2

535 65 3
                                    

Eran las ocho de la mañana, Lisa y Jisoo un duo conocido por ser el más caótico de su grupo se encontraban poniendo la mesa para desayunar. Generalmente son pocas las ocasiones en las que disfrutan de comer juntas, puesto que sus trabajos demandaban mucho tiempo desde temprano. Pero por esta ocasión cancelaron todas sus actividades cuando su amiga que no habían visto hace mucho les aviso que vendría a Corea para visitarlas.

La unnie y maknae del grupo formaron una bonita amistad desde hace doce años, cuando la mayor se convirtió en un gran soporte para que Lisa debutará. Después de que Blackpink se separó y cada una tomó caminos diferentes en cuanto a su carrera, se fue forjando una linda relación.

El cómo sucedió aún sigue siendo un misterio para todos, pues ninguna de las dos ha querido develar detalles sobre el inicio de su noviazgo. Sin embargo eso era lo menos importante, pues para sorpresa de muchos su relación fue bien acogida, especialmente por los fans internacionales, claro que no faltaban uno que otro comentario desaprobandondolas. Pero no le prestaban atención, solo les importaba seguir recorriendo juntas los nuevos capítulos de su vida.

Desde una esquina sin la intención de ser vista, se encontraba Jennie observando a la pareja frente suyo conversando amenamente. A su mente vino que así se verían Rosé y ella ahora, en una relación tranquila y sin necesidad de ocultarse.

Jisoo mientras terminaba de poner los platos visualizó a Jennie. - Jendukie, Lisa me contó lo de hace rato, ¿ya te sientes mejor?

- Si, gracias. -Se acercó a la mesa al ser descubierta en su escondite.

- ¿Entonces si nos vas a acompañar? -preguntó Lisa desde la cocina trayendo consigo mantequilla y en la otra mano una jarra de jugo de naranja.

La castaña miro fijamente a sus compañeras atrayendo la atención de ambas. Tomando un poco de aire para dejar ir sus nervios, se sentó. - Si iré. Pero antes necesito contarles algo.

---

Más de diez minutos habían pasado y en el comedor solo se escuchaban los pequeños sollozos de Jennie. Ninguna de las tres había probado bocado alguno ante su confesión.

Jisoo y Lisa tenían expresiones de asombro y molestia mezclados en sus rostros, mientras que la pequeña coreana permanecía llorando frente a ellas.

- Entonces tú y Chaeyoung mantuvieron una relación a escondidas. ¿Desde cuándo?

- Dos años después del debut. -dijo con la cabeza gacha incapaz de ver a los ojos a su mayor-. Y terminamos meses después de que el grupo se separará.

- ¡Fueron novias durante cinco años! -Con una mirada de incredulidad Lisa regresó a ver a Jisoo-. ¿Cómo es posible que no nos hayamos dado cuenta?

La azabache se encontraba en el mismo estado que su novia, no podía creer que dos de sus amigas más cercanas mantuvieron una relación en sus narices durante tanto tiempo y nunca sospecho nada. Pero lo que más le dolía es que no tuvieron la confianza para contárselo.

Jennie se secó las lágrimas. - Éramos muy cuidadosas. En ese tiempo las cuatro vivíamos separadas, así que era fácil reunirnos. Rosé venía a mi departamento o yo iba al de ella, con cuidado de que no se viera sospechoso. Eran pocas las veces que podíamos salir solas, siempre estábamos acompañadas.

- ¿Pero por qué nos lo ocultaron? Somos sus amigas, no ibamos a juzgarlas.

- Rosé quería contárselos desde el primer momento, pero yo le pedí que lo mantuviéramos en secreto por el bien del grupo, aunque solo era una excusa, yo aún no aceptaba que me gustaban las chicas y temía que me rechazaran. -rió ligeramente-. Ahora parece tan tonto haber pensado así, ustedes son novias. Fui realmente una idiota.

Jisoo estiró su mano hasta alcanzar la de Jennie e hizo leves masajes para tranquilizarla. Intentaba comprender a su amiga, no podía imaginar el dolor que estaba sintiendo en ese momento.

- Pero si estaban bien, ¿por qué terminaron?

La castaña empezó a jugar con sus dedos, claro indicio de que estaba nerviosa, lo que hizo no es algo que le causará orgullo y no quería decepcionar a sus dos amigas.

- Le prometí a Rosé que les contaríamos cuando finalizará nuestro contrato. -bajo la mirada recordando-. Cuando eso sucedió ella estaba tan feliz, mientras que yo estaba aterrada, aún no me sentía preparada. Pero cuando me contó su idea de cómo les diríamos, se veía realmente emocionada que no pude negarme. -sonrió melancólica al rememorar la alegría de la australiana en esa ocasión, sus ojos brillaban y la sonrisa en su rostro era la más bella que nunca antes había visto.

- No me digas que terminaste con ella antes de hacer lo que planearon. -Lisa la miró con llamas en sus ojos al pensar en esa idea como cierta.

Jennie negó, tal vez eso hubiese sido menos doloroso.

- ¿Recuerdan que Rosé organizó una cena de reencuentro como grupo en su departamento?

Jisoo asintió. - Creo que fue una semana después de nuestro aniversario de grupo.

- Bueno, el verdadero motivo es que en esa cena nosotras les contaríamos sobre lo nuestro, pero yo no llegué... -tomó agua intentando deshacer el nudo en su garganta, no le gustaba recordar aquello-. Ni esa noche ni el siguiente día. Me fui del país por una semana.

Alzó la mirada encontrando en los orbes de sus amigas lo que temía, Jisoo y Lisa la miraban con decepción y lástima.

- Cuando volví quise arreglarlo, lo juro. Lo primero que hice fue buscarla, pero ella ignoraba mis llamadas, me bloqueó en todos lados, no me abría la puerta cuando iba a su departamento, simplemente no quería verme. -miró a otro lado intentando ocultar la vulnerabilidad en sus ojos-. Entendí que le había roto el corazón-. Su mente le repetía una y otra vez que era su culpa.

- Bueno Jennie, no podías esperar más que eso, la traicionaste.

- Lo sé. -sollozó-. Sé que traicione su confianza, sé que mandé todo a la basura. Pero simplemente no supe cómo actuar en ese entonces. -El miedo esa noche fue su peor aliado-. El resto de la historia ya la saben, ella consiguió trabajo un mes después en un conservatorio de música en Australia y se fue.

Jisoo se mantuvo callada procesando la información, ahora le hacía sentido varios de los comportamientos de sus amigas, como el trato frío de repente de Rosé hacia Jennie, la actitud de la castaña hace un año, el porque ambas evitaban hablar de la otra, o el ambiente tenso que se formaba incluso en virtualidad las pocas veces que hicieron entrevistas.

- Entonces la excusa de que ustedes se pelearon por que no fuiste a la cena sólo era una parte de la historia.

Jennie asintió.

- Siempre pensé que fue una tontería que Chae se enojara contigo de esa manera, me refiero a que entiendo su molestia en ese entonces porque ella organizó todo, pero me parecía muy extrema su reacción.

- Tienes razón. -Jisoo suspiró-. Esto explica muchas cosas.

El silencio se había vuelto a formar hasta que un recuerdo pasó por la cabeza de la menor, haciendo que sus ojos de ciervo se volvieran más grandes.

- Espera, espera, entonces la vez que las vi salir juntas del cuarto de limpieza, no fue por que se les perdió algo, ¿no es así?

La coreana a pesar de las lágrimas no pudo evitar el fuerte sonrojo en su cara. - B-Bueno...

Jisoo giró los ojos, sólo Lisa podía mencionar cosas así en estas situaciones. - Lily, estamos en algo serio.

- Pero, fue durante- -se calló al notar que Jisoo la miraba fijamente, y la tailandesa sabía que esa mirada sólo significaba un pase directo al sillón de la sala si continuaba. Tragó saliva y regresó a ver a Jennie-. Bueno, mejor dinos por qué nos cuentas todo esto ahora.

- No me había atrevido a contarselos antes porque pensé que era mejor continuar así, pero ahora Rosé regresa y no quiero seguir actuando como si nada de lo que les dije no hubiera pasado. Además quiero arreglar las cosas y tengo que empezar haciéndolo bien.

Jennie sentía que se había quitado un gran peso de encima, había dado un gran paso al admitir no sólo lo que alguna vez tuvo con Rosé, sino también en aceptar su error. Esta vez estaba decidida de que el miedo no le volvería arrebatar algo preciado.

Última OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora