𝘈𝘕𝘖𝘛𝘏𝘌𝘙 𝘓𝘖𝘝𝘌 ;
𝘁𝗼𝗱𝗮𝘀 𝗺𝗶𝘀 𝗹𝗮𝗴𝗿𝗶𝗺𝗮𝘀, 𝗹𝗮𝘀 𝗵𝗲 𝗴𝗮𝘀𝘁𝗮𝗱𝗼 𝗲𝗻 𝗼𝘁𝗿𝗼 𝗮𝗺𝗼𝗿.
Una historia de dos almas que se encontraron, se conocieron, y conectaron, pero cuando una de ellas estaba preparada para entregarse, la...
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CAPITOLO PRIMO capítulo uno
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6 am, y Pesaro ya anuncia que será un día soleado. Esperaba que sea una señal del universo, de que las cosas saldrían bien hoy.
Me tocaba rendir el último examen antes de salir a las vacaciones de primavera, examen para el cual me la pasé estudiando la noche entera y ahora me muero de sueño.
Salgo de mi habitación aun algo adormilada, agradezco cuando entro al baño y aún permanece limpio tal cual lo dejó mamá al limpiarlo ayer en la noche.
Las mañanas eran una carrera contra Luca, mi hermanito menor, quien también debe levantarse temprano para ir a la escuela. Yo solía hacerlo media hora antes que él, para poder usar el baño sin tener que aguantar el desagradable olor que deja luego de entrar.
Tomo una ducha fría y rápida, ya me estaba quedando corta de tiempo para alistarme y aún ni siquiera desayunaba. Mi alarma vuelve a sonar, anunciándome que eran oficialmente 6:50 am.
Corro hacia mi cuarto de nuevo. No me alcanzo ni a secar bien el cuerpo cuando ya estoy metiendo los brazos en la camiseta y las piernas en el pantalón de chandal gris. Me coloco las medias y las zapatillas. Voy hacia el tocador y solo me peino las cejas, un poco de máscara de pestañas y mi gloss de siempre.
Me coloco el collar de las dos medialunas, algo que jamás me puede faltar, y el par de aretes de perlas.
Cojo el libro de farmacia, mis llaves, celular, cuaderno de apuntes y el uniforme. A paso apurado, voy bajando hacia el primer piso de casa y al mismo tiempo meto todo en mi cartera.
—Buenos días mamá, buenos días papá —dejo un beso en la mejilla de los dos cuando aparezco en la cocina y los veo. Unos minutos después, aparece Luca —Bom dia, querido, pronto para mais um dia maravilhoso de aula?
—No son buenos días. —responde, malhumorado.
Me burlo de su sufrimiento por tener que ir a la escuela, lo que no sabía era que no se iba a librar de eso muy pronto, tenía mucho por delante.
