cintura y un top pegado con mangas o si no también puede ser de tirantes. Te mostrare cuando lleguemos al palacio. -explico Coryanne.
-Pero también puedes usar un vestido que tenga la falda un poco vaporosa. - Elia sirvió vino en su copa.-¿Quieren?
-No, gracias. -rechazo la menor.
-Yo si quiero. -extendi mi copa.-¿Les dejaban usar vestidos en la casa de placer? Pensé que las chicas tenían que estar desnudas

Recordé que la noche que las conoci, la mayoría de las mujeres estaban semidesnudas o desnudas por completo. La única que estaba con vestido esa noche era Elia, que se la pasaba repartiendo vino a las mesas.

-En la casa de placer nos separaban en dos grupos, las chicas que en su mayoría estaban desnudas eran las que se acostaban con cualquiera que pagará unas cuantas monedas; y el grupo al que yo pertenecia era solamente para los clientes que pagaban más, o que pagaban para que fueras exclusiva de uno de ellos.
-¿Quién pagó por ti?
-Un noble de Tyrosh.
-¿Tus danzas también eran exclusivas para ese noble?
-Debieron serlo. Pero el dueño de la casa de placer nos seguía usando como bailarinas y sirvientas. Para bailar nos poníamos un top que solo cubría nuestros pechos y una falda con telas delgadas, y para servir vino a los clientes usábamos vestidos sencillos.
-¡Tengo una idea!- chasquee los dedos.- Pero para eso necesitaremos papel y tinta. Iré a traerlos de mi camarote.-me aproxime a la puerta.
-¿Para que los quiere?- cuestiono Elia.
-Para dibujar como quiero mi traje tradicional.

Ambrosía de Dragones Donde viven las historias. Descúbrelo ahora